Koldo Landaluze
Especialista en cine y series de televisión

Microcosmos en un patio de colegio

UN PEQUEÑO MUNDO
Bélgica. 2021. 130’. Tít. orig.: ‘Un monde’. Dirección y guion: Laura Wandel. Prod.: Jan De Clercq, Annemie Degryse, Stéphane Lhoest, Philippe Logie. Int.: Maya Vanderbeque, Günter Duret, Karim Leklou, Laura Verlinden, Léna Girard Voss, Thao Maerten, Laurent Capelluto.

Esta historia sobre la infancia es contada a través de dos hermanos.
Esta historia sobre la infancia es contada a través de dos hermanos. (NAIZ)

Con esta su primera experiencia en el formato largo, la cineasta belga Laura Wandel recibió el premio Fipresci de la sección Un Certain Regard en la última edición de Cannes. Posteriormente pudo ser visionada en la sección Zabaltegi de Zinemaldia y, en su ruta de festivales, también cosechó el premio a Mejor Película en el Festival de Ourense y en el Festival de Cine por Mujeres.  A nivel internacional, es una de las quince finalistas de la shortlist de los Oscar en la categoría de Mejor Película de Habla No Inglesa, en representación de Bélgica.

Cálida, sensible, pero sin eludir la crudeza en diversos pasajes, esta ópera prima de Wandel apuesta por ser una inmersión profunda en el universo escolar a través de los ojos de una niña, con un trasfondo social y humano que muestra la realidad ineludible que es el acoso en las aulas desde un punto de vista inédito, el que aporta la relación entre dos hermanos.

Laura Wandel ha explicado que tanto el punto de vista como el escenario adquirieron una gran importancia desde el comienzo. La elección del colegio, y sobre todo el patio, subraya su concepto de microsociedad. La cineasta se dedicó a observar patios durante varios meses antes de empezar a rodar y descubrió que existía una noción de territorio porque en el patio, todo el mundo intenta ocupar su sitio.

La trama orbita en torno a los dos protagonistas, dos hermanos inmersos en la dinámica de este entorno. Todo ello visto a través de la infancia, un territorio siempre definido por una línea difusa. Para la cineasta, «la belleza de la infancia reside en su poesía, pero también en su crueldad. La línea divisoria entre ambas es muy porosa.

Quise permanecer en el mundo de la infancia y del colegio, mostrando el exterior lo menos posible. En general, fuera del entorno familiar, el colegio es el único mundo que el niño o la niña conoce».