No hay manera de evitar las finales entre el Barcelona y el Real Madrid en la ACB. Teniendo en cuenta que estos dos equipos también se vieron las caras en las semifinales de la Euroliga, en plena Final Four de Belgrado, no es extraño que en la competición doméstica también dominen con puño de hierro. Así, las cosas, después de que el Real Madrid eliminase al Baskonia por la vía rápida por 3-0 en semifinales, el Barça ha superado a un Joventut de Badalona que, ganó el segundo partido de la serie en el Palau Blaugrana y que, en un Palau Olìmpic lleno a reventar por primera vez en mucho años, ha caído pero haciendo sudar tinta al cuadro de Saras Jasikevicius.
Nikola Mirotic fue direfencial en los dos partidos de Badalona. En el 77-83 del tercer partido, el hispano-montenegrino se fue a loa 18 puntos y 7 rebotes, mientras que en el cuarto y definitivo duelo, escaso de calidad pero dramático y pleno de emoción resuelto la noche del viernes por 60-63, el ala-pívot de Podgorica se fue a los 20 tantos y 7 rechaces, salvando a un Barça que en el segundo cuarto llegó a estar con 12 puntos de desventaja, 28-16, ya muy cerca del descanso.
Este último encuentro dejó entrenver que ni siquiera los clubes futboleros van sobrados de energías. Amén de la torcedura de tobillo que sufrió el turco Sertac Sanli, la defensa de la Penya provocó un sinnúmero de fallos en el lanzamiento.
Sin embargo, los de Carles Durán, tremendamente desacertados en los triples y hasta en bandejas sencillas y varios tiros libres, perdonaron al Barça cuando estaba al borde del KO y, tras alcanzar el descanso con un pírrico 28-19, se vieron superados en el tercer cuarto.
«La segunda parte estábamos muy cansados y encima no han entrado algunos tiros que necesitábamos y, aunque el esfuerzo ha sido de diez, no hemos llegado al quinto partido porque el Barça es mejor que nosotros», comentó Carles Durán.
De hecho, el Barça pareció romper el partido en el último asalto, cuando entre Mirotic y Calathes lograron los azulgranas se escaparon 46-54.
A la desesperada, la Penya hizo un último esfuerzo y empató a 56, pero en los momentos finales, entre las personales –algunas absurdas– que supusieron la eliminación de pilares verdinegros como Guillem Vives y Joel Parra, más la veteranía blaugrana, el duelo cayó del lado barcelonés.
Las quejas de Carles Durán
El partido del Palau Olìmpic tuvo un corolario en la sala de prensa. Como suele ser habitual en él, Saras Jasikevicius centró su discurso únicamente en su equipo, algo muy común en los técnicos de baloncesto, aunque con la salvedad de que los rivales de los clubes futboleros sí suelen tener que contestar preguntas sobre los «grandes» a los que se enfrentan.
«Para los seguidores ha sido un sufrimiento grande, pero para mí, ganar el partido así, es mejor. Cuando no te sale nada, no metes ni bandejas, ningún triple, ellos se ponen 12 arriba, sigues e insistes... Ha estado muy bien. Hay que crecer a partir de este partido», resumió Saras Jasikevicius sobre el encuentro, obviando cualquier comentario sobre su rival.
Quizá por el calentón de la derrota, este proceder no le hizo ninguna gracia a Carles Durán, que tildó de «maleducado» a su colega lituano.
«No valora ni respeta al Joventut porque solo habla de ellos y no de nosotros. Nos ha faltado un poco al respeto cuando yo, por ejemplo, no he tenido problema en reconocer en que el Barça nos ha ganado porque ha sido mejor», se quejó.
Pablo Laso visita a su plantilla
Lo más probable es que Chus Mateo siga al frente del Real Madrid en la final de la Liga ACB, una serie que comienza este lunes a las 21.00 en el Palau Blaugrana. Con todo, una semana después del infarto de miocardio que padeció, el técnico gasteizttarra visitó el viernes a la plantilla merengue.
Laso también fue recibido por responsables de la sección como Juan Carlos Sánchez y Alberto Herreros, se abrazó con los jugadores y el resto del cuerpo técnico.