Esta mañana la Ertzaintza ha golpeado y retenido a Aritz Azkona Domínguez, responsable de Industria de Eskumaldea del sindicato LAB. «Lo único que ha hecho ha sido participar en una concentración junto a los trabajadores y trabajadoras en huelga en la empresa Alconza de Berango, perteneciente al Grupo Irizar Group», ha defendido el sindicato en un comunicado.

Se trata de la tercera carga de la Ertzaintza en los últimos tres días. Según ha informado la central sindical, debido a la actuación ha tenido que acudir al hospital. «La Ertzaintza le ha propinado varios golpes y lo ha retenido y, aunque posteriormente ha sido puesto en libertad, han amenazado con denunciarle y abrir una vía judicial. Afortunadamente, las imágenes que se han podido ver demuestran que los únicos agresores han sido los ertzainas, y que si alguien tiene que ser juzgado debieran ser ellos».

Aritz Azkona, Iturramako bizilagun ohia eta @LAB_eskumaldea -ko bozeramaileak kolpatu du Ertzaintza-k Alconza-ko langileek daramaten grebaren harira
Irudiak @irincon_ kazetariak grabatu ditu pic.twitter.com/VQoqPChEsk

— Ahotsa.info (@AhotsaInfo) April 27, 2022

Los trabajadores de Alconza cumplen 50 jornadas en huelga y esta semana la empresa ha querido retomar la producción. «Desde el lunes la Ertzaintza ha mantenido una actitud agresiva y violenta contra los y las huelguistas y los y las ciudadanas que han acudido a mostrar su solidaridad», ha insistido LAB.

Esta actitud «no es casual» la actitud de la Policía de la CAV. «El Gobierno Vasco se ha dado cuenta de que en los conflictos laborales no es suficiente con que se posicione del lado de la patronal. Y es que en conflictos laborales como Tubacex o PCB, aunque han apoyado públicamente los despidos, las y los trabajadores no se han resignado y han seguido luchando. Por lo tanto, el Gobierno Vasco ha decidido utilizar a la Policía contra los trabajadores y trabajadoras en los conflictos laborales».

Asimismo, entienden que «las multas, amenazas y palizas contra los miembros del sindicato LAB» en los distintos conflictos laborales suponen una «vulneración de derechos fundamentales». «Nuestro sindicalismo es de confrontación y hemos demostrado que hemos estado y estaremos en primera línea en la defensa de las condiciones laborales y de vida de los y las trabajadoras, algo que tanto la patronal como el Gobierno Vasco temen».

LAB ha reclamado «investigar la agresión» y que no se abra la vía judicial contra Azkona.