En otro paso en las medidas de presión y castigos sobre Rusia por la invasión de Ucrania, Estados Unidos ha declarado este lunes «persona non grata» a doce diplomáticos de la misión rusa ante Naciones Unidas. Los acusa de «espionaje» y les dio hasta el 7 de marzo para que salgan del país

La información la ha adelanado el embajador ruso ante la ONU, Vasili Nebenzia, quien la ha calificado como una «noticia triste» y una muestra de que EEUU no está respetando los acuerdos con Naciones Unidas sobre su rol como Estado anfitrión de la organización, que tiene su sede central en Nueva York.

Poco después, Estados Unidos ha confirmado la decisión y ha defendido que no incumple en absoluto sus responsabilidades como país anfitrión.

Según un comunicado estadounidense, esas doce personas son «agentes de inteligencia» que han «abusado sus privilegios de residencia en Estados Unidos al involucrarse en actividades de espionaje que son perjudiciales» para la seguridad nacional de EEUU.

«Esta acción lleva varios meses en desarrollo», ha señalado la portavoz estadounidense, Olivia Dalton, para intentar desvincular la medida de la actual situación en Ucrania y de las medidas de presión como sanciones financieras, exclusión de Rusia de foros internacionales o exclusión del espacio aéreo, entre otras.

La noticia ha saltado en plena conferencia de prensa del embajador ruso ante la ONU, que ha atendido una llamada telefónica en la que, según ha explicado, se le ha nformado de la recepción de la notificación estadounidense sobre la expulsión de los diplomáticos.

Nebenzia  por ahora no tenía los detalles sobre quiénes son los afectados por la medida ni explicaciones sobre su motivo.

Moscú ha calficado más tarde la medida como  «procedimiento hostil» por parte de EEUU.

El embajador ruso, en todo caso, se ha mostrado convencido de que su país responderá con una acción similar, como es habitual en este tipo de crisis diplomáticas.

Nebenzia ha atendido a los medios para analizar la presidencia rusa del Consejo de Seguridad durante el mes de febrero, que llega a su fin hoy, y que ha estado marcada por la invasión de Ucrania.

En respuesta a las preguntas de los periodistas, el diplomático a vuelto a culpar a las autoridades de Kiev por el conflicto e insistió en que en Ucrania no hay una guerra, sino una «operación especial» rusa que busca la «desmilitarización» y «desnazificación» del país.

La medida va más allá de las que aplica EEUU en su propio territorio, ya que afecta a diplomáticos de Naciones Unidas en la sede de Nueva York, que ocupa un espacio de carácter extraterritorial que no está bajo administración de Washington. La inmunidad de sus diplomáticos depende del secretario general de la ONU.