Con mayor holgura de la prevista, el candidato de la izquierda Gabriel Boric se ha impuesto en la segunda vuelta de las elecciones chilenas, en las que se enfrentaba al ultraderechista José Antonio Kast.

Con el 99,47 % de las mesas escrutadas, Boric obtenía un 55,86 % de los votos, frente al 44,14 % que tenía Kast, en unas elecciones en las que se ha registrado una alta participación.

El candidato ultraderechista, que había amenazado con impugnar el resultado en caso de resultado ajustado, reconoció este mismo domingo la victoria de Boric.

«Desde hoy es el presidente electo de Chile y merece todo nuestro respeto», ha señalado Kast, que informó de que ha llamado a Boric para felicitarlo.

El nuevo presidente

Diputado de 35 años y antiguo líder estudiantil, Boric se define como ecologista, feminista y regionalista y quiere ampliar el papel del Estado hacia un modelo de bienestar parecido al de Europa.

Será el presidente más izquierdista desde el Gobierno del derrocado Salvador Allende y el primero que no forma parte de los dos grandes bloques que se repartieron el poder desde el retorno a la democracia en 1990.

Representa a una generación que apenas vivió bajo el régimen de Augusto Pinochet (1973-1990), que repudia el modelo neoliberal que consagró el dictador hasta la fecha y que aspira a transformar el país en un Estado de bienestar con pensiones solidarias, salud universal e impulso de derechos sociales, por la diversidad, las minorías y el medioambiente.

«Un cambio histórico»

«Estamos ante un cambio de ciclo histórico», afirmó Boric en su primer discurso como presidente electo, en el que advirtió de que será «el presidente de todos los chilenos y chilenas, no gobernaré solo entre cuatro paredes».

«Hemos llegado hasta aquí con un proyecto de gobierno que puede sintetizarse en pocas y simples palabras: avanzar con responsabilidad en los cambios que Chile viene demandando, sin dejar a nadie atrás», añadió.

Y avanzó que su gestión apuntará hacia «convertir lo que algunos entienden como bienes de consumo en derechos sociales», así como «garantizar una vida más tranquila y segura», y «profundizar las libertades de todos».

Respecto este último aspecto ha remarcado que en su nuevo gobierno «las mujeres no retrocederán en los derechos y libertades que han logrado a lo largo de la historia».

«Me siento heredero de una larga trayectoria histórica, la de quienes, desde diferentes posiciones, han buscado incansablemente la justicia social, la ampliación de la democracia, la defensa de los Derechos Humanos, la protección de las libertades. Esta es mi familia grande, a la que me gustaría ver de nuevo reunida en esta etapa que ahora iniciamos», señaló.

La izquierda latinoamericana saluda el triunfo

Los líderes de izquierda de estados latinoamericanos celebraron la victoria de Gabriel Boric. Así, desde la vecina Argentina, el presidente Alberto Fernández apuntó a la colaboración con el nuevo mandatario para «fortalecer los lazos» que unen a ambos países y combatir la desigualdad.

De este modo, Fernández se unió a las palabras de la vicepresidenta argentina, Cristina Fernández, quien previamente había trasladado sus felicitaciones a Boric y había expresado que «el pueblo siempre vuelve».

Asimismo, desde Bolivia el presidente Luis Arce saludó la victoria de un candidato que representa «el triunfo del pueblo chileno» y el fortalecimiento de la democracia latinoamericana.

«La democracia latinoamericana se fortalece con base en la unidad, el respeto y, sobre todo, la voluntad de nuestro pueblos», expresó Arce en su perfil de Twitter.

En la misma línea, el mandatario venezolano, Nicolás Maduro, recordó al expresidente chileno Salvador Allende o el músico Víctor Jara, y puso en valor la «contundente victoria sobre el fascismo», en alusión a Kast.

Desde la isla de Cuba, el presidente, Miguel Díaz-Canel, ratificó la voluntad de «ampliar las relaciones bilaterales y de cooperación» entre ambos pueblos y gobiernos tras el éxito de Boric en las presidenciales.

Con la misma idea de seguir «bregando por la unidad» de sus pueblos, el mandatario peruano, Pedro Castillo, se mostró satisfecho por la elección de Boric como presidente electo de Chile.

«La victoria que has alcanzado es la del pueblo chileno y la compartimos los pueblos latinoamericanos que queremos vivir con libertad, paz, justicia y dignidad», señaló Castillo en sus redes sociales.

El exmandatario Luiz Inácio Lula da Silva, favorito para ganar las elecciones del año próximo en Brasil, también felicitó este domingo al virtual presidente electo de Chile, Gabriel Boric, y celebró la victoria de otro progresista en América Latina.

«Felicito al compañero Gabriel Boric por su elección como presidente de Chile», escribió en sus redes sociales Lula, quien en las elecciones que se celebrarán en octubre de 2022 pretende desplazar del poder al ultraderechista Jair Bolsonaro.

«Estoy feliz por la victoria de un candidato democrático y progresista en nuestra América Latina, para la construcción de un futuro mejor para todos», añadió Lula.

Críticas durante la jornada

Las elecciones más trascendentales desde el retorno a la democracia en 1990 estuvieron marcadas por infinitas denuncias de ciudadanos que esperaron durante horas la llegada de buses públicos para poder llegar a los centros de votación. Una situación especialmente crítica en las zonas periféricas de la capital, donde los alcaldes sacaron vehículos municipales para transportar a los vecinos.

Ambos candidatos criticaron la situación, aunque desde el comando de Boric fueron más allá y acusaron al Gobierno del conservador Sebastián Piñera de «boicotear» los comicios.

«Ante la operación del Gobierno de limitar el transporte público en favor de su candidato, llamamos a organizar taxis, colectivos y autos compartidos para trasladar a votantes», indicó la jefa de campaña del izquierdista, Izkia Siches.

El Gobierno reconoció que hubo «episodios de congestión» que afectaron la «fluidez de los recorridos de transporte público», pero descartó cualquier tipo de intencionalidad.