Vecinos y vecinas del barrio bilbaino de Otxarkoaga se han vuelto a movilizar este martes frente a la oficina de Kutxabank, en la plaza Kepa Enbaita Urretxindorra, para denunciar el cierre de la última sucursal bancaria que hay en el barrio.

Tras una pancarta con el lema ‘Kutxabank ez itxi. Con Otxarkoaga no se juega’ decenas de personas han mostrado su enfado.

Tal y como denuncian desde la asociación de familias de Otxarkoaga, este cierre deja sin servicio presencial para gestiones financieras a un barrio de 10.000 habitantes, con el perjuicio que esto supone, especialmente, a la gente mayor que no se arregla bien con las nuevas tecnologías y que a partir de ahora va a tener que desplazarse a la oficina de otro barrio.

Tal y como han recordado las vecinas que hasta hace unos años había tres sucursales bancarias en el barrio, y que con el paso de los años han ido cerrando y ahora se van a quedar sin ninguna.

El próximo martes, 4 de enero, volverán a movilizarse.

Asimismo, la asociación ha vuelto a reclamar al Ayuntamiento de Bilbo un Plan Integral de regeneración socio-económica que cuente con la participación ciudadana. Esta propuesta la llevaron al Pleno municipal el pasado mes de octubre.

Una tendencia en los barrios periféricos

El cierre de sucursales bancarias es algo que cada vez se ve más en los barrios periféricos de Bilbo. Sin ir más lejos, los vecinos y vecinas de Arangoiti realizaron varias movilizaciones en los primeros meses de este año para denunciar el cierre de la última oficina bancaria de Kutxabank.

La entidad alegó como motivo «la necesidad de adaptarse a los nuevos tiempos» y que sus clientes de Arangoiti podrían ir a las oficinas de Deustu.