El abogado Miguel Alonso Belza, especializado en la defensa de casos de violencia machista, ha ingresado en prisión para cumplir condena por maltratar a su expareja sentimental.
Belza fue condenado a penas que sumaban siete años de cárcel por agredir en varias ocasiones en 2016 a la que fuera su compañera sentimental después de que esta decidiera acabar con la relación. La mujer le denunció por malos tratos y acoso, y aportó un vídeo con una episodio violento.
La sentencia de instancia, que le condenó por coacción, maltrato y lesiones, destacaba que el letrado, especializado en violencia contra la mujer, fue en todo momento «consciente» de los delitos que estaba cometiendo y merecía el mayor de los reproches penales. El Tribunal Supremo español confirmó las condenas al abogado, al rechazar los recursos que presentó.
Alonso Belza era conocido y reconocido como experto en violencia machista, hasta el punto de que impartía cursos a la Ertzaintza sobre esta materia. Pertenecía al turno de oficio para atender estos casos. Y llegó a representar a la familia de la joven Nagore Laffage, víctima de uno de los crímenes machistas más terribles en este siglo en Euskal Herria, un crimen que tuvo lugar en los sanfermines de 2008.
El abogado condenado tenía una amplia vida social en Donostia y un reconocimiento en su ocupación profesional porque, entre otras ocupaciones, había dado clases en la UPV-EHU, perteneció a la junta de gobierno del Colegio de Abogados de Gipuzkoa, formaba parte destacada del Instituto Vasco de Criminología y había participado en distintas tertulias de ETB. Fue apartado de todos sus cargos tras conocerse la denuncia, en 2017.
En su carrera profesional también había representado puntualmente al PSE y a instituciones en algunos casos judiciales.