El director de los servicios de Microbiología y de Enfermedades Infecciosas de la Clínica Universidad de Navarra, Jose Luis Del Pozo, asegura que la variante ómicron «nos está pasando por encima y prácticamente lo único que podemos elegir es a qué ritmo nos contagiamos todos». Ante la oleada de contagios, cree que el sistema sanitario se tensionará aún más en las próximas semanas pero que de la misma manera, habrá una bajada brusca posterior de los contagios.

Asimismo, el experto está convencido de que la extensión de la vacunación va a hacer más leve la gravedad de la variante ómicron, a la que, sin embargo, «es imposible» detener, por lo que la clave reside en «focalizar los esfuerzos en los pacientes vulnerables o con factores de riesgo».

La evolución de los contagios en el Estado español, en pleno pico de la sexta ola y con algo de retraso respecto a lo vivido en Gran Bretaña, constata que ómicron es, según del Pozo, «con diferencia, la variante más transmisible de las que hemos tenido hasta la fecha» y augura una transmisión comunitaria «descontrolada, mucho más si no establecemos unas ciertas medidas de restricción».

Sin embargo, Del Pozo ha puntualizado que el objetivo de las medidas no es evitar los contagios: «Estas medidas de restricción no van encaminadas a parar ómicron, porque esto es imposible, sino que lo que buscan es intentar que la ratio de contagios sea lo más lenta posible por un motivo: evitar la saturación del sistema sanitario». El cual, Del Pozo alerta que ya está «sobrepasado» sobre todo en Atención Primaria.

«La sobrepresión sobre el sistema sanitario va a ir a peor en los próximos días, sin ninguna duda, porque no tomamos medidas hace tres o cuatro semanas, que es cuando las deberíamos haber tomado para evitar esto», pero la reciente adopción de restricciones en horarios, aforos y otros ámbitos de reunión pública «hará que mejore la situación» en aproximadamente un mes.

Firme en su observación de que «esta variante nos está pasando por encima y prácticamente lo único que podemos elegir es a qué ritmo nos contagiamos todos», Del Pozo ha reconocido que las últimas medidas que ha tomado el Gobierno de Nafarroa en lo referente al acortamiento de los confinamientos y las pruebas diagnósticas a cargo del sistema de salud son más acordes a la nueva situación, «porque los recursos del sistema no son infinitos».

Por otra parte, el experto ha visto con buenos ojos el sistema de autodiagnóstico: «Probablemente en este momento no tenga sentido un sistema de rastreo, entre otras cosas porque es imposible rastrear a tanta gente y a tantos contactos. Tampoco el exceso de pruebas PCR y de antígenos en personas asintomáticas». Y es que Del Pozo sostiene que es más efectivo que se haga una selección de los pacientes y, como ya se ha anunciado en Nafarroa, «focalizar estos esfuerzos en pacientes vulnerables o con factores de riesgo».

Asimismo, el experto ha dicho que son medidas que se han adoptado en función de la evolución de la pandemia y el aprendizaje derivado, después poner como ejemplo al «radical acortamiento» de las cuarentenas planteado en Los Estados Unidos de América, «probablemente basado en hechos científicos» porque la variante ómicron necesita de menor período de incubación y es menor su período de contagiosidad.

Por ello, el experto sostiene que tendremos que «evolucionar a replantear las cuarentenas pero con la precaución de saber que estamos asumiendo un riesgo», y en este escenario es donde «la clave está en la información y en la formación del ciudadano de a pie, que debe tener claro lo que tiene o no que hacer», ha dicho tras subrayar la importancia de la responsabilidad individual, aunque haya añadido que se deben dar «unas guías claras».

Vacunación mundial

En lo referente al futuro de la pandemia de coronavirus, Del Pozo ha señalado que «la vacuna es esencial pero insuficiente» para un «problema global» como este, que no conseguirá ser erradicado a no ser que la vacunación llegue también a los países en vías de desarrollo, porque «no puede ser que aquí estemos pensando ya en la tercera dosis o en la vacunación infantil y haya países donde adultos con factores de riesgo que no han recibido ni una sola».

En esa misma línea, este miércoles Tedros Adhanom Ghebreyesus, director de la OMS, ha lamentado y calificado de «vergüenza moral» no haber alcanzado el 40% de la población inoculada en todos los países del mundo.

«Para esto están organizaciones como la OMS, para asegurar que haya una equidad en el reparto de las vacunas, pero ya hemos visto que es muy complicado, pero no solo con el SARS-CoV-2», ha añadido Del Pozo. Y es que hace años que existen vacunas y medicamentos contra enfermedades como malaria, tuberculosis, sida, sarampión o difteria, de las que siguen muriendo numerosas personas en países en vías de desarrollo que no pueden acceder a estos sueros pese a su eficacia.

En cuanto al de la covid-19, el experto ha puesto en valor la creación «en tiempo récord» de vacunas «muy eficaces, buenas y seguras». Aun así, Del Pozo ha insistido en que «las vacunas van dirigidas a evitar ingresos, evitar infecciones graves y evitar muertes. No a evitar infecciones».

Por ello, y dado que «la pandemia seguirá en marcha» hasta que no haya vacunas en todo el mundo, ha asegurado que mientras tanto «seguirán apareciendo variantes y seguiremos teniendo un problema de salud global que tiene una solución muy complicada».

En el contexto global, el experto ha señalado que la SARS-CoV-2 tiene tendencia a generar variantes cada vez más transmisibles pero con cada vez patología menos severa, lo cual «favorecerá» que cada vez haya más gente con anticuerpos y por tanto más protegida.