Al Athletic le dejó un sabor agridulce el empate conseguido en la visita al Espanyol. Todos los análisis post partido y las declaraciones de técnicos y jugadores coincidieron en que el equipo rojiblanco dispuso de ocasiones para llevarse el triunfo.

La falta de pericia en los últimos metros y las intervenciones de Diego López lo impidieron. Marcelino llegó a decir que «parecían tres porteros» destacando que fue como un «pulpo». «Es una gran pena que habiendo demostrado esta superioridad no hayamos sumado los tres puntos», lamentaba el técnico.

Futbolistas como Sancet y Lekue también realizaron manifestaciones similares, al mismo tiempo que reivindicaban el juego realizado por el equipo. La actuación del 8 navarro fue una de las claves del torbellino de oportunidades creado durante todo el encuentro. Sancet ha encontrado su sitio en el equipo y se ve que disfruta sobre el campo. Las ocasiones más claras del primer tiempo surgieron de sus apariciones, pero tanto él como Muniain se encontraron con Diego López. 

El capitán de la Txantrea también se encuentra en plena forma y el equipo lo nota. Es un jugador diferencial en los últimos metros como demostró en el choque ante el Villarreal en San Mamés.

El rendimiento de Lekue, que aportó su segunda asistencia de la temporada, o el crecimiento experimentado por Vencedor en el medio campo son otras de las aportaciones individuales a resaltar. Vesga también intentó dar fluidez al juego, pero la mano inocente en el penalti le volvió a penalizar.

El partido ante el Espanyol fue la puesta de largo del Athletic de los hermanos Williams. Iñaki y Nico formaron parte del once por primera vez y demostraron que su velocidad causa estragos en las defensas rivales. Ambos disfrutaron de oportunidades a la carrera y el hermano mayor logró el gol del empate cuando estaba siendo pitado por parte de la afición local por denunciar los insultos racistas en la última visita.

La presentación de este Athletic que se vislumbra a medio plazo lució con orgullo el sello de Lezama. Los once jugadores que saltaron al campo de inicio han jugado en el filial. Cada uno con sus particularidades -De Marcos y Vesga llegaron desde el Alavés o Sancet desde Osasuna-, pero todos ponen en valor el trabajo que se hace en las categorías inferiores rojiblancas. Asimismo, el Athletic contó con cuatro jugadores de Araba en una alineación -Simón, De Marcos, Vivian y Vesga-, otros cuatro nacieron en Bizkaia -Yeray, Lekue, Vencedor y Williams- y tres proceden de Nafarroa -Sancet, Nico Williams y Muniain-.

En el segundo tiempo entraron otros dos canteranos vizcainos como Núñez y Morcillo, junto con Berenguer y Raúl García -formados en Tajonar- y Dani García, guipuzcoano con pasado en la cantera de la Real y que creció como jugador en el Eibar.

Bajas en defensa para el derbi en Anoeta

Iñigo Martínez no pudo jugar ante el Espanyol por problemas estomacales de última hora. Vivian ocupó su puesto en el once en el calentamiento, pero tuvo que ser sustituido en la segunda mitad por lesión. Yeray disputó los primeros minutos de la temporada y terminó el partido acompañado por Núñez en el eje de la zaga. Marcelino apostó por una defensa inédita recuperando a De Marcos para el lateral derecho y colocando a Lekue en la izquierda. Capa y Petxarroman siguen sin debutar.

El Athletic afronta el domingo una prueba de fuego en Anoeta. Con la Real ubicada en la parte de arriba de la clasificación en Liga, todavía resuena la resaca de la derrota en la final de Copa en abril. Los rojiblancos llegan en una buena dinámica con resultados positivos y deberán recomponer la defensa. Ante la baja confirmada de Vivian con una lesión muscular en la pierna derecha, habrá que esperar a ver cómo se encuentra Iñigo Martínez y si se puede recuperar a Villalibre y Zarraga en los próximos días.