Osakidetza impulsará un nuevo modelo de atención ciudadana «en diferido», que buscará atender a los pacientes de manera «más operativa» mediante la telemonitorización y la teleasistencia.
Así se recoge en dos de las seis líneas estratégicas que dibuja en Plan Estratégico de Osakidetza para los próximos tres años (2023-2025) y que este lunes han presentado en comisión parlamentaria la consejera de Salud de Lakua, Gotzone Sagardui, la directora general de Osakidetza, Rosa Pérez y la subdirectora de calidad, Maribel Romo. Han subrayado que el momento en el que se ha elaborado este documento «es importante porque la Organización ha sido capaz de sobreponerse a las consecuencias de la pandemia para proyectar una visión de futuro».
Este nuevo plan, que tiene como lema «Juntas, juntos, relanzando Osakidetza hacia el futuro», incluye dentro de una de sus líneas estratégicas la transformación digital, que irá «más allá de coger cita en la web», según Romo. El Departamento de Sagardui, quien el año pasado anticipó un «cambio cultural» hacia lo digital en la atención en Osakidetza y negó más tarde sus palabras visto el revuelo que causaron, confirma ahora que se creará un «centro de atención virtual» que permitirá atender a los pacientes «en diferido».
Así lo señala la sexta línea estratégica del plan, referida a la innovación, pero también se alude a la atención en diferido en la línea dos, que define la estrategia para atender la cronicidad de las enfermedades y los problemas de salud que más impacto tienen en la calidad de las personas. En este punto, uno de los cuatro objetivos a perseguir es poner el paciente «en el centro» de una manera «más operativa» mediante la telemonitorización y teleasistencia.
Sagardui pide que no se manipule
El plan ha sido criticado por la oposición por su falta de concreción, por no incluir expresamente un refuerzo de la plantilla y por no recoger acciones claras para hacer frente a los problemas del sistema sanitario público.
Jon Hernández, de Elkarrekin Podemos, ha criticado a la consejera la decisión de optimizar la teleasistencia frente a la falta de profesionales y Sagardui, por su parte ha pedido a la oposición que «no se manipule la palabra digitalización» al asegurar que el plan «no contempla la digitalización de las relaciones con las ciudadanía», sino el «aprovechamiento de las oportunidades tecnológicas que facilita la digitalización de determinados procesos».
«Una mayor resolución en las consultas, reducción de la burocracia, agilidad en las respuestas de determinadas consultas y tratamientos más innovadores. Eso es lo que la línea de la digitalización de este plan establece», ha defendido.
Participación
Sagardui ha citado la forma de elaboración de este plan subrayando que ha sido «lo más participativo posible» y ha aclarado que «este no es el Plan Estratégico de la dirección de Osakidetza, es el Plan Estratégico de Osakidetza».
En el mismo sentido, la parlamentaria del PSE Susana Corcuera ha reconocido el «trabajo y compromiso de las más de 300 personas que han participado en este plan» que es «muy ambicioso y complejo» y la parlamentaria de PNV Itxaso Berrojalbiz ha afirmado que este documento establece «una hoja de ruta para sentar las bases de la Osakidetza del futuro».
Sin embargo, La parlamentaria de EH Bildu Rebeka Ubera ha rechazado que el Gobierno «no ha querido recoger las aportaciones de los trabajadores, demostrando que no saben negociar». «Este documento no tiene credibilidad. No coincide con lo que hace y practica en el día a día el Departamento de Salud», ha reprochado, para reclamar al Gobierno que «consolide» la plantilla de Osakidetza ante la falta de sanitarios.
También Carmelo Barrio, de PP+Cs, ha criticado la gestión de Lakua en Osakidetza, aludiendo a la «falta de liderazgo» de Salud, aunque ha precisado que el plan presentado este lunes es «necesario».