«Hoy estamos aquí porque nos han informado de la explotación de primera mano y se han atrevido a denunciar su situación», ha declarado LAB en la concentración que ha llevado a cabo este martes ante el bar Senra de Hondarribia.
Como denunciaron en el caso de los trabajadores y trabajadoras de los locales donostiarras con el nombre Senra, regentados por el mismo hombre, en Hondarribia «también se les obligaba a realizar jornadas de 12 y 15 horas sin contrato laboral ni descansos, todo ello a cambio de un miserable salario», ha denunciado el sindicato. «Es más, este bar es conocido en el pueblo por contratar a personas que se encuentran en situaciones de vulnerabilidad como migrantes y personas en situación administrativa irregular», ha apuntado.
«No es un caso aislado»
LAB ve que este no es un caso aislado, ya que «el ‘modus operandi’ es claro: una cruel forma de actuar que consiste en aprovecharse sistemáticamente de personas que se encuentran en situación de vulnerabilidad». Ha enfatizado que «es la racista Ley de Extranjería del Estado español la que permite esta situación. Conforme a ella, miles de personas deben trabajar en la economía sumergida durante al menos tres años hasta regularizar su situación administrativa».
En relación con el modelo de explotación mencionado, «se aúnan racismo, clasismo, chantaje y abusos, situaciones violentas y discriminatorias. Y detrás de ellos se encuentra la patronal especuladora, que se enriquece a costa de la miseria. Un porcentaje importante de la hostelería está inmersa en la economía sumergida, sin convenio alguno».
LAB ha recordado que el último convenio laboral que se firmó fue derogado en 2010, y no se ha renovado desde entonces. «Esto precariza aún más al sector, y el responsable principal es la Asociación de Hostelería de Gipuzkoa», ha señalado.
Los manifestantes han querido enviar un mensaje claro a este tipo de hosteleros: «Nos tendréis delante, utilizaremos todos los instrumentos a nuestro alcance para haceros frente. No queremos explotadores en nuestros pueblos, no seréis bienvenidos».
Así, además de hacer un llamamiento al boicot, LAB luchará para que el derecho a trabajar en condiciones dignas sea para todas las trabajadoras y trabajadores.
«Aquí explotación no hay»
En paralelo, varios trabajadores, en nombre «de todo el equipo de trabajo Senra» de Hondarribia y de Donostia», ha querido también dar su versión a los medios de comunicación allí presentes.
Además de negar que en ese negocio se explote a los y las trabajadoras, han pedido que no se repitan concentraciones similares frente al local: «Tenemos derecho a trabajar como la gente normal».