El incidente tuvo lugar cerca de la ciudad de Tulkarem, ubicada en el lado cisjordano de la valla, y resulta el primero de esta naturaleza desde el comienzo hace un mes y medio de una ola de ataques contra israelíes realizados, en varios casos, por palestinos que cruzaron el muro de forma irregular. Ataques que han sido respondidos por sangrientas operaciones de represalia.
La muerte del palestino fue confirmada por el Ministerio de Sanidad de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), que lo identificó como Mahmud Sami Jalil Aram.
El último ataque palestino tuvo lugar el pasado día jueves, cuando dos personas del norte de Cisjordania mataron a tres civiles israelíes en la ciudad de Elad tras cruzar por una brecha de la valla divisoria.
Los supuestos responsables de dicho ataque fueron atrapados hoy tras una extensa búsqueda por parte de las tropas israelíes, que reconocieron que el cruce de los atacantes representa un fallo del sistema de seguridad y en particular del Ejército.
El incidente de hoy fue seguido poco después por un ataque con cuchillo por parte de un palestino contra un policía israelí en la Puerta de Damasco de la Ciudad Vieja de Jerusalén, en el este ocupado de la urbe.
Según la Policía israelí, el atacante apuñaló a un oficial mientras estaba siendo inspeccionado, antes de ser «neutralizado» por otros oficiales presentes.
Los servicios de emergencia israelíes informaron que el policía recibió heridas cortantes en la parte superior de su cuerpo y fue trasladado a un hospital cercano en estado moderado.
Respecto al atacante, la agencia oficial de noticias palestina, Wafa, precisó que este resultó herido por los disparos de las fuerzas de seguridad, que luego se lo llevaron detenido.
Hasta el momento se desconocen la identidad y el estado de salud del atacante.
Estos dos incidentes tienen lugar en un contexto de elevada tensión en la zona, donde se han registrado ya seis ataques letales de palestinos contra israelíes en el último mes y medio.
Estos ataques dejaron hasta el momento un saldo de 18 muertos y fueron seguidos por cruentas redadas del Ejército en distintos puntos de Cisjordania, que causaron más de una veintena de muertos palestinos.