Sortu ha celebrado este sábado su VI Conferencia Nacional en el frontón Uarkape de Arrasate, «una cita para reflexionar sobre los retos políticos de los próximos meses». El secretario general de Sortu, Arkaitz Rodríguez, en la intervención de cierre de la conferencia, ha destacado «la importancia del momento político» en el Estado español tras las elecciones del 23 de julio.
«Respondiendo al mandato de popular mayoritario, tenemos el reto y la responsabilidad de hacer posible un gobierno y una legislatura progresista», ha apuntado. Por otro lado, se ha referido al acuerdo de país: «Las fuerzas políticas, sociales y sindicales vascas tenemos el reto y la responsabilidad de tejer un gran acuerdo de país, porque esta situación exige más que nunca actuar ante como pueblo y con una sola voz Madrid».
Balance «fructífero» del curso pasado
El pasado curso ha sido «fructífero», según Rodríguez. Por un lado, ha recordado que se ha conseguido «terminar con la política de alejamiento y dispersión que durante tres largas décadas ha vulnerado los derechos de las y los presos políticos vascos y sus familiares y amistades». En segundo lugar, «frenar al bloque reaccionario del Estado español y, si todo va bien, lograr mantener abierta la ventana de oportunidad». Y en tercer lugar, se ha referido a las elecciones: «En el ciclo electoral que acaba de desarrollarse, las y los soberanistas de izquierdas hemos obtenido los mejores resultados de nuestra historia tanto en Hego Euskal Herria como en Ipar Euskal Herria, y, de ese modo, tenemos en la punta de los dedos la posibilidad de convertirnos en la principal fuerza de este país».
A partir de este balance, Rodríguez ha destacado cuatro grandes retos para los próximos meses. El primero, la transformación radical del modelo socio-económico: «Necesitamos una nueva civilización que ponga en el centro la vida y los cuidados porque, sencillamente, el sistema económico y social actualmente vigente, el capitalismo patriarcal, está poniendo en cuestión la continuidad de la propia vida». Ha llamado a «levantar la bandera de la utopía».
Asimismo, ha reclamado «avanzar en el camino de la soberanía». Y para ello, además de «los retos de las mayorías progresistas y de la necesidad de acuerdos amplios en Euskal Herria», también se ha referido al Gobierno español: «Este hipotético nuevo gobierno progresista, tiene ante sí un reto, la responsabilidad y la oportunidad histórica para dar una solución democrática al conflicto español. Y, sí, digo bien, español. Porque el problema no es Euskal Herria; el problema no es Catalunya: el problema es un Estado incapaz de reconocer y gestionar democráticamente su diversidad nacional».
En tercer lugar, Rodríguez ha señalado el reto de reforzar aún más a EH Bildu y EH Bai y, por último, la necesidad de un nuevo impulso nacional, subrayando que «las y los militantes de Sortu fortaleceremos y fomentaremos el movimiento obrero, feminista, juvenil, ecologista, euskalgintza, el movimiento estudiantil y educativo o la lucha de pensionistas tanto como EH Bildu y EH Bai».
En esta dirección, ha recordado tres citas principales para los próximos meses: la manifestación nacional convocada por Euskalgintzaren Kontseiluak el 4 de noviembre en Bilbo; la huelga feminista general convocada por el movimiento feminista para el 30 de noviembre; y la manifestación nacional convocada por EH Bildu para el próximo 18 de noviembre en Bilbo.