Humza Yousaf ha sido elegido por los militantes del Partido Nacional Escocés (SNP) como nuevo líder, sustituyendo así a Nicola Sturgeon, quien hace algo más de un mes anunció de manera sorpresiva su dimisión como ministra principal de Escocia.

Yousaf, quien había ocupado la cartera de Salud en el gabinete de Sturgeon, deberá esperar a este martes para ser nombrado ministro principal de Escocia tras una votación en Holyrood, una mera formalidad, pues cuenta con amplias mayorías. Posteriormente, el miércoles jurará su cargo ante el Tribunal de Sesiones de Edimburgo.

El nuevo líder de los nacionalistas escoceses, el quinto desde que se fundó el partido en 1979, se ha impuesto en segunda ronda y con el 52% de los votos a la ministra de Finanzas Kate Forbes. Antes, ambos habían dejado sin posibilidades a la exministra de Seguridad Comunitaria Ash Regan.

Yousaf, de 37 años y que se presentó como el candidato de la continuidad que mantendrá la línea progresista de Sturgeon, se hizo con el respaldo mayoritario de los más de 70.000 afiliados del SNP.

Llamamiento a la unidad

En su primera alocución como nuevo responsable del SNP, ha enfatizado ante todo la necesidad de unir al partido, que afronta un momento decisivo tras más de ocho años de liderazgo carismático de Sturgeon.

«En las últimas cinco semanas, hemos podido ser competidores, pero ahora somos un solo equipo, la generación que conseguirá la independencia para Escocia», ha dicho Yousaf en el acto, celebrado en el estadio Murrayfield de Edimburgo.

El nuevo líder del SNP se comprometió a gobernar «en interés de todos los escoceses, al margen de sus preferencias políticas», con la «prioridad inmediata de proteger a cada ciudadano de la crisis del coste de la vida».

A su juicio, Escocia «necesita ahora más que nunca la independencia», algo que solo conseguirá si los independentistas defienden sus argumentos «puerta por puerta».

Como primer jefe del Ejecutivo escocés musulmán, Yousaf se ha felicitado por que «el color de piel ni la religión sean un obstáculo» para gobernar Escocia y, en presencia de su madre keniana y su padre paquistaní, ha enviado un mensaje rotundo: «Celebraremos a los inmigrantes que tanto contribuyen a este país».

Por otro lado, ha recibido la enhorabuena de Sturgeon, quien tras reconocer a los otros dos candidatos por haber estado a la altura del «desafío» que han sido estas primarias, ha deseado «mucho éxito» a Yousaf, a quien ha definido como «un líder destacado». «No podría estar más orgullosa de que me sucediera», ha dicho.

Si bien Sturgeon se ha cuidado mucho de no expresar ninguna preferencia pública por alguno de los tres candidatos, Yousaf es visto como su favorito y por ende una suerte de apuesta de continuidad, según apuntan medios tanto dentro como fuera de Escocia.

Él ha sido el único de los tres candidatos que ha asegurado que intentará derribar en los tribunales el bloqueo de Londres a la ‘ley trans’ del Gobierno, un varapalo que para algunos acabó por desencadenar la dimisión de Sturgeon.

En cambio, se ha distanciado del plan de Sturgeon de presentar las próximas elecciones como una suerte de referéndum de independencia de facto y ha expresado que su intención es seguir trabajando para lograr amplias mayorías, pues «no es lo suficientemente bueno» dar este paso si el apoyo a esa opción se mueve solo entre el 50 y el 51%.