Un informe de Aliente y el Observatorio de la Sostenibilidad destaca que toda la potencia renovable proyectada cabe en zonas que ya han sido alteradas, por lo que no es necesario «sacrificar nada más» ante los planes de aumento de la superficie dedicada a energías renovables que impulsan las instituciones europeas y estatales.

«No es necesario sacrificar zonas agrícolas, forestales y paisajes solo por el interés de grandes empresas», sostienen, subrayando que, de este modo, «la transición energética sería sostenible, distribuida y eficiente».

El estudio ‘Renovables sostenibles: fotovoltaica’ destaca que en el Estado español existen superficies antropizadas (que están ya afectadas por la acción humana) suficientes para instalar 181 GW, que producirían más de 272.037 GWh/año en energía fotovoltaica, lo que es superior al consumo anual del Estado español, cifrado en 259.905 GWh.

De este modo, sostienen que es posible avanzar en la producción de energía fotovoltaica con un mínimo impacto ambiental.

El informe añade que existen en el Estado español 300.000 hectáreas en tipos de superficie como tejados y cubiertas; zonas industriales; vertederos; escombreras; minas abandonadas; zonas aledañas a autovías, autipistas y vías férreas, canales e invernaderos en los que sería posible instalar la producción de energía fotovoltaica.

Por todo ello, Aliente, donde se integran decenas de colectivos, subraya que «no tiene ningún sentido y es totalmente insostenible la actual política de instalar paneles solares en campos de cultivo y ecosistemas forestales» y califica de «muy alarmante» la propuesta de la Comisión Europea de acelerar los procesos de implantación de renovables. Esta propuesta se votará el martes por parte de los ministros de Energía de la UE y está previsto que entre en vigor al día siguiente.

Frente a ello, insisten que la implantación de nuevos superficies para la energía renovable debe hacerse en suelos ya antropizados «porque hay espacio de sobra».

«Es inadmisible que fomenten la mayor degradación medioambiental de la historia», subraya Aliente, que considera que debería implantarse una moratoria en la instalación de nuevas plantas fotovoltaicas hasta que se garantice que se ubiquen en zonas sin impacto ambiental.