Iñaki  Iriondo
Cronista político

El PP saborea la aparición de voces en el PNV que piden dejarles gobernar

«El PP no se mete nunca en debates internos de otras formaciones» fue lo que contestó Borja Sémper al preguntarle por la aparición en el PNV de voces que piden que se permita gobernar a Feijóo. Es una de esas «respuestas tipo» que los políticos dan cuando esos «debates internos» pueden favorecerles.

El vicesecretario de Cultura y Sociedad Abierta del PP, Borja Sémper, en su comparecencia de ayer.
El vicesecretario de Cultura y Sociedad Abierta del PP, Borja Sémper, en su comparecencia de ayer. (Diego RADAMÉS | EUROPA PRESS)

Todavía queda un mes para que se produzca en el Congreso el pleno de investidura de Alberto Núñez Feijóo y, aun siendo conscientes de la dificultad de conseguir más síes que noes, el PP está viendo que por lo menos en algunas fuerzas como el PNV surgen debates internos sobre qué debe hacer el partido, al tiempo que desde opinadores de la derecha unionista también presionan a los jeltzales para que se alejen de Pedro Sánchez.

El que fuera diputado general de Bizkaia entre 1987 y 1995, Alberto Pradera, declaró abiertamente en una entrevista en ‘El Correo’ que «el PNV debe abstenerse en la investidura de Feijóo porque Vox ya no está en la ecuación». Mientras tanto, el alcalde de Bilbo, Juan Maria Aburto, preguntado reiteradamente en Radio Euskadi sobre si habría alguna opción de que el PNV haga presidente a Feijóo, eludió claramente decir no. Se cobijó en frases como «el PNV decidirá aquello que sea mejor para la defensa de los intereses de la ciudadanía vasca» y remachó así: «Es importante que haya gobiernos lo más estables posibles, en Bilbao, en Euskadi y también en España».

El vicesecretario de Cultura del PP, Borja Sémper, quien actúa como portavoz de la dirección del partido, compareció ayer para anunciar que abren una ronda de reuniones con todos los grupos, excepto EH Bildu, y también con todos los presidentes autonómicos, cabe suponer que entre ellos María Chivite e Iñigo Urkullu.

Preguntado por los periodistas sobre la aparición dentro del PNV de voces que critican la decisión inicial de Sabin Etxea de rechazar la investidura de Alberto Núñez Feijóo, Borja Sémper contestó que «el PP no se mete nunca en debates internos de otras formaciones». Se trata de una de esas «respuestas tipo» que los políticos dan mientras saborean que esos «debates internos» en otros partidos se dan en el sentido que podría favorecerles.

Sémper admitió la dificultad que entraña para el PP reunir los cuatro votos que le faltan a Feijóo para poder ser presidente, pero dejó claro que no están dispuestos a tirar la toalla aún, sino que en el mes que resta para el debate se afanarán por trasladar a todos los grupos políticos su propuesta para España y su modelo contrapuesto al de Sánchez.

El PSOE exige disculpas

El portavoz del PP anunció que ayer mismo su presidente, Alberto Núñez Feijóo, iba a llamar al presidente del Gobierno y líder del PSOE, Pedro Sánchez, para mantener una reunión y hablar del debate de investidura del próximo 26 de septiembre.

Desde el Gobierno en funciones y el PSOE dejaron abierta la puerta a que Pedro Sánchez se reúna con Alberto Núñez Feijóo, pero pusieron como condición que primero pidan «disculpas» a los socialistas por los «insultos» y lo que consideran «constantes» faltas de respeto versadas durante la última legislatura y la campaña electoral.

Hubo quien mostró curiosidad por saber cómo iba a hacer Alberto Núñez Feijóo para convencer al PSOE de que le apoye para «derogar el sanchismo», que fue lo que estuvieron repitiendo durante la campaña electoral.

Parece claro que en el caso de que se produzca la reunión, será Pedro Sánchez quien acuda a la cita con el presidente del PP. Pero la portavoz del PSOE, Pilar Alegría, aclaró que su partido «merece respeto, nuestros votantes merecen respeto y, por tanto, primero disculpas porque hemos vivido una legislatura donde se ha estado deslegitimando y se ha insultado al partido socialista día sí y día también».

Lío por reunirse con Junts

Además, la decisión del PP de reunirse también con Junts está provocando la aparición de voces discrepantes dentro del partido de la derecha unionista y obligando a sus portavoces a hacer malabarismos dialécticos para explicarlo.

Borja Sémper intentó explicar ayer otra vez que hablar y escuchar a Junts no quiere decir «ceder» ni «venderse» al partido independentista catalán, como tampoco «es lo mismo que irse a Waterloo o estar dispuesto a impulsar una ley de amnistía», como aseguró que sí que está dispuesto a hacer el PSOE.

En cualquier caso, aseguró que en su encuentro con el partido de Puigdemont no aceptarán nada que no esté dentro de la Constitución, y defendió poder contradecir cara a cara las demandas de los partidos independentistas, por lo que no parece que la reunión entre el PP y Junts vaya a servir para acumular fuerzas de cara a la investidura de Alberto Núñez Feijóo.

Lo que Borja Sémper dejó claro, una vez más, es que el PP no se va a reunir con EH Bildu, único grupo al que excluye de su ronda de contactos. Aseguró que «no es equiparable a ninguna otra formación política representada en el Congreso», dado que «cree que asesinar en España para defender una idea política tuvo una justificación política».

Eso sitúa a la formación independentista vasca, según Borja Sémper, en «otra galaxia completamente lejana y diferente al resto de formaciones». «No hay nadie, por muy descabelladas que puedan ser sus posiciones políticas, que se pueda equiparar a Bildu».