El pasado 23 de agosto se produjo una situación angustiosa en Gorliz. A media mañana, una madre acude con su hijo de 3 años al centro de salud de Gorliz. El niño se encuentra mareado, pálido y sudoroso. No hay pediatra y le atiende una enfermera. Le diagnostica hipoglucemia, le suministra azúcar y lo envía a casa. Pero de camino empeora y empieza a vomitar.
Madre y niño vuelven al ambulatorio y la propia enfermera, en su coche, le lleva a Plentzia, donde está la pediatra. Dada la gravedad de la hipoglucemia, la pediatra opta por ponerle una inyección de glucagón y le abre una vía para administrarle un bolo de glucosa y lo trasladan en una ambulancia medicalizada al Hospital de Cruces.
Durante el mes de agosto, Gorliz estuvo sin pediatra entre el 14 y el 30. Y, según el lenguaje burocrático del Departamento de Salud, «la profesional atiende a los/as niños/as en el centro de salud de Plentzia (8 personas)». Y, entre tanto, «del 1 al 14 de agosto, la profesional atiende a los/as niños/as en el centro de salud de Gorliz (35 pacientes)».
Así se puede leer en las respuestas que ha remitido el Departamento de Salud al Parlamento de Gasteiz a la pregunta sobre la situación de la pediatría durante el periodo estival hecha por la Rebeka Ubera, de EH Bildu.
Urduña, todo el verano
En el cuadro que figura junto a esta información se puede encontrar una visión de las localidades y zonas sanitarias que han estado días sin pediatra. Son todas las que están, pero a buen seguro no están todas las que son, puesto que sólo hemos podido realizar un primer análisis de la documentación señalada. Por ejemplo, en zonas de Araba, donde en algunos casos la ausencia de pediatras por vacaciones se reflejan como corregida por la asistencia a cargo de la Atención Primaria.
Del cuadro llama la atención que Urduña, una localidad de más de 4.200 habitantes, ha estado sin pediatra todo el mes de junio, todo el mes de julio, todo el mes de agosto y todo el mes de setiembre hasta la firma de la respuesta de Gotzone Sagardui el 19 de setiembre. Sus niñas y niños debían ir hasta Amurrio durante todo el verano para ser atendidos.
También se comprueba que localidades como Ondarroa y Lekeitio, que reciben un gran número de turistas en verano, tampoco han tenido pediatra y la previsión fue que ya les tratarán los médicos de Atención Primaria.
En Gipuzkoa destaca los muchos días que Soraluze, con casi 4.000 habitantes, ha estado sin pediatra o lo tenía que compartir con Elgoibar. Y otras dos localidades costeras como Mutriku y Deba han estado todo el verano compartiendo los servicios pediátricos al 50%.