REAL MADRID 89 - BITCI BASKONIA 74
«Mejoraremos, pero ante jugadores como Yabusele, al que no hemos frenado ni siquiera en falta, ni lo hemos obligado a forzar sus lanzamientos, nos comen». Son palabras de Neven Spahija, después de que, sin apretar del todo y con el concurso de dos jugadores como Randolph y Thompkins, que han debutado tras superar sendas lesiones de larga duración, el Real Madrid ha superado a un Bitci Baskonia muy flojo. Perder en el WIZink Center siempre puede suceder, pero como no apriete las tuercas en defensa, el cuadro gasteiztarra difícilmente conquistará ninguno de sus objetivos, así en la Euroliga como en la propia Liga ACB.
«Contra el Real Madrid no podemos aspirar a ganar solo por ataque, pero sobre todo en la primera mitad hemos estado muy flojos», ha sentenciado el preparador de Sibenik.
Los merengues han doblado en rebotes a los gasteiztarras, y la diferencia final ha sido de 15 puntos y no más holgada, porque a partir del 59-39, a principios del tercer cuarto, los de Pablo Laso han levantado el pie del acelerador.
Y eso que les han faltado pilares muy importantes. Con las bajas por haber dado positivo por covid-19 por parte Tristan Vukcevic, Rudy Fernández y Walter Tavares, en este caso ausencia de última hora, Saski Baskonia ha prodigo afrontar el partido del WIZink Center con un poco más de margen. Todavía más cuando Alec Peters, partiendo en el quinteto titular, al fin ha debutado en la temporada 2021/22.
Sin poder parar a Yabusele
Sin embargo, el cuadro de Spahija, pese a que ha empezado más o menos bien en ataque, se ha encontrado con un rival que ha anotado sin fallo en sus cinco primeros intentos, incluyendo tres triples. Por ende, el preparador de Sibenik, que también ha afrontado su retorno tras superar el coronavirus, ha tenido que llamar al orden a los suyos con un 13-6 adverso en el marcador.
La defensa baskonista ha sido muy pobre en este primer asalto, algo que sobre todo Yabusele ha aprovechado para anotar él solo casi más que todo el Baskonia. Después de que con el 23-11 se hayan encendido las alarmas, la aparición de Wade Baldwin ha dado un poco de aire a los gasteiztarras con un parcial de 2-6 para acabar el primer asalto con 25-17.
Con una rotación más amplia que hasta la fecha –que se estirará hasta los 11 jugadores útiles cuando Marinkovic se recupere–, el cuadro alavés ha estado más entonado conforme han avanzado los minutos, aunque ah adolecido de falta de regularidad. Durante un par de ocasiones Bitci Baskonia se ha arrimado hasta los seis puntos, con balón para acercarse todavía más. Sin embargo, cada fallo en el tiro de los gasteiztarras lo ha castigado el Real Madrid en sus transiciones o merced al rebote ofensivo. Un triple de Thompkins, que ha debutado esta campaña tras superar una gravísima lesión de tendón de Aquiles, ha vuelto a obligar a Spahija a pedir tiempo muerto porque el Real Madrid se ha escapado hasta el 39-28.
Pero el tiempo muerto no ha surtido el efecto deseado. En el bando madridista Alberto Abalde ha regresado al parqué con mucho acierto en sus tiros, siendo el cuadro merengue capaz de lanzar con comodidad casi en cada uno de sus posesiones. Mientras, una vez más, los de Spahija han conseguido hallar el camino de la réplica de mano del talento individual, en este caso un triple de Giedraitis y varias canastas encadenadas de Granger.
En todo caso, insuficiente para hacer frente a un rival que ha firmado un 21 de 35 en tiros de campo en los 20 primeros minutos –6 de 14 en triples y un increíble 15 de 20 en tiros de dos puntos–.
La voluntad sola no es suficiente
No le ha hecho falta al Real Madrid apretar el acelerador y el exbaskonista Vincent Poirier se ha permitido el lujo de dejarse los dos tiros libres de un viaje. No obstante, el tercer cuarto ha arrancado con un parcial de 9-4, uniéndose otro ex del Baskonia como Fabien Causeur a la fiesta madridista. Spahija, viendo que el 59-39 no podía ser, ha vuelto a llamar al orden a su equipo.
Esta vez el tiempo muerto y los cambios sí han resultado, mientras que una racha de triples ha supuesto un parcial de 2-9. Lamar Peters le ha echado una voluntad a la defensa gasteiztarra que le ha venido muy bien, pero insuficiente, ya que el cuadro merengue ha conseguido dar su réplica de la mano de Randolph y Abalde. A falta de opciones para remontar, al menos el Baskonia ha frenado la sangría anotadora de la primera mitad, de forma que se ha alcanzado el umbral del último cuarto con 69-50 en el marcador.
Han bajado mucho las constantes del juego madridista y Saski Baskonia ha intentado colarse por ese resquicio de la relajación, en busca de una oportunidad en principio imposible. No ha tenido demasiado acierto en triples liberados de Alec Peters o Giedraitis, pero un «dos más uno» de Baldwin ha puesto el marcador en un 75-64 que ha invitado a hacer un último esfuerzo.
Pero ahí se ha terminado el conato de reacción de los de Spahija. Primero, porque Abalde y Taylor no han perdonado en sendos triples que han clavado. Segundo, porque los gasteiztarras han equivocado sus decisiones en un mal tiro de Giedraitis que pedía el pase, un pase al hueco de Baldwin y el lamento del grupo ante los regalos tan sencillos que han realizado. Solo ha faltado que Trey Thompkins haya clavado un triple más para ponerle la puntilla al encuentro, y evidenciando que a este Saski Baskonia, con el atenuante de las dos semanas sin competición, todavía le queda mucho por mejorar y mucho que afinar, porque de lo contrario, cumplir los objetivos va a resultar mucho más complicado.
FICHA DEL PARTIDO:
Real Madrid: Abalde (15), Causeur (7), Taylor (10), Yabusele (17) y Poirier (11) –quinteto inicial–, Heurtel (3), Hanga (), Randolph (13), Llull (3), Thompkins (10) y Williams-Goss.
Saski Baskonia: Granger (8), Baldwin (16), Giedraitis (10), Alec Peters (8) y Enoch (11) –quinteto inicial–, Lamar Peters (6), Fontecchio (2), Costello (9), Sedekerskis (4) y Kurucs.
Parciales: 25-17, 25-18, 19-15, 20-24.
Árbitros: Radovic, Jovic y Vyklicky. Han eliminado por faltas al baskonista Enoch.
Incidencias: 4.553 espectadores en el WIZink Center. Walter Tavares ha causado baja de última hora por haber dado positivo por covid-19.