Ane  Urkiri
NAIZeko zuzendaria / Directora de NAIZ
Elkarrizketa
Elke Karsten
Jugadora del Bera Bera

«Tuve la suerte de ganar la Copa el último año y espero que se repita este año»

Elke Karsten (Quilmes, Argentina, 1995) regresó a principios de año a Bera Bera tras la deuda insostenible del Bourg-de-Péage Drome que le obligó a renunciar a la competición francesa. El equipo donostiarra siempre fue su primera opción, «porque es un lugar donde me sentí segura».

Elke Karsten, antes de un entrenamiento en la semana copera.
Elke Karsten, antes de un entrenamiento en la semana copera. (Jon URBE | FOKU)

Solo cuatro jugadoras permanecen en Bera Bera desde la última Copa ganada por el cuadro guipuzcoano en 2019 en Lasesarre: Alba Menéndez, Esther Arrojeria, Maitane Etxeberria y Elke Karsten, que está de regreso en Donostia después de tres años y medio.

En 2019 fichó por el equipo húngaro Debreceni VSC y militó durante dos temporadas, para luego emprender una nueva experiencia en Noruega con el Molde. El pasado verano firmó con el Bourg-de-Péage Drome pero los problemas económicos le llevaron a renunciar a la competición. Ante esta situación, los caminos del Bera Bera y de la argentina volvieron a cruzarse.

Está con ganas de afrontar este mes y medio decisivo que comenzará con la disputa de la fase final de Copa en Málaga, lugar donde empezó a «ser jugadora profesional», y tiene claro que los partidos coperos son a vida o muerte: «El equipo que mejor esté preparado ese día, se va a llevar la victoria».

¿Cómo se encuentra?

Bien, la verdad que me siento muy bien, tanto a nível físico como de juego, estoy recuperando sensaciones. Me siento que estoy volviendo a ser yo.

¿Le condicionó todo lo extradeportivo que ocurrió con Bourg-de-Péage Drome?

Siempre lo que pase fuera de una pista influye porque somos personas antes que jugadoras, pero el venir aquí, que un club me abra las puertas, entrar en el equipo y que me reciban, te da una tranquilidad extra. Te da ese plus para volver a ser y eso fue lo más importante después de todo.

Era como un valor seguro: se conocían mutuamente, por lo que era más fácil amoldarse.

Claro. Conocía la liga, conocía al equipo. Es un equipo totalmente nuevo porque solo jugué con tres del actual equipo: Maitane [Etxeberria], Alba [Menéndez] y Esther [Arrojeria]. Pero sabes a lo que juega Bera Bera, ya conocía a Imanol [Álvarez], y es más fácil adaptarse. También el idioma y todo, es un cúmulo de cosas.

¿Cómo se dio su fichaje?

Fue como un boca a boca lo que estaba pasando en el club, antes de que fuera oficial. Ahí empecé a hablar con Tati [Garmendia] y se dio la propuesta oficial. Yo desde el minuto 0 que me dijeron que se podría dar oficialmente, había tomado la decisión. Para mí era importante volver a un lugar donde me sentí bien, donde me sentí segura y creo que Bera Bera es una muy buena opción; lo fue en su momento también y estoy feliz con la decisión que tomé.

¿Cómo ve al equipo?

Creo que el equipo está muy bien. Bera Bera siempre hace plantillas para ganar todo, y así lo demuestra cada temporada. Creo que en el último partido las sensaciones fueron buenas. No se cuenta mucho sobre el rival, sino analizando a nosotras y ver qué podemos mejorar, pero creo que el equipo está muy bien y llegamos en un buen momento.

El derbi no da para sacar muchas conclusiones pero Imanol trató de jugar prácticamente con dos equipos distintos y apenas se notó diferencia.

Todo el mundo lo dice: Bera Bera tiene un equipo titular y uno suplente que es titular en cualquier equipo. Es así como se confecciona el equipo para poder estar luchando en todo. Es muy importante que todas las jugadoras tengamos ganada la confianza de entrar y poder hacerlo bien. Creo que en todos los partidos no hay una gran diferencia entre titular y suplente; el equipo está muy nivelado.

Tener una plantilla amplia debería ser un punto a favor para una competición como la Copa, pero hace 4 años que Bera Bera no la gana....

[Se ríe]. Sí, para mí es muy importante. Para mí, hoy por hoy, el juego está siendo muy rápido, con mucha velocidad y es muy difícil mantener un buen rendimiento durante el partido. Entonces, tener cambios y que la jugadora que entre rinda y no te haga medio doler la cabeza, es superimportante.

Desde que se marchó Bera Bera no ha ganado la Copa... ¿Es una señal?

No, no [se ríe]. Mi fichaje fue un poco de casualidad. Estoy agradecida de que abrieron las puertas. Estaba la posibilidad y se dio. Es verdad que no se gana la Copa hace mucho [se ríe]; tuve la suerte de ganarla el último año y espero que este año se repita. La Copa es especial, la mayoría de los equipos en la Copa están mucho más nivelados.

Elche, rival de los cuartos de final. Un rival duro para el Bera Bera en los últimos años. ¿Cómo lo ve?

Es un rival un poco más incómodo quizás por su defensa, que van muy arriba y eso complica un poco. Creo que uno se tiene que centrar en lo que sabe hacer bien, que es defender fuerte y poder correr, y después ya con calma gestar el ataque, ir de a poquito. Nosotras tenemos que tener claro que todos los partidos se ganan de atrás para adelante y ese es el fuerte de Bera Bera.

«[El Elche] Es un rival un poco más incomodo quizás por su defensa. Nosotras tenemos que tener claro que todos los partidos se ganan de atrás para adelante y ese es el fuerte de Bera Bera»

Además, la base de los rivales ya la conocen.

Sí, se conoce cómo se juega. En los últimos años en Copa o en Supercopa se han enfrentado varias veces. De todas formas, todos los partidos son diferentes, se plantean de distinta forma. Nosotras tenemos que tener claro qué juego tenemos que jugar y ahí empezar el partido.

Elke Karsten durante un partido liguero frente al Grafometal La Rioja. (Gorka RUBIO/FOKU)

Vuelve a Málaga. Allí comenzó su andadura europea.

Estoy muy agradecida a Málaga porque fue el primer equipo que me vio y que me abrió las puertas. Me trajo acá, me hizo conocer lo que es vivir de la profesionalidad, lo que es vivir y jugar en esta liga. Se la jugaron conmigo, salió bien y por una cosa o por otra terminé en el Bera Bera a los años. Tengo muy buenos recuerdos, fue una experiencia muy buena y siempre voy a estar agradecida por esos cinco meses que pude jugar con ellas y también conseguir en su momento cosas importantes para el club, como entonces fue clasificar por primera vez a la fase final de la Copa. Eso siempre queda y siempre me lo voy a llevar conmigo.

¿Cómo valora la experiencia europea? Ha jugado en Hungría, Noruega, Estado francés...

Dentro de todo, muy positiva. Aprendí muchísimo, tanto a nivel deportivo, a nivel personal... Las diferentes ligas, distintos tipos de juego, te abre un montón y aprendes a la fuerza a ver cómo juegan los otros equipos y cómo de fuertes son. Es una experiencia positiva, de todos los lugares aprendí algo y me llevé algo.

La liga húngara es una de las más potentes. Estuvo dos años. ¿Cómo fue el salto?

Fue muy duro el cambio, no solo por la liga y la diferencia de nivel, sino por el idioma, la cultura... Se mezcla un poco todo. En su momento era y actualmente es una liga muy fuerte y sí que se nota la diferencia respecto a la División de Honor. Creo que nos falta un plus más pero es verdad que desde que me fui a ahora, todos los equipos van creciendo y a medida que van creciendo, la liga se hace un poco más complicada. Hoy cualquiera te puede ganar, hace algunos años eso era diferente.

La entrevisté hace cinco años. ¿Cómo ha crecido desde entonces? En aquella entrevista decía que le costaba volver a lanzar cuando había fallado una.

A veces me pasa [se ríe], porque me considero una persona que tiene que hacer todo perfecto. Creo que eso lo mejoré muchísimo. Maduré muchísimo y amplié un poco mi juego, que era más que nada basado en los lanzamientos. Hoy tengo bastantes más recursos que hace cinco-seis años.

«Maduré muchísimo y amplié un poco mi juego, que era más que nada basado en los lanzamientos»

En el equipo se han juntado tres argentinas [Cavo y Gavilán], en Beti Onak están dos [Maca Sans y Ayelén García], en la liga están bastantes también... Supongo que es una buena noticia para la selección argentina.

Sí, para nosotras es muy bueno que las jugadoras argentinas puedan venir a esta liga, que den ese salto de calidad que necesitamos. Estamos jugando todas en la misma liga y eso ayuda a que todas tengamos un mismo ritmo, una misma sintonía. Como selección es mega importante que las jugadoras más jóvenes puedan dar ese salto y puedan coger experiencia aquí y sumar minutos.

¿Le gusta el nuevo formato de liga?

Sí. Creo que es interesante, le da un poco más de emoción y puede hacer crecer más la liga. Es verdad que no se premia al más regular pero tiene sus cositas. Le da un poco más de emoción a lo que pueda pasar. Y yo pienso que, al final de todo, si fuiste regular durante toda la temporada, al mejor de tres es muy difícil que algún equipo te pueda ganar dos partidos. Jugar en casa dos de los tres partidos también es muy importante. Es un formato interesante.

Hasta ahora la Copa era la competición que quizás tenía más explosión de júbilo, pero ahora la liga también tiene ese ingrediente.

Claro. Puedes terminar en casa, jugar el último partido con tu gente... Va a estar bueno y va a ser interesante, no solo para jugadoras sino para el público. Eso llama más la atención que una liga regular que, en este caso, Bera Bera la ganó a falta de tres jornadas. Como jugadora te motivas más sabiendo que para ganar la liga aún falta.

En ese sentido, Bera Bera ha sido tan regular que esta primera fase se ha hecho como un poco larga... Todo lo emocionante llega en este mes y medio y la espera se ha hecho larga.

Una vez que estuvo la liga ganada, era turno para enfocarnos en nosotras. Fue importante ganar porque te da opción de definir en casa, la plaza europea y la confianza en el equipo. Tuvimos más tiempo para centrarnos en la Copa, preparar lo que realmente es importante ahora. Es verdad que quizás para las jugadoras que estuvieron desde el principio de temporada puede haber sido larga, a mí me agarró a mitad... [se ríe]. Que faltando tres jornadas, lo tengas todo definido y te juegues todo en un mes, te puede jugar en contra o a favor, eso depende de cada jugadora.