ESPAÑA 58 - BÉLGICA 64
La selección española femenina de baloncesto había ganado cuatro de sus cinco finales del Eurobasket disputados, en 1993, 2013, 2017 y 2019; siempre contra Francia. Su única medalla de plata llegaba en 2007, justo cuando su rival no fue el seleccionado «bleu», ya que aquel Eurobasket lo ganó el seleccionado de Rusia de la gran Maria Stepanova. Y después de este domingo, tampoco ha podido con Bélgica, que se ha ungido de oro por primera vez en su historia.
Bélgica, como aquella Rusia de 2007, tiene en su pívot titular, Emma Meeseman, su gran referente. Junto con los 18 puntos ¡15! rebotes de la otra pívot Linskens –elegida mejor jugadora de la finalísima–, la MVP y mejor jugadora de Europa Emma Meeseman ha liderado la remontada belga con sus 24 tangtos y 8 rebotes hasta su primer oro continental, pasando de caer por 48-38 y haber perdido 20 balones –y de que las suplentes no hayan sido capaces de meter ni un solo punto–, hasta darle la vuelta al partido en los 11 minutos finales de la finalísima.
En la delegación hispana, la entrenadora de Kutxabank Araski Madelen Urieta se ha tenido que conformar con la medalla de plata, la segunda en el historial de medallas hispanas en los Eurobasket femeninos, pese a los 14 puntos de Queralt Casas, los 12 tantos y 7 rechaces de Raquel Carrera y una paula Ginzo inesperadamente bien, autora de 10 tantos. Las de Miguel Méndez han. echado de menos los puntos de alba Torrens, que se ha q uedado con 8 con una carta de tiro de 3 de 10, amén del 5 de 21 en triples, o el hecho de que María Conde no haya podido jugar por culpa de una lesión en el hombro. La medalla de bronce ha sido para la selección francesa, que ha derrotado por 68-82 a Hungría en la final de consolación, en el último partido de Sandrine Gruda con su selección en un torneo cxontinental –dificilmente se perderá los Juegos Olímpicos de París de 2024– el día de su trigésimo sexto cumpleaños.
Meeseman, demasiado sola de inicio
Los seis primeros puntos de Bélgica en esta finalísima han venido de la mano de Meeseman, al tiempo que la defensa belga ha provocado varias imprecisiones en el ataque hispano, aunque con Alba Torrens asumiendo mucho balón, las de Miguel Méndez han aguantado el tirón.
Sin embargo, las primeras ventajas han sido españolas. si bien la defensa belga ha obligado a malos tiros a las hispanas, el talento de Queralt Casas y Raquel Carrera ha servido para deshacer varios entuertos, al tiempo que todas las jugadoras belgas no llamadas Meeseman han parecido sentir esa tensión de más. Así, cuando Raquel Carrera ha rescatado un pase difícil de Laura Gil para anotar el 12-6, el técnico Rachid Meziane ha tenido que parar el partido y llamar al orden a las suyas.
Jullie Allemand ha sido la primera anotadora belga más allá de su estrella, con una bandeja que ha establecido el 12-8. Más allá de los puntos, un «dos más uno» de Linskens ha sacado la segunda falta a Raquel Carrera. Con todo, el sexto punto de la ex de Araski ha permitido a las de Miguel Méndez terminar el primer asalto con un marcador de 17-13 a su favor.
Queralt Casas nunca ha sido una buena, ni siquiera aceptable, tiradora, pero a la «vejez» –con 31 años– viruelas, ya que ella ha sido la autora de los dos primeros triples españoles –sigue sin ser una buena tiradora, pero sí es una gran competidora–, que momentáneamente han puesto el 24-15 en el marcador, respondido con un bombazo de Vanloo, el primer triple belga, que además le ha sacado la segunda falta a la ex de Gernika Bizkaia Paula Ginzo.
También ha cometido su segunda personal Linskens en unos minutos en los que el los dos combinados han alternado errores, en forma de pérdidas por precipitación las centroeuropeas, en forma de bandejas falladas las de Miguel Méndez, con sus tres bases incapaces de poner el balón en el cesto. En todo caso, el reparto de tropiezos ha mantenido a las hispanas con un colchón entre los cuatro y los seis puntos de ventaja. Con todo, un triple de Maite Cazorla –que después ha visto otro enceste lejano anulado al haberse agotado la posesión de 24 segundos– ha dejado la finalísima en 32-25 para las españolas en tiempo de descanso. Las de Miguel Méndez y Made Urieta no han hecho un juego que haya enamorado en este Eurobasket, pero sí se han erigido en la mejor defensa, como han demostrado en estos 20 primeros minutos.
Problemas y soluciones
Habitualmente en este torneo, los terceros cuartos han sido, sin duda, los peores de la selección española. Bélgica tenía que hacer valer esa debilidad de su rival, amén de corregir su sangría de ¡13! balones perdidos de la primera mitad –la mitad de ellos, robos de su rival–. La primera canasta, con todlla ha metido Laura Gil, aunque Julie Vanloo ha sabido dar la réplica con el segundo triple belga del partido, seguido de dos tiros libres errados por Queralt Casas.
Sin embargo, las de Rachid Meziane no han terminado de arreglar su problemas de pérdidas de balón y aunque poco a poco han ido limando la diferencia, tampoco han tenido la suerte de cara, como se ha visto en los dificultosos triples que han anotado Casa y Leonor Rodríguez, en el primer balón que ha tocado en la final.
De hecho, la entrada de Cristina Ouviña y Leonor Rodríguez le ha venido muy bien al ataque español porque después de varios minutos de espesura, la maña y la grancanaria han provisto de unas gotas de talento para poder volver a abrir brecha, 42-34, en vista de que la defensa belga ha sabido atar en corto a Alba Torrens con Antonia Delaere defendiendo a la de Binissalem cara a cara.
La omnipresente Leonor Rodríguez le ha sacado la tercera falta a Meeseman y ha abierto la renta hispana por primera vez a los diez puntos: 48-38, aunque un parcial de 0-5 de la mano de Julie Allemand ha devuelto a las belgas al partido de cara al cuarto período: 48-43, y balón para las de Rachid Meziane en la primera posesión del último asalto.
Del juego a los resultados
Pero la primera canasta de este período la ha metido Paula Ginzo, 50-43, luego de varios errores de Linskens y un taponazo de Raquel Carrera a Emma Meeseman. De hecho, Linskens y Ginzo han anotado las dos primeras canastas de los dos combinados en estos minutos –de hecho, a la de Santoña se le ha escapado una bandeja facilísima a la contra–, aunque quien ha arrimado el marcador hasta el 52-50 ha sido Emma Meeseman, luego de un precioso juego de pases mostrado por su seleccionado,
La final ha entrado, al fin, en sus cinco minutos finales con 54-52 tras una nueva canasta de Paula Ginzo y dos tiros libres de una Linskens por encima de los 10 puntos y los 10 rebotes. Y en estas, Bélgica ha cobrado su primera ventaja, 54-55, luego de un triple de Meeseman, seguido de un tapón sobre Casas. Con la pólvora del tiro exterior mojado y con Paula Ginzo en el banquillo, Miguel Méndez se ha visto obligado a pedir tiempo muerto al ver a sus jugadoras, por mucha experiencia acumulada que tengan en estas lides, paralizadas ante la reacción de su rival, capaz de sobreponerse. aun 48-38 adverso con un parcial de 6-17.
Un tiro a tabla de alba Torrens ha devuelto la ventaja fugazmente a las hispanas, replicado con dos tiros libres de Meeseman, de los cuales ha metido solo uno. Con todo, un robo de las belgas a Carrera y una canasta de Linskens ha supuesto el 56-58, con la final en sus dos últimos minutos. Para muestra del cambio absoluto en la final, las belgas han empezado a acaparar todo los rebotes en ataque, y otros dos tiros tiros libres de Meeseman han establecido el 56-60.
La final se ha ido a Bélgica, a pesar de que un tapón de Carrera a allemand y una pérdida fruto de los nervios de las de Rachid Meziane han dado una última oportunidad a las hispanas, con solo 28,6 segundos en el reloj, eso sí. Pero el aro pasado de Queralt Casa no ha entrado y Raquel Carrera se ha visto obligada a parar en falta a Meeseman, que no ha vuelto a fallar. Se conoce que las hispanas solo saben ganar las finales continentales ante Francia, mientras que Bélgica, que también ha demostrado saber sufrir, ha vestido de oro a su mejor generación, después de varios años conformándose con bronces o con un gran juego sin resultados a la hora de la verdad.