Trabajadores de Osakidetza se han concentrado este jueves ante centros de salud, convocados por Satse, ELA, LAB, SME, CCOO y UGT, para denunciar el desmantelamiento y la precarización de la Atención Primaria y exigir que se desbloquee la negociación colectiva para dar «solución a los múltiples problemas». Asimismo, han anunciado que las movilizaciones continuarán tras las huelgas de la próxima semana si «las cosas no cambian».

Los sindicatos con presencia en la Mesa Sectorial de Sanidad han convocado estas protestas en los centros de salud con el lema «Osakidetza salba dezagun. No al desmantelamiento de la sanidad pública», en las que han podido escuchar lemas como «Sagardui dimisión», «Estamos aquí en defensa del empleo» o «Sobran los discursos, más recursos».

Las concentraciones forman parte de las movilizaciones previas a las dos jornadas de huelga que hay convocadas en Osakidetza los próximos 18 y 19 de mayo y que han llamado a apoyar al conjunto de trabajadores de salud.

Desde Satse, ELA, LAB, SME, CCOO y UGT han alertado de los problemas que sufre la Atención Primaria y que son «evidentes tanto para la plantilla como para la propia ciudadanía», que recibe un servicio «cada vez más precario». Por ello, en la concentración del centro de salud Saéz de Buruaga de Bilbo, la secretaria general de Satse Euskadi, Amaia Mayor, ha animado también a la ciudadanía a respaldar las reivindicaciones de los trabajadores.

Los sindicatos han denunciado que hay «PAC cerrados, restricción de horarios, falta de cobertura de ausencias y jubilaciones, contratación precaria, altas tasas de temporalidad, sobrecarga sistemática de trabajo, PAC abiertos sin personal facultativo, etc…».

Según han lamentado, pese a que en este nivel asistencial ya se secundaron tres jornadas de huelga en 2019, desde entonces, «la situación no ha hecho sino empeorar» ante «la pasividad del Departamento de Salud».

Para los sindicatos, «la eventual falta de algunos perfiles profesionales se ha convertido en la excusa perfecta para aplicar medidas que, en otras circunstancias, serían muy difíciles de poner en marcha».

A su entender, teniendo en cuenta el número de personas inscritas en las OPE de Osakidetza, «es evidente que sí hay profesionales para contratar», pero que «las precarias condiciones de trabajo» que se les ofrecen «hace que desarrollen su labor profesional en la sanidad privada o el extranjero».

Satse, ELA, LAB, SME, CCOO y UGT se han mostrado convencidos de que «el inmovilismo y las imposiciones» del Departamento de Salud indican que «la movilización es el camino para conseguir revertir esta situación». Por ello, según ha indicado la representante de UGT Mari Feli Campos, «si las cosas no cambian», las movilizaciones continuarán tras las huelgas de la próxima semana.

Los sindicatos han denunciado, en este sentido, el bloqueo de la negociación colectiva para solucionar los problemas existentes. En palabras de la responsable de ELA en Osakidetza, Esther Saavedra, «no hay voluntad por parte del Departamento de Salud para que haya una verdadera negociación».

En la misma línea, la representante de LAB Jesica Gondra ha lamentado en «qué se ha convertido en los últimos años la mesa negociadora en una mesa informativa, en la que no hay lugar para la negociación».

Carrera profesional y temporalidad

Entre otros asuntos, las representantes sindicales han reclamado a Osakidetza que «se cierre el conflicto abierto para la equiparación» de los profesionales del Centro de Transfusión y Tejidos Humanos que, según ha recordado Amaia Mayor, «lleva 27 jornadas en huelga», y también que recupere «la normalidad en la carrera profesional», ya que la de 2022 está aún sin convocar.

También han aludido a la situación de los trabajadores que tendrán que hacer los exámenes de la próxima OPE sin saber todavía si tienen plaza en la OPE anterior, pese a que la consejera, Gotzone Sagardui, se comprometió a publicar las listas de todas las categorías al menos provisionales antes de los exámenes.

Los sindicatos han denunciado que los trabajadores de Osakidetza sufren temporalidad, precariedad y sobrecarga, unos problemas que se dan «desde hace muchísimo tiempo». Por ello, han reclamado «aumento de plantilla, sustituciones desde el primer día, y renovar un acuerdo regulador obsoleto».

En palabras de Esther Saavedra, la Oferta Pública de Empleo convocada en Osakidetza es «totalmente insuficiente» para estabilizar la plantilla, dado que «hay más de 24.000 trabajadores temporales y vamos a una OPE de apenas 9.000».