Mariona Borrull
CRíTICA SECCIóN OFICIAL

Quemar la casa del #MeToo

‘THE ROYAL HOTEL’
Australia, 2023. 90 minutos. Dirección: Kitty Green. Guion: Oscar Redding. Intérpretes: Julia Garner, Jessica Henwick, Toby Wallace, Hugo Weaving, Ursula Yovich, Daniel Henshall.

Fotograma de ‘The Royal Hotel’.
Fotograma de ‘The Royal Hotel’. (ZINEMALDIA)

Si en ‘The Assistant’ Kitty Green apuntaba con precisión al erizarse del vello de nuestra nuca ante la amenaza, escondiéndolo al mismo tiempo tras las formas cerebrales y frías de una pieza de cámara, hoy la realizadora se responde con una película igual de tensa pero con salida a un cine más físico, que hace posible hablar de la violencia ejercida contra las mujeres sin tapujos. Para ello, viaja al extremo más recóndito del Outback australiano de la mano del coguionista Oscar Redding y convierte a Hanna (Julia Garner) y Liv (Jessica Heinwick) en final girls de una versión alcohólica y polvorienta del subgénero de cabañas en el bosque (resulta irónico que el barucho donde entran a servir se llame ‘The Royal Hotel’, claro).

Green baila con la amenaza y convierte los árboles en asesinos potenciales, descubriendo medio sorprendida que todos los clientes del antro tarde o temprano acabarán ejerciendo su violencia sobre las chicas. Por ello, todas y cada una de las escenas del film se viven como una suerte de ‘Buscando a Wally’ en que encontrar al hombrecillo con sombrero de rayas –en este caso, al agresor de turno– garantiza solo saber en qué dirección tendremos que huir. ‘The Royal Hotel’ se mueve como un torneo de ajedrez, físico y apremiante como el trabajo de cámara que Michael Latham, director de fotografía, ejecuta sobre el cuerpo resistente de Julia Garner. Quizás incendiar la casa y salir corriendo sea lo único que el cine puede hacer, tras todo lo que el #MeToo no ha cambiado.