La guerra en Ucrania ya es un hecho consumado. Las tropas rusas han entrado esta madrugada en la región ucraniana de Jersón, limítrofe con la península de Crimea, según ha informado la Guardia Fronteriza de Ucrania. Se escuchan explosiones en la zona, aunque lógicamente las informaciones aún son muy confusas. Las informaciones que llegan de la zona señalan que ya se han registrado los primeros muertos.
En las primeras horas desde la irrupción de fuerzas rusas en varios enclaves ucranianos se han registrado ocho víctimas ucranianas y medio centenar de soldados rusos, según fuentes de Kiev, que reconocen también la muerte de cinco soldaos ucranianos.
«Actualmente, se observa movimiento de equipo militar a través de la península desde la frontera administrativa» ha asegurado la entidad ucraniana en un comunicado.
El Servicio Guardafronteras ha publicado un vídeo en el que se puede ver el cruce de blindados, tanques y camiones militares por el puesto fronterizo.
La entidad señaló que las fuerzas rusas utilizan artillería y armas pesadas contra las unidades fronterizas de las provincias de Sumi, Járkov, Chernígov, Zhitomir y también Lugansk, reconocida por Rusia hace unos días junto a Donetsk.
En este contexto, el presidente ucraniano, Volodomir Zelensky, ha anunciado que rompe con todas las relaciones diplomáticas con Rusia.
El Kremlin, por su parte, ha respondido señalando que el operativo durará «lo que sea necesario en función de sus resultados y de su pertinencia», según ha señalado el portavoz de la Presidencia rusa, Dimitri Peskov, que ha subrayado que Putin tiene la capacidad de decisión al respecto.
Junto a ello, Peskov ha señalado que el operativo no busca ocupar Ucrania y que el futuro de ese país corresponde a su ciudadanía. «En el ideal, Ucrania debería limpiarse de nazis», ha añadido, tras acusar a Kiev de organizar un genocidio de la población rusófona en el Donbass.
Combates
Según el Servicio Guarda Fronterizo de Ucrania, las tropas rusas han penetrado en territorio ucraniano en Vilcha, cerca de Jarkiv. Esta misma fuente ha reportado ataques con cohetes Grad en Mlachiva, cerca de la frontera bielorrusa.
Fuentes ucranianas han señalado la existencia de combates en varios puntos del país, que no han sido confirmadas por informaciones independientes. Según el jefe de las Fuerzas armadas ucranianas, Valery Zaloujny, había combates para tomar el control del aeropuerto de Gostomel, cerca de Kiev.
Desde Ucrania se ha llegado a afirmar que los rusos habrían tomado el control del complejo de Chernobil en su camino a Kiev, lo que no ha sido confirmado por fuentes independientes. El presidente Zelensky lo ha difundido en un mensaje de Twitter, en el que ha destacado que los soldados ucranianos «están dando sus vidas para evitar que la tragedida de 1986 se repita» y elevaba el nivel del conflicto a «una declaración de guerra contra el conjunto de Europa».
Russian occupation forces are trying to seize the #Chornobyl_NPP. Our defenders are giving their lives so that the tragedy of 1986 will not be repeated. Reported this to @SwedishPM. This is a declaration of war against the whole of Europe.
— Володимир Зеленський (@ZelenskyyUa) February 24, 2022
En lo que se interpreta como un intento de reclamar ayuda a Occidente, Zelensky, en un discurso televisado, ha señalado que «Rusia ha quedado separada de Europa por un nuevo telón de acero».
En Kiev, el alcalde Vitali Klishko ha declarado el toque de queda en la ciudad entre las diez de la noche y las siete de la mañana. Además, se han habilitado las estaciones del metro como refugios. Según la CNN estadounidense, las tropas rusas estaban a quince millas de Kiev.
Rusia niega ataque a ciudades ucranianas
El Ministerio ruso de Defensa asegura que sus fuerzas armadas no están atacando ciudades ucranianas en el marco de su ofensiva. «Las Fuerzas Armadas de Rusia no atacan ciudades de Ucrania. No hay ninguna amenaza a la población pacífica», señala el comunicado que ha hecho público. En este sentido, el Ejército ruso señala que «los civiles ucranianos no tienen nada que temer».
Los militares rusos indicaron que se emplean armas de alta precisión contra infraestructuras militares, baterías antiaéreas y bases aéreas ucranianas.
«La geografía de los ataques es la siguiente: Ivano-Frankivsk, Jmelnitsky, Chernígov, Járkov, Kiev, Odesa, Nikolaev, Jerson, Kramatorsk y a lo largo de la línea de separación de fuerzas» en el Donbass, ha informado el Ejército ruso en un comunicado.
En un parte de guerra, hecho pública al final de la tarde, el Ministerio ruso de Defensa ha señalado que han destruido 74 instalaciones militares y han sido derribados un helicóptero de combate y cuatro drones Bayraktar. Entre los objetivos destruidos se encuentran once aeródromos, tres puestos de mando y una base naval.
El portavoz de Defensa, Igor Konanshekov, ha añadido que los soldados rusos tienen órdenes de «tratar con respeto» a los militares ucranianos que se rindan.
«Según datos de inteligencia, las unidades y militares de las fuerzas armadas ucranianas abandonan masivamente sus posiciones», ha indicado Rusia, que ha recalcado que los lugares donde las fuerzas ucranianas han depuesto las armas no son sometidos a ataques.
Ha agregado que las declaraciones de la parte ucranianas sobre las pérdidas de aviones y blindados por el ejército ruso son una «completa mentira».
El portavoz del Ministerio ruso de Defensa, Igor Konashenkov, ha confirmado que en la ofensiva rusa están participando también las milicias de las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk.
El Ministerio ucraniano del Interior, por su parte, ha informado de que varias columnas de tanques rusos han entrado en la zona del óblast de Lugansk controlado por Kiev. Concretamente, cita las aldeas de Krasna Talivka, Milove y Horodysche.
El presidente bielorruso, Aleksandr Lukashenko, ha negado la participación de fuerzas de ese país en la ofensiva rusa, según señala la agencia Belta.
El presidente de la República Popular de Donetsk, Denis Pushilin, ha mostrado su esperanza de que «el movimiento de liberación» emprendido por Rusia sea «bastante rápido». «Puedo decir que terminará pronto», ha señalado.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, por su parte, ha ordenado «causar las mayores pérdidas posibles al invasor», según ha señalado el Ejército de Tierra en un comunicado.
Muertos y desplazados
Según ha informado el Ministerio de Salud de ese país, al menos 57 ucranianos han muerto y otros 169 han resultado heridos durante este primer día del ataque ruso.
«Según datos operativos, 57 ucranianos fallecieron como resultado del ataque ruso. Otros 169 fueron heridos», ha señalado el ministro de Salud, Viktor Lyashko, en un comunicado, en el que no ha especificado el número de civiles y soldados que han perdido la vida.
Rusia, por su parte, no ha informado aún de las bajas sufridas.
Según una portavoz de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), al menos 100.000 personas han tenido que dejar sus hogares en Ucrania y varios miles más han cruzado las fronteras a países vecinos.
Anuncio de Putin
Poco antes, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha anunciado el comienzo de una operación militar en este de Ucrania para proteger a las personas «de los abusos y del genocidio» del Gobierno ucraniano desde hace ocho años.
«Las repúblicas populares de Donbass se acercaron a Rusia con una solicitud de ayuda. En relación con esto (...) tomé la decisión de realizar una operación militar especial. Su objetivo es proteger a las personas que son objeto de abusos, genocidio del régimen de Kiev durante ocho años, y para ello buscaremos desmilitarizar y desnazificar Ucrania y llevar ante la justicia a quienes cometieron numerosos crímenes sangrientos contra personas pacíficas, incluidos nacionales rusos», ha señalado Putin en un discurso televisivo.
Ha añadido que «la ocupación de territorios ucranianos no está en nuestros planes. no vamos a forzar nada a nadie», pero que apoya el derecho de los pueblos de Ucrania a la autodeterminación.
«Ni cuando se creó la URSS, ni después de la Segunda Guerra Mundial, nadie preguntó a las personas que vivían en ciertos territorios que formaban parte de la Ucrania moderna cómo querían establecerse en la vida. La libertad es la base de nuestra política. Consideramos importante que todos los pueblos que residen en el territorio de la actual Ucrania puedan aprovechar este derecho, el derecho a elegir», ha sostenido, después de que reconociera el lunes pasado la independencia de las autoproclamadas repúblicas de Donetsk y Lugansk.
Putin se ha dirigido a los militares ucranianos y les ha pedido «deponer inmediatamente las armas y regresar a sus hogares. Todos, todos los militares del Ejército ucraniano pueden abandonar la zona de combate y volver con sus familias».
El presidente ruso ha lanzado además una advertencia a Occidente en su anuncio de la ofensiva militar en Ucrania. «En lo que respecta a la esfera militar, la Rusia moderna es una de las potencias nucleares más fuertes ahora, incluso después de la desintegración de la URSS y la pérdida de una parte considerable del potencial nuclear. Además, tiene ciertas ventajas en la línea de las armas de última generación. En este sentido, nadie debería tener dudas de que el ataque directo contra Rusia conducirá a una derrota y consecuencias devastadoras para un potencial agresor», ha advertido.
Horas más tarde, el mandatario ha argumentado que ha autorizado la ofensiva militar contra Ucrania debido a que «no había otra opción» para defender los intereses del país.
«Lo que está pasando es una medida forzosa», ha argüido. «No nos han dejado otra opción que hacerlo. Los riesgos de seguridad creados eran tales que era imposible responder a través de otros medios», ha defendido el mandatario ruso durante un encuentro con empresarios, según ha recogido la agencia rusa de noticias Sputnik.
«Todos, ustedes también, entienden el mundo en el que vivimos y estamos preparados de una forma a otra para lo que está pasando en términos de restricciones y sanciones», ha dicho. Así, ha incidido en que «Rusia sigue siendo parte de la economía mundial, y en este sentido, mientras siga siendo esta parte, no va a dañar el sistema del que se siente parte», ha manifestado.
El centro de Moscú ha acogido una protesta contra la guerra, en la que, según fuentes oficiales, han sido detenidas al menos 600 personas. «Fueron detenidos alrededor de 600 participantes de la manifestación y llevados a las unidades de la policía para ser investigados», ha señalado el servicio de prensa de la Dirección Principal del Ministerio del Interior de Rusia. La organización OVD-Info, por su parte, apunta que son más de 1.200 las personas arrestadas por participar en protestas llevadas a cabo en distintas ciudades.
Ley marcial
Desde el otro lado, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, ha anunciado la instauración de la ley marcial y ha pedido a la población que mantenga la calma.
Asimismo, ha firmado el decreto sobre la movilización general de todas las personas en edad de servir en el Ejército.
«Decreto: anunciar y llevar a cabo una movilización general», consta en el texto publicado en la página de la Oficina de la Presidencia de Ucrania.
Previamente, Zelenski había presentado el decreto a la Rada Suprema o Parlamento, según ha informado el propio Legislativo en su cuenta de Telegram.
El decreto prevé que la movilización se efectúe en un plazo máximo de 90 días en 25 territorios de Ucrania.
En un mensaje difundido en Facebook, el presidente ucraniano ha dicho a los líderes europeos que si no ayudan hoy a su país, «mañana la guerra tocará a sus puertas».
«Si ustedes, estimados líderes europeos, líderes mundiales, líderes del mundo libre, no nos ayudan, y no nos ayudan bien, mañana la guerra tocará a sus puertas», ha alertado.