Jordi Ferrón es el entrenador elegido por el Eibar para sustituir a Ana Junyent y tratar de evitar el descenso del equipo azulgrana. El entrenador catalán, que se compromete hasta final de temporada, tiene seis jornadas por delante para tratar de remontar la distancia de cinco puntos que separa al Eibar, en puestos de descenso desde hace un mes, de la 14ª plaza. Jon Olangua, segundo entrenador de las armeras las dos últimas temporadas y actualmente a cargo del cadete femenino, acompañará a Ferrón, con el que también seguirá trabajando parte del equipo técnico que llegó con Junyent (el prepadador físico Ismel Mazila, el entrenador de porteras Jaume Borrero y el fisioterapeuta Xavi Camps).

Ferrón, que este miércoles tarde dirigirá su primer entrenamiento en Unbe y será presentado mañana en Ipurua, se inició en los banquillos un año después de colgar las botas, poniendo fin a una carrera como futbolista que le había llevado a militar en la cantera del Barcelona, Rayo, Zaragoza, Albacete y Badalona.

Toda su trayectoria como entrenador ha estado ligada al fútbol femenino. Dirigió al Seagull entre 2015 y 2019, cuando tomó su testigo precisamente Ana Junyent. Inciada la temporada 19/20 firmó con el Espanyol para sustituir a Salvador Jaspe, destituido por la mala trayectoria de las blanquiazules, que ocupaban la última plaza de la clasificación tras haber sumado sólo dos empates en trece jornadas. Su llegada no mejoró los números del equipo, que en los diez partidos posteriores encajó siete derrotas y sólo pudo sumar tres puntos. La suspensión de la temporada por la pandemia, con ocho jornadas por disputar, posibilitó que el Espanyol acabara salvando la categoría. Finalizada prematuramente su estapa en el banquillo perico, Ferrón firmó el año pasado con el AEM, en este caso para ejercer de director deportivo.

Ahora se hace cargo de un Eibar que necesita poco menos que un milagro para mantener la categoría. Penúltimo en la tabla, es el equipo de Primera que más derrotas ha encajado –18 en 24 jornadas– y, lejos de mejorar, su dinámica ha empeorado en las últimas semanas. Ha perdido siete de las últimas ocho jornadas, incluyendo la final que disputaba este pasado sábado frente al Sporting de Huelva, al que habría sobrepasado en caso de victoria, saliendo del descenso. Perdió, con una imagen que tampoco fue la deseable, en un encuentro que acabó costándole el puesto a Junyent.

A falta de seis jornadas, el equipo armero está a cinco puntos del Valencia –que debe recuperar su partido aplazado frente al Villarreal–, cinco también del Sporting –con el golaverage particular a favor de las onubenses– y siete de Villarreal –debe recuperar su partido frente al Valencia– y Madrid. En esta recta final, visitará a Sevilla, Granadilla y Atlético y recibirá en Unbe a Alavés, Villarreal y Valencia.