Tiro con arco a caballo, un deporte milenario
Nos vamos hasta Malasia para conocer de cerca el tiro con arco a caballo, un deporte milenario que empieza a tener cada vez más seguidores, sobre todo en países asiáticos, aunque ya se han realizado varios campeonatos en diferentes puntos de Europa.
Jinetes cabalgando a gran velocidad intentan alcanzar sus dianas dentro de un deporte muy espectacular para el público. Los altos costes de su práctica son uno de los mayores obstáculos para su accesibilidad.Montado en un caballo al galope bajo el sol abrasador, el arquero malasio Zaharudin Rastam Yeop Mahidin dispara una flecha a un objetivo mientras la multitud aplaude.
Es el tiro con arco a caballo, que fue común durante miles de años para la caza y en épocas de guerra, pero disminuyó con la introducción de armas de fuego y otros equipos de combate modernos. Ahora está resurgiendo como un deporte de nicho, ganando un seguimiento cada vez mayor en Malasia y entre un pequeño número de entusiastas en todo el mundo.
Con un atuendo tradicional asociado con la mayoría musulmana malaya étnica del país, Zaharudin es uno de los 28 jinetes que compiten en un torneo en el distrito central de Rembau. El veterano arquero de 59 años dice que se trata del deporte más desafiante pero a su vez más gratificante que jamás ha practicado. El tiro con arco a caballo requiere de un entrenamiento intensivo antes de que los jinetes puedan disparar objetivos mientras se mueven a gran velocidad.
También es un deporte relativamente caro, dado el costo de tener caballos y el hecho de que solo hay unos pocos lugares en el país para poder aprender y practicar. Sin embargo, se está volviendo más popular en Malasia, con alrededor de 100 personas participando, y la comunidad deportiva espera atraer patrocinadores y tener el apoyo del Gobierno, y hacerlo más accesible para el público en general.
Su número de seguidores también ha crecido en todo el mundo, tanto que se han llegado a celebrar torneos en países tanto de Europa como de Asia en los últimos años.
Para los musulmanes de Malasia, que comprenden más de la mitad de los 32 millones de habitantes del país, el deporte tiene un atractivo adicional, ya que el profeta Mahoma alentó tanto la equitación como el tiro con arco. «La gente ve esto como una oportunidad para practicar las ‘sunnahs’ (tradiciones y prácticas de Mahoma)», señala por su parte Zarina Ismail, propietaria del Club Ecuestre Cape Cavallho, donde se ha llevado a cabo el torneo.
Pero para muchos, la dificultad del deporte es uno de sus grandes atractivos, ya que la puntería es una de las armas necesarias para tener éxito en competición, pero no la única. Solo los jinetes con mayor capacidad de mantener el equilibrio serán capaces de mantener el pulso a rajatabla. «Es un deporte desafiante, y a los malayos les gustan un desafíos», asegura Syed Abdul Muiz Syed Alias, presidente de la Asociación de Tiro con Arco a Caballo de Malasia As-Sibaq. Una práctica deportiva que tiene también su lado de espectáculo, por las carreras a caballo y también por los atuendos de sus participantes.