El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, ha decretado el estado de excepción durante 60 días tras el atentado esta pasada noche contra el candidato presidencial Fernando Villavicencio, víctima de disparos de presuntos sicarios a la salida de un mitin electoral en Quito. Un cartel se ha atribuido el ataque.

Su cuerpo ha sido trasladado desde la morgue donde se le ha realizado la autopsia a un tanatorio donde será velado. Los restos mortales han salido en un vehículo fúnebre cerca de mediodía, después de que los familiares de la víctima hayan insistido en que les fuera entregado el cuerpo del candidato para proceder con el velatorio ante la consternación del país.

Villavicencio, de 59 años, era periodista y tenía una trayectoria de denuncia de la corrupción y carga de polémicas. Se le consideraba enemigo del expresidente Rafael Correa (2007-17) y amigo de Estados Unidos.

Fue en su juventud sindicalista y asesoró a la federación de trabajadores de la empresa estatal petrolera, de la que salió despedido.

Villavicencio se presentó a las elecciones presidenciales programadas para este 20 de agosto, con el afán principal de evitar que el correísmo vuelva al poder.

Antes de lanzarse a la Presidencia, dirigió la Comisión de Fiscalización de la Asamblea Nacional (Parlamento) entre mayo de 2021 y mayo de 2023, hasta que el actual presidente del país, el conservador Guillermo Lasso, invocó el recurso constitucional de «muerte cruzada» para disolver el Parlamento y llamar a elecciones extraordinarias.

Villavicencio, que en muchos casos criticó a Lasso, también lo defendió y algunos de sus rivales lo consideraban como el candidato encubierto del oficialismo, algo de lo que él renegó.

La autoría todavía no es segura, aunque hay seis detenidos. Ha alcanzado gran viralidad el vídeo reivindicativo de un grupo de hombres fuertemente armados que dicen ser parte de la organización ‘Los lobos’ y que vinculan la acción a la lucha de Villavicencio contra bandas de este tipo.

En un mensaje a la nación tras una larga reunión del comité de seguridad del Estado, Lasso ratificó que las elecciones generales extraordinarias se celebrarán el próximo 20 de agosto, como estaba previsto, pero con un despliegue de militares en todo el territorio como parte del estado de excepción. De momento, varios partidos han suspendido su campaña.

«Ante la pérdida de un demócrata y de un luchador, las elecciones no se suspenden. Estas se tienen que realizar, y la democracia se tiene que fortalecer. Esta es la mejor razón para ir a votar y defender la democracia, la vida y la integridad de la familia ecuatoriana y el futuro del país», ha remarcado el mandatario conservador.

Anteriormente, Lasso ya había decretado un estado de excepción desde finales de julio, también por 60 días, en las provincias de Manabí y de Los Ríos, así como en el municipio de Durán, del área metropolitana de Guayaquil, producto de la crisis de seguridad que atraviesa Ecuador por el auge de la delincuencia y la violencia del crimen organizado.

Tres días de luto

El presidente, que ha anunciado también tres días de luto por la pérdida de Villavicencio, ha subrayado que este atentado «es un crimen político que adquiere un carácter terrorista. No dudamos que es un intento de sabotear el proceso electoral. No es coincidencia que se produzca a pocos días de la primera vuelta presidencial».

«A quienes buscan amedrentar al Estado, no vamos a retroceder, el Estado está firme y la democracia no claudica ante la brutalidad de este asesinato. No le vamos a entregar al poder y las instituciones democráticas al crimen organizado, aunque esté disfrazado de organizaciones políticas», ha añadido.

El atentado se produjo alrededor de las 18.15 hora local (01.15, hora de Euskal Herria) «y provocó el enfrentamiento entre los policías que resguardaban a Fernando Villavicencio y los asesinos», entre los que uno falleció. «Las investigaciones continúan y aplicaremos todo el rigor de la ley para que los responsables materiales e intelectuales paguen con la máxima pena», ha agregado Lasso.

Seis detenidos «extranjeros»

El ministro ecuatoriano del Interior, Juan Zapata, ha informado este jueves de que los seis detenidos tras la muerte del candidato presidencial Fernando Villavicencio, son extranjeros, pero no ha revelado su nacionalidad.

En declaraciones a la prensa en la Comandancia de la Policía, en Quito, Zapata ha identificado a los aprehendidos como Andrés M. José L., Adey G., Camilo R., Jules C. y John R., «todos de nacionalidad extranjera». Fuentes policiales citadas por Efe han señalado que todos son colombianos.

Además, la Policía también ha confirmado que el sospechoso que ha resultado herido por el cruce de las balas con el personal de seguridad, y que luego ha fallecido en una ambulancia, también es de nacionalidad colombiana.

Zapata ha anotado que tras los hechos, «todos nos ejes policiales se desplegaron para realizar técnicas investigativas, permitiendo ubicar varios domicilios en el sector de Conocoto y en el sur de la ciudad».

En los allanamientos encontraron un fusil, una subametralladora, cuatro pistolas, tres granadas, dos cargadores de fusil, cuatro cajas de munición, dos motocicletas y un vehículo reportado como robado, «donde presuntamente se movilizaban los miembros de ese grupo delictivo», dijo.

Los detenidos fueron trasladados hasta la unidad de Flagrancia con resguardo policial, para ser puestos a órdenes de las autoridades competentes.

Zapata se ha sumado al pronunciamiento del jefe de Estado, el presidente Guillermo Lasso, quien ha catalogado el asesinato «como un crimen político con carácter terrorista, un intento de sabotaje a las próximas elecciones».

«La Policía Nacional del Ecuador ya tiene las primeras capturas de los presuntos autores materiales de este execrable hecho y empleará toda su capacidad operativa e investigativa a fin de poder esclarecer el móvil de este crimen y los actores intelectuales», ha anotado.

Ha indicado que «por la información preliminar levantada se confirma que los aprehendidos pertenecen a grupos de delincuencia organizada».

Ha comentado que audios y vídeos que circulan en redes sociales sólo generan «mayor terror, mayor incertidumbre y sobre todo» no respetan «el dolor de la familia y de un pueblo que hoy llora a Fernando Villavicencio».

‘Los lobos’ lo niegan

Se refería a un vídeo, de origen desconocido, en el que aparecen hombres fuertemente armados, uno de los cuales asegura pertenecer al grupo criminal ‘Los Lobos’, al que atribuyen la muerte, aunque ellos lo han negado.

«Dejamos en claro que nosotros jamás hemos asesinado personas del Gobierno o civiles y aclaramos que el vídeo que circula en redes sociales, en el cual sale un grupo de personas con sus caras tapadas, con rifles de asalto, haciéndose pasar como miembros de nuestra organización, es totalmente falso», han apuntado.