«Hoy nos presentamos como asociación frente a los diferentes agentes sociales, politicos, sindicales y representantes institucionales de Nafarroa con un objetivo claro: reivindicar una investigación oficial, profesional e independiente, que esclarezca cuántas víctimas de tortura han existido en Nafarroa durante las seis últimas décadas. Y de esta manera poder establecer mecanismos para el reconocimiento, reparación de las personas torturadas», han señalado, en nombre de la citada asociación Lohizune Amatria, sobrina de Mikel Zabalza, e Iñigo González Etayo, último navarro en recibir una sentencia favorable por parte del Tribunal Europeo de Derechos Humanos en la que se condenaba al Estado Español por no investigar las denuncia de realizada en enero de 2011.
En el acto celebrado en la Escuela de Música Berriozar, en el que se han concentrado 150 navarros de edades muy dispares que han sufrido la tortura, también ha participado una amplia representación política, sindical y social. El Gobierno navarro ha estado presente a través de Ana Ollo, consejera de Relaciones Ciudadanas, de Martin Zabalza, director general de Paz, Convivencia y DDHH, y de Blanca Burusko, representante de la oficina de víctimas del Departamento de Paz y Convivencia de DDHH.
Geroa Bai, EH Bildu, Podemos/Ahal Dugu, Izquierda-Ezkerra, UGT, CCOO, ELA, LAB, Steilas, CGT, ESK, Salhaketa, Egiari Zor, SF 78 Gogoan, Foro Sozial y Etxerat también han participado en el acto, lo que muestra una alta adhesión a la necesidad de dar pasos para el reconocimiento de la tortura en el herrialde.
Mañana se cumplen 41 años de que Joxe Arregi fuera asesinado bajo tortura y han querido aprovechar la efeméride para impulsar la iniciativa en busca de respuestas y con una certeza: la tortura ha golpeado, al menos, a un millar de navarros y navarras. «Estamos empezando a tejer la red de torturados y torturadas y las personas aquí reunidas somos parte de esa red. Aunque sabemos que la realidad de la tortura tiene más de 1000 caras, 1000 voces silenciadas», han apuntado.
Casos, muertos y condenas europeas
La falta de acción oficial hasta la fecha no ha impedido que se hayan ido recopilando datos por otras vías, como la lanzada hace años por Euskal Memoria. Y así se han contado cerca de 1.000 personas torturadas desde 1960 a 2014; dos víctimas mortales (Mikel Zabalza y Antonio Goñi Igoa); existe una condena del TEDH al Estado español por «trato inhumano» a Igor Portu y Mattin Sarasola; cuatro condenas por no investigar las denuncias de torturas Oihan Ataun, Jon Patxi Arratibel, Xabier Beortegi y la citada de Iñigo González; un informe del Comité para la Prevención de la Tortura, en 2011, que daba credibilidad al testimonio de torturas de tres personas navarras; y, al menos, 80 localidades navarras afectadas.
La asociación ya se encuentra trabajando. Por el momento, tratan de elaborar un censo de torturados lo más detallado posible, para lo que han repartido formularios por toda la geografía navarra. «Llegar a esas 1000 personas no es tarea fácil, porque muchas de ellas ya no están entre nosotras o porque rellenar esos formularios aflora en nosotras dolores y sufrimientos del pasado», han subrayado.
Investigación oficial
Sin embargo, están convencidos de la necesidad de «sacar la injusticia de la tortura a la luz y acabar de una vez por todas con su impunidad». Por ello, han instado al Gobierno navarro a que «haga cuanto esté en su mano para que la X legislatura sea la última en la que no se haya realizado una investigación oficial sobre la tortura en Navarra» y llevar a cabo la investigación de los casos de tortura que se han producido desde el 1978 hasta la actualidad a manos de las Fuerzas y Seguridad del Estado (ya lo hizo del periodo de 1960 a 1978).
«Sabemos que reconocerlo supone reflejarse en el espejo de los horrores de la violencia de Estado. Levantar el velo sobre esta práctica inhumana que se perpetúa gracias a su impunidad molesta mucho. Las autoridades e instituciones públicas han preferido el silencio. El Estado español siempre ha intentado ocultar la evidente aplicación generalizada de la tortura y no quiere que se revelen más casos que vayan mas allá del periodo histórico correspondiente al franquismo», han subrayado.
Frente a ese silencio, apuestan por una investigación que «ayudaría a construir el camino a recorrer hacia el reconocimiento y reparación oficial de las personas torturadas en Nafarroa y mitigar de esta manera el sufrimiento que tantos años de impunidad nos genera».
También se han querido dirigir a los agentes sociales, sindicales y demás fuerzas políticas, pidiéndoles que se comprometan a impulsar iniciativas para el reconocimiento de la tortura.
Movilización el 25 de junio
Asimismo, han llamado a una movilización el 25 de junio, víspera del Día Internacional para la Protección de las Víctimas de la Tortura, en Iruñea. «Acabar con la tortura, tratar de combatirla, requiere acciones preventivas, pero también la asunción de responsabilidades por parte de quienes han diseñado su aplicación sistemática, la han llevado acabo o han intentado ocultarla. Pero sobre todo, el reconocimiento de su práctica y el sufrimiento causado», han dicho.
El acto ha finalizado con la participación de ‘Konejo’ Eseberri y Eneko Dorronsoro, miembros del grupo Los Zopilotes Txirriaos, que han interpretado el tema ‘Siete mares’, acompañado de una carta de Eva Forest sobre la tortura, parte de su trabajo ‘Una extraña aventura’.