La normativa autonómica pretende garantizar al usuario unos plazos máximos de respuesta quirúrgica que, de ser excedidos, habilitarán a este a recurrir a otros medios sanitarios con el fin de no demorar el tratamiento que precise, todo ello a cargo de la Administración pública.

Pues según una respuesta remitida por el Departamento de Salud al Parlamento, en el 34,26% de las cirugías cardíacas se supera el plazo previsto, y lo mismo ocurre en el 12,43% de los pacientes de cirugía oncológica y en el 9,64% del resto de operaciones programadas y no urgentes.

Según el decreto 65/2006, «los plazos de garantía para la realización del procedimiento quirúrgico
prescrito no podrán superar los 30 días naturales para cirugía oncológica, 90 días para cirugía cardiaca y 180 días para otros procedimientos quirúrgicos».

A requerimiento de la parlamentaria de EH Bildu Rebeka Ubera, la consejera de Salud, Gotzone Sagardui, ha informado de que la situación de la lista de espera quirúrgica a 13 de diciembre de 2022 es la siguiente: en cirugía cardíaca hay un total de 108 pacientes, de los que 37 llevan ya más de 90 días de espera. Los pacientes oncológicos son 563, y 70 de ellos llevan más de 30 días esperando. En cuanto al capítulo de «otros procedimientos», los pacientes son 23.309, de los que 2.248 llevan más de 180 días sin ser operados.

Empeoramiento global sobre julio de 2022

La última ocasión en la que el Departamento de Salud había informado de estas listas de espera fue con fecha de 15 de julio de 2022. Entonces había 110 pacientes a la espera de una operación cardíaca, de los que 40 habían superado el plazo máximo de respuesta. Esto suponía el 36,36% de exceso de demora, por lo que se puede decir que hasta fin de año había mejorado un poco la situación, aunque el ratio siga siendo muy grande.

Pero en los casos de cirugía oncológica y otros procedimientos, la situación ha empeorado. La lista de espera de pacientes oncológicos era de 623 personas, de las que 47 superaban el plazo de 30 días previsto. Esto era un 7,54%, que ha crecido hasta el 12,42% de julio a diciembre. En cuanto al resto de pacientes LEQ (lista de espera quirúrgica), en julio eran 23.831, de los que superaban los 180 días sin ser operados 1.047, lo que supone un 4,50%, un dato que era algo menos de la mitad  del 9,64% de diciembre.

Paga la Administración

Según la normativa, transcurridos los plazos de respuesta establecidos en el decreto, el paciente podrá solicitar autorización para recibir atención en otro centro sanitario. Se abre un procedimiento burocrático en el que si no recibe respuesta a tiempo se entenderá estimada la solicitud y el paciente quedará habilitado a acudir a otro centro sanitario de su elección dentro de la oferta sanitaria existente en la CAV.

En estos casos, el Departamento de Salud abonará directamente los gastos de la intervención quirúrgica en caso de que la misma se practique en el centro al que se le hubiera derivado. En el caso de que el o la paciente haya abonado previamente el importe, se le reintegrará el mismo, siendo la cuantía del reintegro la correspondiente a los importes establecidos en la normativa vigente de tarifas aplicables a los conciertos de asistencia sanitaria prestada con medios ajenos al Sistema Sanitario de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa.

EH Bildu pide que se cumpla el decreto

Ante los datos recibidos por su propia petición de información, la parlamentaria de EH Bildu, Rebeka Ubera, ha incidido en que la situación ahora es peor que la de julio. Ha recordado que su grupo ya pidió en noviembre en el Parlamento que Osakidetza «cumpliera de una vez el decreto de 2006» y que aquella propuesta fue rechazada por el PNV y el PSE. «Ahora vemos que el problema de las listas de espera, lejos de solucionarse, está empeorando».

La parlamentaria de EH Bildu considera urgente cumplir el decreto de listas de espera y para ello propone nuevamente organizar conjuntamente los hospitales comarcales y universitarios, estableciendo turnos de tarde, y cambiar el modelo de contratación de Osakidetza.