El consejero de Economía y Hacienda, Pedro Azpiazu, ha presentado este martes en público las líneas generales del proyecto de presupuesto para 2023 que ahora el Gobierno remitirá al Parlamento y asegura estar abierto a negociar con todos los grupos parlamentarios, sin preferencias entre ellos, según ha detallado.
El proyecto presentado es 95 millones inferior al presupuesto actualizado que el Ejecutivo autonómico está manejando en este momento. Las cuentas presentadas por Lakua para 2023 ascienden a 14.250,7 millones de euros. Pero en estos momento trabaja con un presupuesto que se eleva a 14.345,6 millones, de los que hasta el 30 de septiembre había gastado 8.737,7 millones. Un 60,9%.
Como ha señalado el consejero Pedro Azpiazu, el proyecto es de 14.250,7 millones de euros, lo que supone un incremento del 8,7% con respecto al presupuesto aprobado en diciembre 2022, que fue de 13.107,8 millones. Pero después, a lo largo del año, ha ido teniendo una ampliación de 529,2 millones, habilitaciones por 232 millones más, una incorporación de remanentes de 331,4 millones, que junto a convenios y otras modificaciones, dan la cifra actual de 14.345,6 millones de euros.
Es probable que el presupuesto de 2023 también crezca por motivos similares a lo largo del ejercicio y los puristas de lo teórico señalen que lo que debe compararse es proyecto con proyecto. Pero no es menos cierto que cuando las cifras se utilizan con objetivos propagandísticos y cada año se anuncia «el mayor presupuesto de la historia» (ya se hizo el año pasado), es un ejercicio práctico poner las cosas en contexto.
Y no se gasta todo
También suele ocurrir con este Gobierno que, además, después a final de año nunca se gasta todo lo que se había anunciado. El último presupuesto liquidado es el de 2021. El presupuesto aprobado por el Parlamento fue de 12.442 millones de euros. El presupuesto actualizado a 31 de diciembre acabó siendo de 13.618 millones de euros. Pero al acabar el año solo se habían hecho pagos por 11.740 millones de euros.
A 31 de diciembre de 2021, el Ejecutivo de Lakua reconoció un remanente de tesorería de 1.876,6 millones de euros.
Lo que destaca el Gobierno
En la presentación de sus cuentas, el Ejecutivo ha destacado que «este proyecto de presupuestos destina un 76% del total (10.254,6M€) a políticas sociales, siendo Salud y Educación los departamentos que mayor incremento presupuestario presentan, seguidos de Planificación Territorial, Vivienda y Transportes, Trabajo y Empleo e Igualdad, Justicia y Políticas Sociales. El Gobierno Vasco mantiene su firme apuesta por la inversión pública que supera los 1.800M€ (un 14,8% más que en 2022) y por la I+D+i, con un incremento del 12% hasta alcanzar los 658,4M€ (70,6M€ más que en 2022)».
El presupuesto de 2023 es el primero que incluye desde su elaboración ingresos de Fondos Europeos MRR, que ascienden a 260 millones de euros, y se corresponden a las actuaciones que en este momento los distintos departamentos han de materializar para cumplir los compromisos asumidos con Europa.
Azpiazu ha señalado que «los mimbres de este proyecto de presupuestos son muy sólidos y su solvencia garantiza que Euskadi va a ser capaz de mantener el nivel de sus servicios públicos, impulsar la actividad económica y generar empleo, para hacer frente a la turbulenta situación económico social que nos está tocando vivir».
«Negociar con todos»
El consejero ha respondido a los medios que no tiene predisposición por ningún grupo para la negociación de los presupuestos, sino que hablará con todos. Azpiazu ha recordado que los grupos que conforman el Gobierno tienen mayoría absoluta en el Parlamento.
En cuanto al hecho de que el año pasado se alcanzara un acuerdo con EH Bildu, por el que este grupo se opuso a las enmiendas a la totalidad de otros grupos y abstuvo en la votación final, Azpiazu ha asegurado que se están realizando reuniones periódicas para el seguimiento del pacto y que lo que le comentan quienes participan en ellas es que se está cumpliendo con lo acordado. «No me trasladan nada que no sea satisfacción», ha concluido.
Las ayudas en el IRPF se comen el programa Hitzartuz
El Consejo de Gobierno también ha aprobado hoy el programa Hitzartuz definitivo, que contempla medidas como el incremento del 10% de las AES, ayudas para alimentación, que se gestionarán a través de la Cruz Roja, y ayudas también para la lucha contra la pobreza energética y la eficiencia en esta materia.
Se anuncian también líneas de crédito especiales para empresas intensivas en energía, pymes y autónomos y refuerzos en programas de ayuda para incentivar el ahorro y el autoconsumo en estas mismas empresas.
Se asegura que este programa moviliza 334,3 millones de euros. Pero 200 de ellos son lo que el Gobierno estima que dejará de cobrar por la deflactación del 2% en el IRPF y la prórroga de la deducción de 200 euros para rentas inferiores a los 30.000 euros.