La penúltima jornada de la Liga Asobal ya está aquí. Hace semanas que se sabe el campeón liguero, el todopoderoso Barcelona, pero aún hay cosas muy importantes en juego, como quién irá también a Europa la próxima temporada y quién acabará descendiendo junto con el Cisne.

En la lucha por Europa se encuentra el Bidasoa Irun. Los de Jacobo Cuétara agotan en casa del Huesca (18.30) la que puede ser su última baza en la lucha por la competición continental un año más, aunque depende de que Cuenca o Granollers no ganen sus encuentros.

Tres puntos sacan ambos conjuntos a falta de dos jornadas al Bidasoa, que tiene perdido el golaverage en caso de empate con Granollers pero no con Cuenca, por lo que la principal opción amarilla pasa por ganar sus partidos y que los castellanomanchegos solo saquen un punto en las dos últimas jornadas. La otra posibilidad serían dos tropiezos seguidos de los catalanes.

Por lo tanto, Bidasoa Irun está obligado a hacer su trabajo en Huesca y prolongar la racha de victorias que le acompaña los dos últimos meses. «Nosotros preparamos y afrontamos todos los partidos para ganarlos, primero para asegurar el cuarto puesto actual y después para mirar más arriba», ha señalado en Artaleku el técnico bidasotarra, que ya ha advertido que derrotar a los oscenses no va a ser tarea sencilla, a pesar de la diferencia de puntos y puestos en la clasificación.

El equipo se aferrará al excelente momento de forma de su central Jon Azkue. Ha sido designado como el mejor central del campeonato en las tres últimas jornadas y que mantiene un estado de forma sobresaliente antes de cerrar su etapa en el balonmano estal y probar fortuna en el Estado francés.

Abril y mayo han sido excelentes para un Bidasoa que ha sumado en ese tiempo siete victorias en Liga, con un empate en la complicada cancha de Granollers y la inesperada derrota ante el Sinfin, borrón que posiblemente a final de Liga sea todo un lastre si los irundarras se quedan fuera de Europa, a expensas de posibles invitaciones que pueda cursar la EHF.

Ser cuarto en una Liga al alza como la Asobal, que ha metido a Granollers y Barcelona en sendas finales a 4 de las dos mejores competiciones europeas, podría tener premio y en esa lucha apremia por atrás un emergente Logroño que transita a solo dos puntos, por lo que los guipuzcoanos quieren mantenerle a raya con un triunfo visitante este sábado ante un rival oscense que no tiene matemáticamente conseguida la permanencia.

La pasada semana Bidasoa tuvo importantes bajas en su brillante triunfo contra Cuenca, por lo que mantiene las dudas de Eneko Furundarena y Rodrigo Salinas, los dos ausentes en ese encuentro, que son referencia defensiva y ofensiva del equipo de Irun respectivamente. Cuétara confía en poder recuperar al menos a alguno de ellos.

Anaitasuna: ¿Despedida de jugadores con la salvación?

Helvetia Anaitasuna tiene otro objetivo totalmente distinto: la salvación. Los iruindarras reciben este sábado al Logroño La Rioja (18.30) con la necesidad de lograr una victoria que les haga alcanzar la permanencia en Asobal, dependiendo de lo que hagan sus más inmediatos perseguidores en la zona baja de clasificación.

Las buenas actuaciones y las cómodas posiciones ocupadas al inicio de la campaña hicieron pensar a los de Quique Domínguez con una buena posición. Sin embargo, y después del parón, Anaitasuna ha registrado un bajón de resultados y de juego que ha hecho inevitable llegar a esta situación.

Con 20 puntos, Anaitasuna es decimotercero, aventajando en uno a Frigoríficos Morrazo y en dos a Guadalajara. En caso de ganar, a los navarros les valdría un empate de Guadalajara ante un ya descendido Cisne. Una derrota de Morrazo en Cuenca también sirve.

Además, será el último partido de los capitanes Carlos Chocarro e Ibai Meoki delante de su afición tras anunciar su retirada. Chocarro dejará la entidad en la que entró con 16 años y en la que ha participado durante 19 temporadas. El pabellón le rendirá su homenaje una vez finalice la cita y todos esperan que sea con un triunfo.

El entrenador ha afirmado que ve a su equipo «con la actitud correcta». «Muchas ganas y con responsabilidad, sabiendo que es un partido en el que nos estamos jugando mucho. Mañana tenemos otra oportunidad muy buena y estamos concienciados», ha añadido.

Los verdiblancos llegan con tres derrotas consecutivas y con tan solo una victoria en las siete últimas fechas de campeonato. Las sensaciones ante el Barcelona el pasado miércoles no fueron malas, pero la apisonadora blaugrana no dio opción y se acabó llevando el choque de manera cómoda por 26-40.

«Es momento de plasmar sobre el parqué las muchas cosas buenas que tenemos. Nos es momento de inventar nada, pero sí de tener valentía y agarrarnos mucho a nuestras fortalezas», ha señalado Quique Domínguez.

Anaitasuna ha padecido durante todo el año constantes pérdidas de concentración y errores en ambas áreas que les han perjudicado. A pesar de haber conseguido buenas rentas durante los partidos, los rivales, sabedores del nerviosismo de los jugadores de Domínguez, han apretado hasta poder igualar e incluso llevarse los dos puntos en los últimos instantes. Ahora el turno es de los jugadores de Anaitasuna de demostrar su valía.