Luali Lebser
Rabouni

El Polisario conmemora la primera acción armada contra la presencia española en el Sahara

Miles de saharauis conmemoran este sábado la primera acción armada contra la presencia española en el Sahara Occidental, hace 50 años. En una posición politica y militar delicada, el Polisario reafirmó su decisión a continuar la lucha armada hasta el referéndum.

Bajo el lema «Medio siglo de constancia y empeño por imponer la existencia», miles de saharauis conmemoraron este sábado en los campamentos de refugiados de Argelia los 50 años de lucha armada del Frente Polisario, que comenzó en 1973 contra la colonización española y que hoy continúa contra Marruecos.

Brahim Ghali, fundador y actual líder del movimiento, ha presidido un gran desfile de tres horas en el que han marchado hombres y mujeres uniformadas y se ha expuesto el material bélico, vehículos y tanques, con los que el Polisario ha escenificado su intención de intensificar la vía militar, como aprobó en enero en su congreso trienal.

 

La efeméride de hoy recuerda la primera acción armada en el puesto de control de Janga contra la presencia colonial española (1884-1976) en el Sahara Occidental el 20 de mayo de 1973, que el propio Ghali lideró, y tuvo lugar apenas diez días después de la fundación del Frente Polisario.

Una acción que dio comienzo a una guerra que no terminaría con la retirada de España de su excolonia, ya que Marruecos y Mauritania ocuparon inmediatamente el territorio, aunque esta última se retiró.

Rabat y el Polisario iniciaron una guerra que terminó en 1991 con la mediación de la ONU y la propuesta de celebración de un referéndum de autodeterminación, que nunca ha sido convocado.

En su intervención, el líder del Polisario ha defendido aquel acto armado de hace 50 años como «una respuesta contundente a la intransigencia de la potencia colonial española, y su desestimación a las justas y pacíficas reivindicaciones del pueblo saharaui».

Situación similar, ha asegurado, a la actual por la que decidieron retomar las armas en noviembre de 2020 que «no viene de un vacío, sino como una respuesta a las intenciones de socavar los derechos legítimos del pueblo saharaui y el estatus jurídico del Sahara Occidental como territorio no autónomo pendiente de descolonización».

La conmemoración de este sábado del Polisario tiene lugar con las relaciones suspendidas con el Gobierno español tras el giro de Pedro Sánchez sobre el futuro del Sahara Occidental.

Delegaciones oficiales internacionales de países aliados del Polisario como Argelia, Sudáfrica y Venezuela, además de decenas de simpatizantes de toda Europa han presenciado el acto conmemorativo jaleado por miles de saharauis de los cinco campamentos de refugiados.

«Si las leyes internacionales fueran justas, no deberíamos celebrar este aniversario»

«Si las leyes internacionales fueran justas y funcionaran el Polisario no deberíamos celebrar este aniversario», dice Mahfud Salama, parlamentario del Polisario.

«O no por lo menos en este sitio y modo. Debería haber sido una conmemoración pacífica de algo que nunca tuviera que haber existido pero nos vimos obligados a hacer; la lucha armada contra la potencia colonizadora primero (España) y el ocupante miltiar después (Marruecos y Mauritania)».

La crítica situación a la que el Polisario se ha visto arrastrado empaña las declaraciones que se intentan conseguir de sus altos cargos. Todos confirman que la situación es una de las más delicadas que atraviesa el Frente desde que tomó las armas el 20 de mayo del año 1973.

Apenas diez días después de que se creara en una haima en pleno desierto con menos de una decena de jovenes idealistas el Frente Polisario ( acrónimo de Frente Popular para la Liberación de Saghia el Hamra y el Río Oro) disparó su primera bala contra la potencia colonizadora española.

En aquella noche, el actual presidente Brahim Galli liberó de un fuerte militar situado en Janquet Queshat (a pocos kilómetros de la frontera sur de Marruecos) a Luali Mustafa Sayed, posteriormente primer presidente de la RASD y muerto en 1977 cuando atacaba Nouakchot en Mauritania.

Situación diplomática y militar crítica

Después de la decisión personal del anterior presidente estadounidense Donal Trump de admitir en un tweet la soberanía marroquí en el Sahara Occidental, el Polisario atraviesa una situación crítica.

Diplomáticamente ha visto cómo Marruecos conseguía avanzar pasos gigantes y ya ni siquera se presta a las peticiones de la ONU de buscar una salida al conflicto negociada y con referéndum. Las últimas declaraciones del ministro de Interior marroquí, Abdeluafi Laftitm ni siquiera contemplaban ya la posiblidad de esa votación ni aún teniendo la posibilidad de la anterior propuesta del reino alauita de autonomía.

El Gobierno español, en una misiva del presidente, Pedro Sánchez, filtrada por Rabat, también salió de la senda marcada por las Naciones Unidas y respaldaba las tésis marroquíes en su antigua colonia. En la última visita a Estados Unidos de Sánchez, Joe Biden no quiso aclarar la postura del Ejecutivo post-Trump.

Militarmente la superioridad aérea de Marruecos ha desechado las estrategias de guerra de guerrillas que el Polisario practica. El reinicio de la contienda se vio empañado con la muerte de varios soldados y la pérdida de un hombre fuerte y muy querido en la RASD, Dah el Bendir.

La ayuda que Israel otorga con drones WanderB y ThunderB y la tecnología aérea turca que ya utilizó Azerbayán en su guerra relámpago en Artsaj han hecho que el Polisario repliegue a sus soldados a la espera de un arma que neutralice dichos drones.

«Nos avisaron que nos llamarían para volver al frente. Los drones son peligrosos. Antes no nos veían y les atacábamos como una serpiente. Pero si nos ven ya no podemos dar la sorpresa. Han muerto amigos míos y a mi coche, que estaba escondido cerca de una cueva con ramas cuando vigilaba las posiciones en Agüenit le dispararon y lo reventaron. Mi amigo sufrió heridas leves», afirma Salama Mohamed en su haima de Guelta, en el campo de refugiados de Aaiun.

Este joven saharaui que vive con su esposa y dos hijos volvió de España nada más se confirmó el reinicio de la guerra. «Dejé mi trabajo en Sevilla. Tenía experiencia y sabía cómo hacer la guerra. Hice el servicio militar hace 10 años precisamente en Agüenit. Entonces no había estos drones que ahora nos vigilan desde el cielo», afirma triste.

Diplomacia como mejor arma actualmente

Sidi Mohamed es una de las referencias del Polisario cuando se quiere hablar de diplomacia europea. Estos días ha estado agradeciendo en la televisión de la RASD (con sede en Rabouni) las diferentes muestras de apoyo que está recibiendo el Frente Polisario en su aniversario.

El FMNL salvadoreño, el vicepresidente venezolano, el presidente mexicano, diplomáticos cubanos y partidos políticos europeos sin poder en los gobiernos de sus países han mandado videos de apoyo al pueblo saharaui. Sidi Mohamed responde a todos en su propio idioma –habla cinco idiomas aparte del hassania–.

Al finalizar los  discursos de agradecimiento, aclara que el Polisario quiere estrechar lazos con América Latina y afirma que es «ahí donde el Polisario encuentra a sus afines para luchar contra los gobiernos injustos».

Con las relaciones con España rotas, el Polisario busca apoyos internacionales al otro lado del océano. «La invasión rusa a Ucrania ha hecho que el tema diplomático esté también dificil, ya que nuestro mayor apoyo es Argelia, y este es un socio importante para Rusia», afirma Sidi Mouloud, parlamentario del Polisario desde Rabouni.