Lo ha dicho en el contexto de un mitin electoral celebrado en Ávila, pero lo ha dicho. El secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, ha acusado al PP de haber comprado a los diputados de UPN Sergio Sayas y Carlos García Adanero en contra de la reforma laboral.

«El PP es un partido corrupto, que compra voluntades. Nadie se vende por nada. Han comprado las voluntades de los dos diputados de Navarra Suma, que luego engañaron a su propio partido. Para que esto se dé, tienen que existir dos cosas: alguien que se venda, los dos diputados de UPN, y alguien que los compre. Y ese es el PP, con Pablo Casado y Teodoro Garcia Egea al frente. Al más puro estilo de la mafia».

El PP se ha convertido en el partido del negacionismo democrático. Son un partido corrupto y que compra voluntades.

❌ Porque para que haya transfuguismo debe haber alguien que se venda, y alguien que compre, como han hecho Casado y Egea.

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— PSOE (@PSOE) February 8, 2022

Desde el PSOE, por tanto, se insiste en acusar al PP de estar detrás de la maniobra de Sayas y García Adanero y en llamarles tránsfugas. Sayas anunció ayer, al entrar al Comité de Garantías y Disciplina de UPN junto a su abogado, Eduardo Ruiz de Erenchun, que había presentado un acto de conciliación contra la dirigente del PSOE Adriana Lastra por estos motivos.

También en la puerta de la sede de UPN, García Adanero señaló a los medios que quería conocer los detalles del acuerdo al que llegó la dirección del partido con el PSOE para apoyarle en la votación de la reforma laboral, dejando entrever que se había ocultado algo.

Esparza no revela el acuerdo

Hoy, Javier Esparza no ha recogido el guante y ha dejado el acuerdo en las sombras. Preguntado al respecto en una entrevista en Radio Euskadi, Esparza ha reconocido que que el PSN votase en contra de la reprobación de Enrique Maya y aprobarle modificaciones presupuestarias por valor de 27 millones de euros eran «la parte pequeñita» del mismo.

«Había más acuerdo, pero por respeto se queda en el ámbito interno», ha señalado Esparza, antes de añadir que el acuerdo también incluía «medidas económicas y de convivencia», pero sin concretarlas. En cualquier caso, tras la insubordinación de Sayas y García Adanero el pacto «ha decaído».

Fuentes conocedoras de la negociación han señalado a NAIZ que el acuerdo incluía el compromiso de infraestructuras, entre las que se encontraba sacar las vías del tren del centro de Tutera en el marco del proyecto del TAV, la última reivindicación del alcalde de la ciudad ribera, Alejandro Toquero.

Sayas sigue negando la evidencia

Mientras, Sayas sigue compareciendo en los medios con sede en Madrid para intentar justificar su postura, a la espera de que el Comité de Garantías y Disciplina de UPN resuelva sobre su expulsión. En esta ocasión, en La Sexta ha desmentido a los portavoces de PSOE y Ciudadanos, Héctor Gómez y Eduardo Bal, que habían relatado que Sayas les dijo el jueves por la mañana que no iba a romper la disciplina de partido y que votaría a favor de la reforma laboral. «Me engañó a la cara», ha manifestado Bal.

Sayas niega categóricamente las palabras de Gómez y Bal, señalando que lo que han dicho es «absolutamente falso». Según su versión, solo había dos mujeres que sabían que iban a votar en contra de las órdenes de su partido. Eran la madre de Sayas, «a quien llamé quince minutos de la votación», y la mujer de García Adanero.

Sin embargo, varios periodistas acreditados en el Congreso que hablaron con Sayas la mañana del jueves han señalado también que éste les dijo que iba a asumir las órdenes del partido y votar a favor de la reforma laboral aunque no compartiese la decisión. Y estos periodistas no son ni la madre de Sayas ni la mujer de García Adanero.