La plataforma Osasun Bidasoa ha pedido que se paralice el proyecto de reforma del bloque quirúrgico del Hospital Comarcal del Bidasoa y que «se abra una mesa entre Osakidetza, ayuntamientos afectados, profesionales del hospital, sindicatos y la propia plataforma» en la que se analicen «las diferentes propuestas para dotar al nuevo hospital de las necesidades técnicas y sanitarias para las próximas décadas».
En un comunicado, ha advertido de que ha tenido conocimiento, a través del Perfil de Contratación de la CAV, de que la directora general de Osakidetza, Rosa Pérez, firmó el pasado 15 de diciembre la resolución de adjudicación del expediente 2021/01771 de obras para la reforma del bloque quirúrgico del Hospital del Bidasoa por un valor de 4,78 millones de euros a favor de la empresa Construcciones Adolfo Sobrino.
Osasun Bidasoa ha solicitado que «mientras se ejecuten las obras no se den traslados innecesarios que causen trastornos graves a los pacientes», recordando que en el centro presta servicio a cerca de 100.000 personas.
Asimismo, ha mostrado su «asombro» por el modo en que se han «reconvertido las cosas en la planificación de la remodelación del Hospital de Zumarraga, donde no solo se paralizó la licitación, sino que se revertió el proceso para la creación de una nueva planta». Una idea va en línea con las reivindicaciones de la plataforma, que defiende un edificio anexo para el Bloque Quirúrgico.
Según ha explicado, ha recabado apoyos de ayuntamientos afectados por este proyecto, así de partidos políticos, sindicatos y entidades sociales. También han interpelado al respecto a la consejera de Salud, Gotzone Sagardui, pero siguen «sin tener una respuesta desde la consejería, ni desde la dirección de Osakidetza».
Comparecencia en el Parlamento de Gasteiz
En este sentido, conviene recordar que la semana pasada Elkarrekin Podemos-IU registró una solicitud para que la plataforma pueda comparecer de urgencia en la Cámara autonómica para exponer sus dudas y quejas; y anunció la presentación de diferentes iniciativas, en las que se insta a Lakua a que «se contemple la posibilidad de paralizar el proyecto y abrir un periodo de reflexión que sirva para encontrar una solución alternativa que no repercuta de manera tan negativa en el servicio que el hospital».
Insistió en la importancia de «poder ofrecer las máximas garantías a los usuarios del hospital y los profesionales que en él trabajan, para que la calidad asistencial no se vea mermada con la realización de unas obras que, con el planteamiento actual, conllevarían graves consecuencias a la ciudadanía».
Recordó que el proyecto de obra supondría el traslado del servicio de quirófanos a Onkologika durante 18 meses, y pidió «un proyecto alternativo, ya que la comarca del Bidasoa ha de soportar un volumen asistencial en su hospital considerablemente superior al de otros municipios que si han recibido propuestas acorde a sus necesidades», en alusión a Zumarraga.