Daniel   Galvalizi
Periodista

Feijóo medita la fecha de renuncia a la Xunta y si busca el duelo con Sánchez en el Senado

Tras conformar su nueva Ejecutiva del PP, el presidente de Galiza estudia los próximos pasos. Antes del verano dejará el cargo y definirá la estrategia para liderar la oposición. Mientras, Ayuso se encamina a presidir el partido en Madrid tras ganarle la partida a Casado.

Alberto Núñez Feijóo, en una comparecencia en La Moncloa tras reunirse con Pedro Sánchez el pasado jueves.
Alberto Núñez Feijóo, en una comparecencia en La Moncloa tras reunirse con Pedro Sánchez el pasado jueves. (Alberto ORTEGA | EUROPA PRES)

Alberto Núñez Feijóo cavila por estos días qué rumbo tomar en su nuevo rol de líder de la oposición. Los pasos formales fueron dados: ganó el congreso extraordinario, conformó su nueva ejecutiva estatal con un perfil notablemente distinto al anterior y fue recibido por Felipe de Borbón. Ahora toca definir su marcaje al presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez.

Como contó NAIZ a fines de febrero, el presidente de la Xunta tiene sobre la mesa la carta del Senado: ocupar un escaño para desde allí plantar cara a Sánchez y perfilar su liderazgo opositor. Cabe recordar que él sustituye a Pablo Casado al frente del Partido Popular pero no tiene escaño en las Cortes Generales. Mes y medio después de surgida esta idea todavía no hay una definición al respecto. Fuentes del PP gallego preguntadas por NAIZ explican que todavía se está meditando la opción senatorial y que Feijóo «va a reunirse con los grupos parlamentarios y escuchar sus opiniones». Desde Santiago de Compostela se muestran en calma: «Estamos en fase inicial».

Lo cierto es que hay una incompatibilidad legal para ejercer a la vez el cargo de presidente de la Xunta y el de senador. Pero sea cual sea la decisión sobre su cargo, fuentes del PP afirman que la renuncia al frente del Gobierno gallego es un hecho y «ocurrirá entre abril y mayo, no más tarde».

Hasta ahora, Feijóo solamente se ha desprendido de su cargo al frente de la presidencia del PP de Galiza. Dado que tiene una cómoda mayoría parlamentaria en el Parlamento gallego, podría mantener el escaño pero ausentarse de los plenos por su rol de presidente del PP sin poner en peligro la aprobación de legislación.

Si bien en el equipo del nuevo presidente del PP admiten que la oposición se puede liderar en los tiempos que corren de muchas formas (mediáticas) y no hace falta un escaño, es el cara a cara con Sánchez el que consideran que puede ser importante. Sería la primera vez que un líder de la oposición en el Estado español no ostenta un asiento en el Congreso de los Diputados.

Nueva Ejecutiva, perfil gestión

Va poco más de una semana de la nueva dirección estatal del PP, que ha reemplazado a la anterior que debió disolverse antes por la feroz crisis interna del partido y la defenestración de Pablo Casado.

Desde el núcleo duro de Feijóo señalan a NAIZ que lo que buscó el líder gallego era poner en funciones todos dirigentes «que tengan experiencia orgánica y de gestión y no sólo que sepan de la retórica de la política». Destacan por ello el fichaje como secretaria general de Cuca Gamarra (exalcaldesa de Logroño), de coordinador general a Elías Bendodo y vicesecretario económico a Juan Bravo (ambos consejeros de la Junta de Andalucía). «Es una ejecutiva en la que sus cargos coinciden en diferentes elementos, con trayectoria en el partido y conocimiento de la vida orgánica del PP y experiencia de gestión», aseguran. Y si bien niegan haber tenido un espíritu «rupturista» con el estilo de Ejecutiva anterior (el tándem Casado-García Egea apostó a caras nuevas y que no haya presencia de la vieja guardia), aseguran que la intención de Feijóo no fue repartir «cuotas territoriales o familias ideológicas» sino un equipo que sea de «utilidad práctica al partido y a la gente». Una forma de montar equipos que «sigue la trayectoria de Feijóo» en Galiza.

Preguntado por NAIZ, un senador del Partido Popular de una provincia mediterránea opina que en la nueva Ejecutiva han vuelto algunas caras de la vieja guardia (cita como ejemplo a la albaceteña Carmen Navarro) y a Gamarra misma y señala que Feijóo ha cuidado de representar a las distintas «familias políticas» de la formación.

«El PP es un partido muy ancho, no es monolítico, tiene a algunos de centro, otros liberales, otros conservadores y otros de democracia cristiana. Con el nuevo equipo Feijóo ha dicho que todos se sientan cómodos», recalca. Otra característica que no es menor: el PP vuelve a tener cargo de coordinador general (una especie de número 3), algo que en la etapa Casado no ocurría. Otro viraje: de la concentración de poder en manos de García Egea, a la desconcentración con más capitanes en el barco (el último coordinador general había sido Fernando Martínez Maíllo).

La ofrenda a Ayuso

Según la misma fuente, el ambiente en el congreso extraordinario de Sevilla entre los dirigentes y compromisarios era de satisfacción por la «previsibilidad y certidumbre» que dio Feijóo con sus primeras decisiones. Hablando de ello, este lunes, de hecho, el coordinador general del PP puesto por el líder gallego ha firmado la convocatoria al congreso regional de la filial madrileña para renovar autoridades para el próximo 20 de mayo.

Que el primer congreso regional convocado por Bendodo haya sido Madrid (luego vendrá el resto) es un gesto para Ayuso, quien con su guerra intestina con Casado precipitó su salida y permitió la llegada de Feijóo, quien considera a la presidenta madrileña como el activo electoral más importante del partido.

Bendodo ha informado de que luego vendrán los otros diez congresos regionales pendientes en diferentes territorios y que la idea es que se convoquen «cuanto antes» y antes del verano. La primera en ser ungida será Ayuso, ya que tras la caída de Casado nadie optará a competirle (el alcalde Almeida ya ha desistido).