Maite Ubiria

El Parlamento Europeo reclama una auténtica cooperación transfronteriza en materia sanitaria

En una resolución destinada a plantear a la Comisión Europea y a los Estados miembros una mayor implicación a la hora de superar las disparidades que en materia sanitaria ha puesto de manifiesto la pandemia causada por el covid, el Parlamento Europeo hace hincapié en la cooperación transfronteriza.

Simulacro de rescate de heridos, a cargo de equipos de ambos lados de la muga, realizado el 22 de marzo en Dantxarinea.
Simulacro de rescate de heridos, a cargo de equipos de ambos lados de la muga, realizado el 22 de marzo en Dantxarinea. (Guillaume FAUVEAU)

Un simulacro de accidente con múltiples víctimas desarrollado la semana pasada en la zona de Dantxarinea permitía a profesionales de protección civil de las las tres entidades administrativas en que está dividida Euskal Herria ejercitarse en el trabajo en común.

Se trataba de un ejercicio inscrito en el programa HeliNet que, financiado en base a los fondos Intereg/Poctefa de la UE, se centra en atender emergencias a ambos lados de la muga.

Ese programa ha avanzado en los últimos años hacia un modelo de mayor integración que permite valorar conjuntamente las intervenciones y adoptar decisiones sobre el traslado de pacientes basadas en estrictos criterios de asistencia sanitaria y no en base a imperativos administrativos.

Un programa pionero que marca un camino hacia una mayor integración en materia sanitaria y que, sin embargo, choca con demasiados obstáculos tanto en Euskal Herria como en la mayoría de los espacios transfronterizos europeos.

Así lo ha constatado el propio Parlamento Europeo en una resolución adoptada este mismo mes.

En el documento aprobado por la Eurocámara se constata que «los pacientes de la Unión Europea siguen tropezando con serias dificultades y barreras a la hora de acceder a la asistencia sanitaria en otros Estados miembros y solo una minoría de los posibles pacientes conocen su derecho a solicitar asistencia sanitaria transfronteriza».

De ahí que la Eurocámara curse a la Comisión Europea y a los Estados miembros un llamamieneto a que, como primer paso, «divulguen mejor la información y reflexionen sobre una campaña adecuada a escala de la Unión para informar al público sobre sus derechos y sobre las formas de acceder a la asistencia sanitaria transfronteriza».

El acuerdo parlamentario llega tras una serie de trabajos entre los que figura el dictamen adoptado por el Comité Europeo de las Regiones, con fecha de 14 de octubre de 2020, sobre «la aplicación de los derechos de los pacientes en la asistencia sanitaria transfronteriza».

Las enseñanzas de la pandemia

Desde esa y otras instancias se ha puesto de manifiesto que la pandemia sacó a relucir «las debilidades y deficiencias de los sistemas sanitarios, así como las disparidades y desigualdades de la asistencia sanitaria entre Estados miembros y en su interior, en las regiones fronterizas», así como en entornos periféricos, en su mayoría rurales, en los que el menor peso demográfico genera una creciente desigualdad en materia de servicios básicos.

Partiendo de la realidad de que, en materia sanitaria, los dictámenes de la UE tienen un carácter orientativo, el Parlamento Europeo aboga abiertamente por adoptar «un enfoque más estructurado a nivel de la Unión complementado por un marco jurídico más firme y exhaustivo, y medios de acción jurídicamente vinculantes». Ello con el objetivo de «mejorar la cooperación y la coordinación entre Estados miembros, proteger mejor la salud de las personas y abordar eficazmente las disparidades existentes en el ámbito de la asistencia sanitaria».

A pesar de esa preeminencia de la escala estatal, la Cámara recuerda que el instrumento para la recuperación de que se ha dotado la UE para superar la crisis «ha establecido entre sus prioridades, por un lado, la digitalización y, por otro, la resiliencia de los sistemas sanitarios».

Y, sobre se marco, defiende que se preste especial atención a una mejora en todos los niveles de «la asistencia sanitaria transfronteriza», al ser esta, según estiman los eurodiputados, «una de las políticas y áreas de intervención más afectadas por los obstáculos jurídicos y no jurídicos debido a las diferencias importantes entre los sistemas nacionales».

La resolución también resalta que «el acceso a los servicios públicos es esencial para los 150 millones de personas que constituyen la población de las zonas transfronterizas interiores».

De ahí que solicite «el máximo esfuerzo para eliminar esos obstáculos, sobre todo cuando guarden relación con los servicios sanitarios, el transporte, la educación, la movilidad laboral y el medio ambiente».

Reducción de la carga burocrática y elección de servicios

Aunque en las últimas décadas se ha avanzado en programas concretos, como el ya señalado HeliNet, se está todavía lejos de una integración de servicios sanitarios esenciales a ambos lados de la muga vasca.

Asi lo constata el propio Parlamento al incluir entre las instituciones destinatarias de su demanda a las «regiones», lo que en el caso de Euskal Herria pasa por la Eurorregión que integran Nafarroa, Nueva Aquitania y la Comunidad Autónoma Vasca.

Así, el Europarlamento hace patente la necesidad de «una cooperación directa entre los Estados miembros y sus regiones, y dentro de ellos, de un impulso de acciones y proyectos que utilicen los instrumentos de la política de cohesión para establecer procedimientos centrados en reducir la carga burocrática para los pacientes y resolver tantos problemas como sea posible entre los servicios de seguro de enfermedad en las regiones transfronterizas».

La petición es si cabe más clara si se lee otro de los apartados de esa resolución en el que se pide a los Estados miembros que, cuando definan sus políticas de asistencia sanitaria, «tengan en cuenta las especificidades de las regiones transfronterizas y el derecho de los pacientes a elegir».

Con ese fin, les insta a que «utilicen los instrumentos de cohesión para desarrollar infraestructuras y procedimientos sanitarios a nivel regional que permitan a los pacientes elegir entre los servicios médicos de la región a ambos lados de la frontera, con independencia de su Estado de residencia».

A día de hoy la residencia en uno de los Estados miembros obliga a recibir la asistencia sanitaria ordinaria en su marco territorial, lo que reduce prácticamente a las urgencias el servicio sanitario transfronterizo.

De los programas puntuales a una auténtica cooperación

Los acuerdos puntuales entre hospitales han suplido algunas carencias, pero las trabas burocráticas hacen que quede todavía bastante lejos la construcción de un espacio sanitario transfronterizo.

Esto no impide que se desarrollen programas, especialmente en el ámbito de la prevención, como los que comparten la Diputación de Gipuzkoa y el Departamento de Pirineos Atlánticos en materias como el envejecimiento saludable o la creciente coordinación de unidades de Alzheimer en el espacio de Txingudi (Irun-Hondarribia-Hendaia).

El Parlamento Europeo lanza, no obstante, un mensaje más fuerte al pedir a las administraciones concernidas que vayan más allá y «velen por una auténtica cooperación en el ámbito de la asistencia sanitaria transfronteriza, a fin de garantizar que se respetan los derechos de los pacientes», tal como se contempla, de hecho, en la  Directiva sobre Asistencia Sanitaria Transfronteriza.

Mecanismos disponibles

Aumentar la disponibilidad y la calidad de los servicios, favorecer la movilidad de los pacientes y el acceso transfronterizo a «una asistencia sanitaria segura y de alta calidad», y mejorar las opciones tanto formativas como de desarrollo profesional de los trabajadores sanitarios a ambos lados de la muga son algunas de las prioridades que se destacan en la resolución de la Eurocámara.

A sabiendas de que los diferentes modelos de reembolso del gasto sanitario o las normas laborales o fiscales generan barreras importantes, el Parlamento invita a explorar opciones con la promoción de intermediarios específicos, como «las zonas de acceso organizado a la asistencia sanitaria transfronteriza, las agrupaciones europeas de cooperación territorial, los observatorios sanitarios» y, en general, todas las redes que puedan contribuir a «coordinar la cooperación transfronteriza en el ámbito sanitario en colaboración con las autoridades locales, regionales y estatales».