Hace una semana, el candidato presidencial del Pacto Histórico por Colombia, Gustavo Petro, canceló los actos electorales que tenía previstos para los días 3 y 4 de mayo en el Eje Cafetero tras recibir información sobre un plan para atentar contra su vida. Hoy ha vuelto a cancelar otra cita electoral.
«De acuerdo con la labor realizada por el equipo de seguridad, que recibió información de primera mano de fuentes de la zona, el grupo criminal La Cordillera estaría tratando de atentar contra mi vida. Es una organización paramilitar dedicad al narcotráfico y al sibarita que ha logrado un amplio control sobre las autoridades civiles regionales y políticos del Eje Cafetero, además de algunas instancias de la Policía y del Ejército, toda vez que algunos de sus miembros participan de dicha organización criminal», subrayó en el comunicado en el que dio a conocer las amenazas.
En el mismo precisó que «la Campaña Petro Presidente tuvo acceso a fuentes de alta credibilidad y a algunos miembros de la institución policial, los cuales manifestaron que un integrante de la Sijin – Dirección de Investigación Criminal e Interpor de la Policía Nacional colombiana– que habría participado en el asesinato del líder juvenil Lucas Villa también sería parte del plan criminal».
«Lamentable que tenga que suspender la gira del eje cafetero. El paso de los sectores de la corrupción a pagar bandas de sicarios para mi eliminación física, muestra la desesperación política a la que han llegado», afirmó el propio Petro tras hacerse pública esta amenaza.
También ha sido amenazada la candidata a vicepresidenta, Francia Márquez, quien además ha sufrido durante toda la campaña insultos racistas. El Gobierno de Iván Duque, si bien ha condenado estas agresiones, ha señalado que no disponen información de que exista un peligro real, lo mismo que la Policía.
Cinco muertes
Estas amenazas, sin embargo, han tenido un amplio eco en las redes sociales y han traído a la memoria de los colombianos la muerte en atentado de cinco candidatos presidenciales desde 1948.
El 9 de abril de ese año, mataron al candidato del Partido Liberal, Jorge Eliécer Gaitán, quien recibió tres balazos en el centro de Bogotá. El Premio Nobel de Literatura Gabriel García Márquez recogió en sus memorias que Gaitán «esparció la semilla de la resistencia aún en los últimos rincones con una gigantesca campaña de agitación que fue ganando terreno hasta llegar a las vísperas de una auténtica revolución social».
Dos años antes de que lo mataran, Washington consideraba que podía «convertirse fácilmente en una amenaza». A su muerte, se produjo el estallido social conocido como El Bogotazo.
El 11 de octubre de 1987 mataron a Jaime Pardo Leal, candidato presidencial en 1986 de la Unión Patriótica (UP), partido surgido en 1985 a raíz de los diálogos de La Uribe. Como candidato obtuvo una cifra récord de votos. El crecimiento de su popularidad y sus denuncias sobre el nexo entre los poderes políticos y el narcotráfico lo convirtieron en una amenaza.
El 18 de agosto de 1989 mataron al candidato del Partido Liberal, Luis Carlos Galán, cuando se disponía a dirigirse a sus simpatizantes en un acto electoral en la plaza de Soacha, al sur de Bogotá. Entre sus promesas electorales, combatir la corrupción y el clientelismo e intentar modernizar los partidos políticos y las instituciones colombianas.
Tan solo un año después, en 1990 mataron a otro candidato presidencial de la UP, Bernardo Jaramillo Osa, quien había reemplazado en la Presidencia del partido a Pardo Leal. Defendía que «no se puede hablar de paz, ni ser consecuente con la paz, cuando no se castiga ejemplarmente a los miembros del Estado comprometidos con la violencia hacia la población civil». El lema de campaña de la UP era «Venga esa mano, país».
También en 1990 mataron a Carlos Pizarro Leongómez, máximo comandante de la guerrilla M-19 –de la que formó parte el propio Petro– y que acababa de firmar un acuerdo de paz con el Estado colombiano. Este movimiento se disponía a participar por primera vez en las elecciones por la Presidencia de Colombia. Pizarro fue ametrallado en un avión a pesar de llevar escolta.
Estos días, su hija María José Pizarro, representante a la Cámara por Bogotá (2018-22) y senadora electa por el Pacto Histórico para el periodo 2022-2026, pedía en Twitter que «la tragedia de las elecciones de 1990 no se repita».
¡Nunca más la vida será asesinada en primavera! pic.twitter.com/9w2bGl3nuy
— María José Pizarro Rodríguez (@PizarroMariaJo) May 3, 2022