Representantes del movimiento feminista de Euskal Herria han celebrado este sábado en Gasteiz un encuentro con trabajadoras de cuidados de diferentes sectores en el marco de las actividades previas a la huelga convocada para el 30 de noviembre por el derecho colectivo al cuidado.
Al concluir el acto han leído un comunicado en el que han denunciado que la falta de condiciones dignas en el trabajo del personal de cuidados «no solo es una vulneración de sus derechos, sino que afecta directamente a las familias y a las personas que necesitan cuidados».
«Queremos que las empresas dejen de lucrarse con nuestro trabajo, queremos tener un convenio justo en el que no solo se revise el salario sino también otras condiciones que nos afectan y afectan a las personas con las que trabajamos», han añadido.
Han reconocido que debido a sus condiciones laborales «precarias y de explotación laboral» muchas trabajadoras en el sector de cuidados, tanto trabajadoras de residencias, como del Servicio de Atención a Domicilio, como de la limpieza y sobre todo del hogar y de cuidados «no van a poder ejercer el derecho fundamental de huelga».
«A estas compañeras queremos decirles que desde el movimiento feminista entendemos su situación y eso nos da más fuerzas para sumarnos a la huelga y hacer nuestras sus reivindicaciones», han concluido con un llamamiento a secundar la huelga que pretenden sea el «principio de una transformación de los cuidados».