El conjunto de la primera plantilla y cuerpo técnico del Tudelano ha denunciado en una comparecencia pública la situación «muy delicada» que está viviendo en estos momentos y que tildan de «inaceptable».
Así, han puesto de manifiesto que el club «nos adeuda cerca de tres meses de salario, así como la prima de ascenso a 1ª RFEF de la temporada pasada, lo que nos supone que el día a día se haga insostenible, dado que apenas podemos atender nuestros gastos diarios».
En este sentido, insisten en que «no se ha cumplido con lo que se negoció y prometió en su momento», lo que ha provocado que «varios compañeros se encuentren en una situación psicológica y económica que les impide desempeñar con eficacia su trabajo como jugadores».
Así, denuncian el «abandono total» en el que se encuentran por parte de aquellas personas «que dirigen y gestionan el club», sin que hayan tenido «ningún tipo de apoyo, ni información a lo largo de la temporada».
Plantilla y cuerpo técnico acusan a los inversores mexicanos y argentinos, que compraron hace unos meses el club y que lo han llevado a presentar preconcurso de acreedores, de la situación caótica que se vive en la entidad tudelana.
Así, han relatado que, a lo largo de la presente campaña, han pasado por la capital ribera hasta dos directores deportivos diferentes. El primero, Guillermo Pereira, «abandonó el club al mes de comenzar la pretemporada y no volvimos a saber de él».
En noviembre le sustituyó Christian Barrientos, persona de confianza de los inversores mexicanos, pero que en marzo regresó a México, «sin motivo alguno, dejándonos totalmente solos». Asimismo, han explicado que el también inversor Raúl Sánchez, «tras notificarnos que había problemas para pagar, se marchó a Argentina con su hijo, Matías Sánchez, integrante de la primera plantilla».
Entrenamientos, césped y fisioterapeuta
Las irregularidades se han dato del mismo modo en el trabajo diario. Así, plantilla y cuerpo técnico han evidenciado que han entrenado «en cinco campos de entrenamiento diferentes» y que el césped del estadio «no ha sido tratado ninguna vez por un profesional», ejerciendo esta labor el utillero «de la mejor manera posible, sin ningún tipo de ayuda ni medios».
Del mismo modo, han señalado que han realizado viajes «en el día de más de cinco horas de autobús para jugar un partido y regresar a casa a continuación», además de tener «tres entrenadores de porteros diferentes y, en algunos momentos, ninguno».
Junto a ello, han enumerado que el club «ha dejado de abonar nuestros alquileres, a pesar del compromiso adquirido con nosotros» y que «llevamos un mes sin un fisioterapeuta que nos trate en el día a día, pues solo acude a los partidos y por voluntad propia».
Han querido dejar claro que la plantilla «siempre ha actuado con total profesionalidad, buscando el bien del Tudelano y con el objetivo de colaborar en la resolución de esta situación». «Nuestro compromiso con el club es total, entrenando cada día y compitiendo en todos los partidos con la máxima profesionalidad», han expuesto.
En todo caso, han matizado que no desean «poner ningún tipo de excusa y siendo conscientes de que somos los principales responsables de todo lo sucedido en el terreno de juego, sabiendo que no hemos estado a la altura ni de la competición ni de las expectativas».
El Tudelano ocupa la penúltima posición del grupo 1 de 1ª RFEF, con 24 puntos y a 14 de la salvación, a falta de disputarse únicamente cinco jornadas, por lo que, dependiendo del resultado frente al Unionistas de Salamanca de este próximo sábado, podría firmar su descenso matemático.