La reunión del lunes entre la dirección de Osakidetza y la comisión negociadora conformada por jefes de servicio y trabajadores de la OSI Donostialdea había traído paz momentánea a la crisis abierta a principios de mes, con un «impasse» hasta el 18 de enero, pero este jueves han vuelto a tensarse las cosas. Tras la realización de una asamblea a las 14.00, los jefes de servicio han decidido retomar las concentraciones de protesta, como respuesta a un encontronazo con el nuevo gerente, Agustín Aguirre, a quien no reconocen ya como interlocutor.

Los médicos críticos con la gestión de Osakidetza han celebrado este viernes una asamblea de urgencia en la que han expuesto el último conflicto con la gerencia y han decidido convocar concentraciones de protesta semanales todos los lunes a las 8.15 horas en las escaleras de acceso al centro sanitario donostiarra.

El portavoz de los jefes de servicio, Adolfo López de Munain, ha confirmado, al término de la asamblea, que el gerente les reclamó ayer que desmintieran las declaraciones del exsubdirecor médico de la OSI Donostialdea, Adolfo Begiristain, a lo que los médicos se han negado y han respondido con el regreso de las movilizaciones.

En la citada entrevista, Beguiristain exponía su impresión de que al Gobierno de Lakua «no le interesa que la OSI Donostialdea sea una organización potente». Citaba casos como el de pacientes que han sido enviados «de Cruces a Córdoba en vez de a Donostia» y añadía que «la consejera Sagardui ha dado a unos amigos suyos la posibilidad de llevar a cabo la técnica Hipec en Cruces, para tratar un cáncer del cual no tenían ni experiencia».

Estas aseveraciones no tuvieron respuesta oficial pública durante la jornada del jueves, pero sí en privado con esta exigencia de desmentido que ha generado nuevas reuniones internas en el Hospital Donostia. En principio, las movilizaciones que se emprendieron con carácter diario estaban interrumpidas hasta reevaluar la situación el 18 de enero, después de que el lunes la dirección de Osakidetza se comprometiera a estudiar las demandas de los profesionales de Donostialdea.

Malestar en Cruces

Las declaraciones de Beguiristain, por cierto, han creado malestar en el Hospital de Cruces, en Barakaldo.

Cinco jefes médicos de Cruces han acusado a exdirectivos y jefes de servicio de la OSI Donostialdea de «mala fe» y de «mentir» al afirmar que Osakidetza otorga trato de favor al centro hospitalario por «amiguismo», al autorizar, entre otras cuestiones el uso en Cruces de una técnica en el tratamiento para el cáncer peritoneal, del que ellos son especialistas, y empleada solo hasta ahora en el hospital guipuzcoano.

Los facultativos, que han hecho pública una carta en ‘El Correo’, son Aitor de la Quintana, Alberto Muñoz y Txanton Martínez-Astorquiza, jefes de servicio de Cirugía General, Oncología Medica y Ginecología, respectivamente, así como Andrés Valdivieso y Gaizka Mallabiabarrena responsables de las Unidades de Cirugía Hepatobiliar y Transplante Hepático y Ginecología Oncológica.

En especial, los firmantes de la carta apuntan directamente al exsubdirector médico del Hospital Donostia, Adolfo Beguiristain, a quien acusan de «mentir, no por ignorancia, sino por mala fe», y de emplear en sus declaraciones un tono «ofensivo» hacia el hospital vizcaíno y su personal médico.

Los autores del escrito aseguran por ejemplo que en Cruces realizan la cirugía peritoneal «desde 1996, con 43 intervenciones este año y más de 130 desde 2016» y añaden que, «en más de una ocasión, el hospital guipuzcoano ha rechazado a pacientes derivados de Cruces que han sido tratados con éxito en otros centros del país con más experiencia».

Respecto a la técnica Hipec, manifiestan que «en ningún momento hemos pedido que se le retirara al HUD la realización de esta técnica, sino que solicitamos poder utilizarla también con nuestros pacientes con carcinoma de ovario que lo necesitan». Y añaden que «no es cierto» que Cruces no tenga experiencia en el tema, por lo que Beguiristain «miente y atenta contra nuestro prestigio profesional porque en el País Vasco los cirujanos nos conocemos y él lo sabe»