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Iruñea

El Banco de ADN del Gobierno navarro identifica a Manuel Serón, exhumado en Paternain

El Banco de ADN del Gobierno de Nafarroa ha dictaminado que uno de los restos exhumados en la fosa de Paternain, el pasado mes de julio, corresponde a Manuel Serón Marco, natural de Villarroya de la Sierra (Zaragoza).

Paco Etxeberria, de Aranzadi, junto a la consejera Ana Ollo, en la fosa de Paternain.
Paco Etxeberria, de Aranzadi, junto a la consejera Ana Ollo, en la fosa de Paternain. (NAFARROAKO GOBERNUA)

El Banco de ADN del Gobierno de Nafarroa ha elaborado un nuevo dictamen de identificación, que establece que uno de los restos exhumados en la fosa de Paternain el pasado mes de julio corresponde Manuel Serón Marco, natural de Villarroya de la Sierra (Zaragoza).

Serón, de 34 años, casado con Carmen Puértolas Lorés y padre de una hija y un hijo, fue detenido en el barrio de Arrotxapea de Iruñea, donde vivía, y trasladado a Paternain con otro grupo de ferroviarios de la estación de la capital vasca, de los que ya ha sido identificado Gregorio Albo.

En la inscripción tardía de su defunción, promovida por su viuda, se establece la fecha del 29 de agosto de 1936. Según la información facilitada por el Gobierno navarro, no llegaron a pasar por ningún centro de detención, o al menos no queda registro de ello; una práctica relativamente frecuente en la limpieza política emprendida por los sublevados en 1936.

La fosa de Paternain fue exhumada en julio de 2022, tras varios intentos infructuosos en ejercicios anteriores, desde 2016, en que fue incorporada a los planes de exhumación de la Dirección General de Paz, Convivencia y Derechos Humanos.

La de Manuel Serón es la identificación número 34 desde la puesta en marcha del Banco de ADN del Gobierno de Navarra, y ha sido posible gracias a los trabajos de cotejo del laboratorio genético de Nasertic con las muestras de ADN aportadas por su hija.

Es el segundo cuerpo identificado en esta exhumación, y no es descartable que puedan producirse nuevas noticias, ya que en las últimas semanas se ha podido contactar con familiares de personas que pudieran estar en esta fosa.

En este sentido, el Instituto Navarro de la Memoria agradece la implicación de asociaciones e investigadores en esta tarea de búsqueda, dificultada por la dispersión geográfica.