El martes a las 17.30 se pararon las fiestas a iniciativa del movimiento feminista. Ayuntamiento, Peñas, miembros del Ejecutivo y las distintas organizaciones de la ciudad protestaban contra la agresión sexual denunciada el pasado sábado, que acabó con el agresor detenido y después puesto en libertad con cargos y bajo la prohibición de comunicarse o acercarse a la joven que lo denunció.
Además de este caso, lo más llamativo han sido las ocho denuncias de mujeres que han notado un pinchazo –que les dejó marca– y después notaron afectación de sus facultades mentales. Las pruebas en el hospital no lograron detectar la sustancia que se les inoculó, pero esto no desmonta el relato.
El propio alcalde, Enrique Maya, ha dado este jueves veracidad a estos testimonios que cuadran con una práctica desconocida hasta la fecha en la ciudad, pero que en otros lugares se ha registrado con fines de atentar contra los derechos sexuales o para el de robos.
Maya ha negado que los pinchazos puedan atribuirse al «gamberrismo». «Sería inconcebible cuando ya sabemos que hay casos de pinchazos que lo que quieren es que haya una sumisión a través de determinados productos químicos para que luego se puedan cometer agresiones sexuales», ha asegurado.
«Aquí es evidente que no ha habido esa segunda fase, la de las agresiones, pero sí ha habido denuncias por pinchazos», ha sostenido el primer edil.
Bajando un escalón más abajo, las denuncias formalizadas por tocamientos superan la veintena. Y todavía faltan por cuadrar las cifras. De un lado, están las mujeres que han dado el paso de acudir a la Policía presentando la denuncia. Del otro, los 24 relatos de abusos que se realizaron en el punto de información sobre agresiones sexistas, que en su balance final ha indicado que no todas ellas acabaron después denunciando.
Punto de información
Este punto informativo sobre agresiones sexistas ha atendido a 15.900 personas sobre problemas concretos o para facilitar información de cualquier tipo sobre esta problemática. Desde este espacio municipal se ha dado cuenta de 104 incidencias. Además de los citados 24 casos de tocamientos, se han documentado casos de acoso verbal y elementos machistas en otros soportes.
La actividad del punto informativo, en comparación con años precedentes, ha sido sustancialmente mayor, cosa que sus responsables achacan a un nivel de concienciación mayor entre la ciudadanía (pues este incremento no se ha alineado con un mayor registro de denuncias policiales o con otros indicadores que miden la evolución de esta problemática, la más relevante de los sanfermines).
Los días 6, 7 y 8 registraron el mayor número de atenciones en el punto de atención, con más de 2.000 al día. El día de San Fermín se alcanzó el pico de estas fiestas, con 2.632, seguido por el día 8, con 2.283, y el día 6 con 2.198 atenciones. Después los números han ido en descenso.
Cabe recordar que la madrugada del día 7 es, por experiencia, la más compleja. En esa primera noche de las fiestas se registraron los casos que han marcado para siempre los sanfermines: la muerte de Nagore Laffage y la violación múltiple de ‘La Manada’, así como otras agresiones que han tenido un tratamiento mediático distinto.
En lo referente a acción preventiva y propaganda, este punto informativo contaba con 55.000 guías de actuación, 36.000 pines, 25.000 pegatinas y 10.000 tarjetas con información de los recursos disponibles en caso de sufrir una agresión. Estas tarjetas también fueron distribuidas por Policía Municipal y los auxiliares de Protección Civil.