La Ley de conservación del patrimonio natural de la CAV se ha aprobado este jueves en el Parlamento de Gasteiz, en un inusitado ambiente de consenso generalizado y con agradecimientos entrecruzados entre Gobierno y la mayoría de los grupos de la oposición por la disposición a alcanzar acuerdos que se ha dado durante toda la tramitación de la misma.
PNV, EH Bildu, PSE y PP+Cs han votado a favor de la ley, Elkarrekin Podemos-IU ha votado en contra y Vox se ha abstenido y ni ha intervenido en el debate, la conservación del patrimonio natural no debe ser algo que interese a la extrema derecha española.
El pleno ha comenzado con la intervención de la consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, Arantxa Tapia, que ha recordado que la ley a aprobar tiene por objeto la protección, conservación, gestión, uso sostenible, restauración y mejora del patrimonio natural vasco.
Ha destacado la biodiversidad existente en la CAV, ofreciendo los dato de que «con algo menos del 1% del territorio de la Unión Europea, acogemos aproximadamente el 35% de los hábitats de interés europeo, el 21% de las especies de fauna y el 2% de las especies de flora, entre los que se encuentran 14 hábitats de interés continental y 4 especies de interés prioritario».
Además ha incidido en que «nuestro bienestar y el de generaciones futuras dependen de la conservación de ecosistemas sanos que contribuyan a regular inundaciones, absorban gases de efecto invernadero y nos protejan de eventos meteorológicos adversos y de futuras pandemias»
La consejera Arantxa Tapia ha desgranado también las mejoras que el proyecto de ley remitido por su Gobierno ha tenido en el trámite parlamentario gracias a las aportaciones realizadas por los PNV y PSE, así como por EH Bildu y PP+Cs, la mayoría de cuyas enmiendas fueron aceptadas o transaccionadas.
En el antes referido capítulo de agradecimientos, poco común en los debates parlamentarios, ha mencionado expresamente a Luis Javier Telleria, que ha dirigido la negociación por parte del PNV, a los portavoces de los grupos y también a personas de fuera de la Cámara como Elena Montero, viceconsejera de Medio Ambiente en la pasada legislatura con Iñaki Arriola, Amaia Barredo, viceconsejera en la actual, e Iñaki Aizpuru, alcalde de Itsasondo y miembro del equipo de EH Bildu.
EP-IU mira a EH Bildu
El único grupo que ha votado en contra de la ley ha sido Elkarrekin Podemos-IU, que considera que no responde a la crisis medioambiental actual, «nace muerta por sus lagunas legales» y apenas obliga a nada. Según ha explicado Miren Gorrotxategi, «la finalidad principal de esta ley puede ser la de no poner ningún obstáculo a las actividades económicas que se prestan o se prestan en los espacios protegidos del patrimonio natural. Y todo ello, además, también supone saltarse las leyes y objetivos medioambientales que a veces nos vienen de Europa».
Gorrotxategi ha criticado que las enmiendas aprobadas son superficiales y ha mencionado expresamente algunas de las presentadas por EH Bildu. Lo ha hecho en su primera intervención y en la segunda, prácticamente, solo se ha centrado en ello descalificando algunas de las propuestas del grupo independentista.
En su primera intervención, el parlamentario de EH Bildu Mikel Otero ha destacado que «estamos en crisis ecológica y hay que abrir toda la caja de herramientas, empleando en cada caso la más adecuada». Ha recordado que de las 109 enmiendas presentadas, se aceptaron desde un inicio 47 y se ha llegado a acuerdos en otras 30».
Según ha explicado, con sus aportaciones se han mejorado el órgano de coordinación, el sistema de registro, los corredores ecológicos, se ha regulado la gestión de los hábitats, se ha incrementado la financiación aunque hubieran preferido llegar a más y se aumentará la plantilla de la Administración dedicada a esta materia, al tiempo que se ha rehecho el capítulo de sanciones. Ha concluido que hay aspectos en los que todavía la ley se queda corta.
Mikel Otero se ha dirigido a Arantxa Tapia para señalar que ahora se ha aprobado la ley pero queda el gran trabajo de ponerla en marcha, que corresponderá al Gobierno, mientras que «a nosotros nos corresponde el control de que eso se haga».
En su segunda intervención, Otero ha señalado que no tenía intención de tomar la palabra, pero «Miren Gorrotxategi lleva todo el rato buscándome y me ha encontrado. Quieren marcar diferencias, mirando a determinado sector y levantar la bandera verde. No hay problema, para ustedes la bandera verde. Nosotros preferimos otra forma de trabajar». Ha criticado que la posición que ha tenido Elkarrekin Podemos-IU en la tramitación de esta ley, con planteamientos que se saben imposibles y sin moverse de ellos, «no es forma de avanzar».