En la víspera de la manifestación convocada para este sábado, el Movimiento de Pensionistas de Euskal Herria (MPEH) han vuelto a reclamar este viernes unas pensiones mínimas de 1.080 euros después del acuerdo entre el Gobierno español y los sindicatos CCOO y UGT para la reforma del sistema de pensiones. Un acuerdo que el MPEH ha calificado de «tomadura de pelo», calificando la reforma de «rácana y mediocre».

En una rueda de prensa organizada en las escalinatas del Ayuntamiento de Bilbo, misma ubicación donde se reúnen los lunes de cada semana desde hace más de cinco años, los portavoces del MPEH Maite Guridi y Jesus Mari Soubies han lamentado que el recientemente aprobado Decreto Ley de reforma de las pensiones «sigue sin garantizar una pensión mínima de 1.080 euros, ni siquiera para 2027», de la misma forma que no lo han hecho los gobiernos de Lakua y Nafarroa.

Por ello, y considerando que una pensión mínima de 1.080 euros es «un ingreso básico para que una persona pensionista pueda acceder a una vida digna en su vejez», han exigido que ambos ejecutivos complementen hasta esa cantidad los ingresos que perciben las personas mayores. Según datos del MPEH, el 80% de los pensionistas de Hego Euskal Herria cobra por debajo de los 1.000 euros mensuales, mientras que el 60% no llega a los 800 euros al mes.

Sobre la evolución de las pensiones hasta 2027 planteada en el Decreto Ley, Soubies ha detallado que la actual pensión mínima se sitúa en los 743 euros, mientras que en 2027 será de 873, «según los cálculos del propio Gobierno». En el caso de las viudas y personas con una discapacidad del 65%, en 2027 cobrarán 920 euros frente a los 783 euros actuales, por lo que en ambos casos continuará siendo una cifra muy por debajo de los 1.080 euros que demandan. «Esto es una tomadura de pelo, no llega ni a humo», ha denunciado el portavoz de los pensionistas.

«Este Decreto Ley, a pesar de los aspectos positivos que contiene, es parte de un proceso de reformas que está recortando pensiones y derechos de las personas pensionistas. Reformas que como la de 2011 deberían haber sido derogadas y que esta reforma perpetúa», han valorado.

En cuatro años, ha señalado Soubies, la subida será del 17%, lo que en los actuales parámetros corresponde a un aumento anual de aproximadamente el 3% hasta 2027. «Es demasiado poco. Eso no garantiza una vida digna para nadie», ha señalado, recordando la actual subida de recursos básicos como la energía y los alimentos.

Manifestación en Bilbo

El pensionista alavés también ha aprovechado para comparar la situación en el Estado español con la que se está viviendo en el Estado francés: «Viendo la situación de Francia, es vergonzoso que este Gobierno de coalición que tenemos, calificado de ‘izquierdas’, haya hecho una reforma tan rácana y mediocre». Al mismo tiempo, ha aprovechado para mostrar su solidaridad con la lucha de los pensionistas en el Estado francés, especialmente con los de Ipar Euskal Herria. «Su lucha es nuestra lucha», ha sentenciado.

Finalmente, han animado a la población a acudir a la manifestación que tendrá lugar este sábado 18 de marzo en Bilbo, a las 12.00 desde la plaza Elíptica, y que contará con el apoyo de numerosas organizaciones sociales y sindicales, como la Carta de Derechos Sociales de Euskal Herria, ELA, LAB, ESK, EHNE, CGT, CNT, Steilas y movimientos de pensionistas de diferentes puntos del Estado. Con esta convocatoria, el MPEH culminará el ayuno y encierro que llevan a cabo pensionistas desde el pasado lunes, 13 de marzo.