La 22ª jornada de Liga despide este domingo la competición en febrero, en vísperas de que arranque un prolongado parón para compromisos internacionales, que concluirá el 2 de marzo con la disputa de los octavos de final de Copa. Serán compromisos complicados para la mayoría de nuestros equipos que, sobre todo en el caso del Athletic, cerrará tres semanas con seis partidos, completan un maratón.
Levante - Real Sociedad (11.00)
El de la Real ha coincidido con el tramo más duro del complicado. Tras enfrentarse a Villarreal, Real Madrid, Atlético y Barcelona, mañana visitará al Levante (11.00). En una temporada marcada por la irregularidad, las granotas no lo están pasando bien e incluso contando con los tres puntos que le sustrajo la Federación Española, ocupan la séptima plaza de la clasificación, muy lejos (11 puntos) de los puestos de Champions que querían repetir. Pero siguen siendo un rival complicado, que ya se llevó los tres puntos de Zubieta en la primera vuelta aunque fuera con un gol que no debió subir al marcador y que encuentra en partidos como el de mañana la oportunidad de reivindicarse ante los suyos en un curso tan complicado.
Las donostiarras, además, viajan con una nueva ausencia. Si ante el Real Madrid perdieron a Etxezarreta y frente al Atlético a Maddi, el miércoles fue Adriana Nanclares la que acabó lesionada, con lo que Elene Lete regresará a la portería y Olatz Santana entra en la convocatoria. Natalia Arroyo, al menos, recibe una buena noticia con el regreso de Allegra Poljak, ya recuperada del golpe que le impidió enfrentarse al Barcelona. El problema es la sobrecarga de esfuerzos, sobre todo para las futbolistas con pocas opciones de descanso por las bajas y la configuración de la plantilla, como Vanegas o Arnáiz.
Arroyo reconoce que el equipo está un poco «lastrado» en el apartado físico por la concatenación de partidos, todos ellos muy exigentes, y «fastidiado» por la abultada derrota frente al Barcelona, pese a la buena imagen ofrecida por la Real durante muchos minutos. Confía e que las futbolistas puedan utilizar esa «rabia y frustración» para enfrentarse con la máxima intensidad a un Levante «super intenso y agresivo, que te exige muchísimo y no te deja tiempo para pensar».
Athletic - Barcelona (12.00, TDP)
Si la Real tiene que echar el resto, qué decir del Athletic. Las rojiblancas completarán un calendario que les ha llevado a encadenar seis partidos en tres semanas; al contrario del equipo txuriurdin, que mantiene un cómodo colchón sobre el tercero, están obligadas a al menos puntuar para mantenerse vivas en la pelea europea, más aún teniendo en cuenta que sus rivales por la tercera plaza tienen compromisos teóricamente asequibles; y, sobre todo, reciben al Barcelona. Poco se puede decir sobre un equipo que ha ganado todos sus partidos en Liga, Champions y Supercopa, con una media de seis goles marcados por partido en la competición doméstica, en la que sólo ha encajado seis en 21 partidos.
El Athletic llega con el aval de su buena actuación en el Johan Cruyff, en el que llegó empatado a cero al descanso –el único equipo que lo ha logrado– y metido en el partido hasta el 87, cuando «sólo» perdía por dos goles, aunque acabó encajando otros dos en la recta final. Iraia Iturregi cree que hay que «dar continuidad» a aquel partido pero «si queremos ganar o empatar, ofensivamente tendremos que generar más ocasiones». Opina que «habrá momentos en los que robaremos el balón y en esos contragolpes podemos hacer daño, como hicimos contra el Atlético» y que su equipo puede tener otro aliado en el balón parado.
En cualquier caso, es consciente de que para sumar, «tendremos que hacer un partido redondo y que ellas no tengan su día. Aunque en eso también podemos influir nosotras, haciéndoles un partido incómodo». Destaca, además, el papel que puede tener «la afición. En estos partidos todas las ayudas se agradecen y la del público puede ser muy importante. Es un partido en el que se sufre mucho mentalmente y físicamente y en esos momentos en los que estás a punto de rendirte, la afición te puede dar ese puntito que te reanima».
Istillart, Naroa, Yulema y Monente siguen de baja pero vuelve Eunate a una convocatoria en la que también están Mariana, Landaluze y Elexpuru del filial.
Valencia - Alavés (11.30)
Sin Urru, por su parte, viaja el Alavés para visitar a un Valencia reanimado tras imponerse al Levante en el derbi de la semana pasada para mantener su mínima distancia sobre el descenso. En la novena plaza y con 27 puntos, las albiazules saben que sólo una debacle mayúscula e impensable les impediría alcanzar su objetivo pero tampoco quieren dejar demasiado tiempo para certificarlo. Viajan, además, con el reto de mejorar sus prestaciones a domicilio tras los flojos resultados de las últimas jornadas: desde que ganaron al Madrid en octubre, sólo han sumado un punto en seis desplazamientos.
«Debemos encontrar fuera de casa la solidez que mostramos en Ibaia», reconoce Mikel Crespo, consciente de que el trabajo defensivo debe ofrecer mejores resultados a un Alavés que no ha podido dejar su puerta a cero desde la visita del Eibar a Ibaia, hace ya tres meses.
Eibar - Real Madrid (11.00)
El equipo armero es, precisamente, el que tiene una de las papeletas más complicadas este fin de semana. En descenso por primera vez desde que llegó a Primera, el Eibar recibe a un Real Madrid imparable, que ha encadenado cinco victorias y que no puede permitirse demasiados tropiezos si quiere repetir clasificación a la Champions.
Ana Junyent, que recupera a Carla Morera pero mantiene las bajas de Noelia y Arola, reconoce que no es un rival «imposible» como el Barcelona «pero sí muy difícil. Nosotras tenemos que estar al 200 por 100, no cometer ningún error en los noventaypico minutos que dure el partido y que ellas no estén todo lo bien que han estado en los últimos partidos» para tener alguna opción.
«Tenemos que estar exquisitas», insiste la entrenadora catalana, que admite que no es plato de buen gusto verse en descenso pero que explica que «estamos con la preocupación justa de estar donde estamos, porque no nos gusta estar ahí, pero con la calma de saber que, quedándonos ahora dos partidos muy complicados (Real Madrid y, a la vuelta del parón, Real Sociedad en Zubieta), tenemos que mantener la calma y seguir trabajando bien».