Fue en asamblea como nació la idea de crear una comunidad local de energía en Garralda. Tras un camino lleno de obstáculos, como señalaba en este reportaje el alcalde de la localidad pirenaica, Gurutz Gorrariz, este lunes fue presentada al fin Garraldargi Koop.

Según el Gobierno de Nafarroa, se trata de la primera comunidad energética local constituida en el herrialde como cooperativa de consumidores, en la que la autogestión y participación de los socios juegan un papel fundamental.

A fin de cuentas, Garraldargi Koop es una iniciativa del pueblo y para el pueblo de Garralda, con el objetivo de generar y distribuir energía eléctrica renovable a precio muy bajo entre el vecindario que se asocie a la cooperativa. «Pero va más allá: el objetivo es empoderar a la gente en materia de energía, proteger el entorno natural y fomentar la economía local. Abaratar la luz es una consecuencia», apostilla Gorraiz en declaraciones a NAIZ.

Por el momento, la cooperativa cuenta con 48 socios, pero el alcalde de Garralda señala que todavía está abierto el proceso de inscripción. «Participa la mayoría del pueblo, pero aspiramos a llegar a la totalidad», añade.

Todos ellos se abastecerán eléctricamente en un 80% con la energía generada por las instalaciones técnicas diseñadas. Y es que el proyecto incluye un huerto solar en Landatxikia, una central de almacenamiento de energía, la ejecución de la red interior y puntos de recarga de los vehículos eléctricos.

¿Cómo se financiará?

El presupuesto del proyecto asciende a 754.278 euros (sin IVA) y han presentado la iniciativa ante el Ministerio español de Transición Ecológica con el objetivo de acceder a subvenciones. «Para acceder a los fondos, desde Europa les comunicaron que tenían hasta el 28 de febrero para presentar los planes piloto de este tipo de cooperativas. Nos vimos desbordados y cada uno hizo lo que pudo, pero teníamos muy desarrolladas las ideas del proyecto y conseguimos presentarlo», señala Gorraiz.

Ahora espera que aprueben el proyecto por los «elementos diferenciadores» del mismo, teniendo en cuenta que esta subvención es la «clave de bóveda» de «nuestra catedral».

«De esta manera, desde Madrid se financiaría el 43% del proyecto, y si eso no llega se nos complica muchísimo porque el proyecto es muy ambicioso», apunta el alcalde de Garralda. La resolución se prevé conocerla en junio de este mismo año, por lo que se estima la puesta en marcha de la instalación se produzca en otoño de 2023.

En esa misma línea, confían en que las ayudas institucionales permitan que acceda a condiciones financieras asumibles, ya que deberán pedir un crédito de aproximadamente medio millón de euros.

Pagar el crédito y la aportación inicial

El precio unitario al que se pagará la electricidad será de 0,18€ kWh por la energía consumida. Ese importe incluye los gastos derivados de la amortización del crédito bancario. Una vez amortizado, la electricidad podría pagarse en torno al precio que genera las instalaciones (0,11€ kWh).

La instalación, además de promoverla por la cooperativa local autogestionada, ha contado el respaldo del Gobierno de Nafarroa, el Ayuntamiento de Garralda y la asociación ANEL en el marco del proyecto europeo LIFE NAdapta-CC, que ha sufragado un estudio técnico, económico y legal para que sea sostenible a largo plazo respecto a la financiación.

Para su puesta en marcha, trece vecinos y vecinas junto con el Consistorio han aportado el capital inicial necesario para realizar todos los trámites requeridos para la legalización, y en los planes de negocio se ha estimado una aportación única de 1.000 euros por cada socio. Una cantidad «asequible» según Gorraiz, teniendo en cuenta que se amortizaría entre 6 meses y y 3,5 años, dependiendo de la potencia contratada.

Cómo evitar la escalada de precios

Sortear la histórica escalada de precios en la luz parece tarea difícil, pero Gorraiz asegura que al tratarse de un circuito interno es factible abaratar la luz. «Nosotros producimos el 80% de la energía, es decir, tenemos siete meses garantizados de suministro con nuestras placas. Entre noviembre y febrero, tendremos que comprar», explica.

Garraldargi Koop estará formada por todas las personas con un punto de suministro en Garralda que quieran asociarse y por el Ayuntamiento como socio-colaborador. Todos los socios deberán, por tanto, darse de baja en su actual comercializadora. «La instalación generará energía y la distribuirá a través de una red interna y la que les cobrará será la propia cooperativa», agrega Gorraiz.

Con todo, el «impacto» de esta cooperativa va más allá del sector energético, ya que favorece la lucha contra el cambio climático y la pobreza energética y promueve mejoras sociales en la comunidad con el objetivo de poner freno a la despoblación rural.

«Se configurará como la cooperativa más grande del Pirineo y su modelo podrá ser replicado por, al menos, la mitad de los pueblos de Navarra, los que tenemos menos de 500 habitantes», explicó el propio Gorraiz en el acto de presentación.