NAIZ
Bruselas

Un tercio de los europeos cree que tendrá que mudarse por el cambio climático

Una encuesta realizada por el Banco Europeo de Inversiones (BEI) indica que cerca de un tercio de los habitantes de la UE cree que tendrá que cambiar de residencia por el cambio climático. Entre los índices más altos, los de los Estados francés y español.

Vista general de la isla de Sein, en Bretaña, cuyos habitantes están preocupados por las consecuencias del cambio climático ante la subida del nivel del mar.
Vista general de la isla de Sein, en Bretaña, cuyos habitantes están preocupados por las consecuencias del cambio climático ante la subida del nivel del mar. (Fred TANNEAU | AFP)

Casi un tercio (el 29%) de las ciudadanas y los ciudadanos de la Unión Europea responde afirmativamente cuando se les pregunta si el cambio climático les obligará a cambiarse de región o país.

El porcentaje más alto se ha registrado en el Estado francés y en Lituania (37%), a los que sigue muy de cerca el Estado español (35%). La preocupación es mucho mayor entre los jóvenes, como lo refleja que entre los veinteañeros del Estado español el porcentaje se dispara al 61%.

El vicepresidente del BEI, Ricardo Mourinho, ha comentado que la responsabilidad de esta institución «como banco climático» de la UE es «trabajar con los encargados de la elaboración de políticas y con los socios de la industria para abordar de forma concreta» las preocupaciones expresadas por la ciudadanía.

Cambios en el estilo de vida

La agencia Efe ha resaltado otros datos de la encuesta centrados en el Estado español, donde solo un tercio de los  encuestados confía en que la emergencia climática esté controlada para 2050, año en el que la UE se ha fijado el objetivo de reducir al máximo las emisiones de CO2.

La población también es consciente de que tendrá que modificar su estilo de vida en los próximos años para contribuir a la lucha contra el cambio climático.

Así, el 34% de los encuestados cree que la mayoría de personas ya no tendrá coche dentro de veinte años, el 67% cree que la mayoría trabajará desde casa, un 35% estima que los ciudadanos habrán adaptado su dieta para elevar el peso de los vegetales en ella y el 60% piensa que se asignará una cuota de energía a cada persona.

Por otro lado, casi dos tercios (64%) considera que las políticas para impulsar la transición ecológica serán una fuente de crecimiento económico (por encima de la media de la UE, que es del 56%) y el 70% cree que mejorarán su calidad de vida.

A pesar de ello, el 59% de los encuestados prevé que su poder adquisitivo disminuirá como consecuencia de la transición ecológica, aunque también considera que aumentará la comodidad de su vida diaria y tendrá efectos positivos en su alimentación y salud.