«Un acuerdo político para dar la oportunidad de vivir un tiempo nuevo» a Iruñea es como ha defendido el PSN su pacto para presentar una moción de censura en el Consistorio de la capital navarra que pondrá fin a la efímera alcaldía de Cristina Ibarrola para convertir a Joseba Asiron de nuevo en primer edil de la ciudad, aunque sin entrar la formación de María Chivite en la Junta de Gobierno.
El encargado de detallar el contenido de ese acuerdo ante los medios ha sido el secretario de Organización del PSN, Ramón Alzórriz, quien ha estado acompañado por el grupo municipal de su formación en Iruñea, con Marina Curiel, su portavoz, al frente.
Alzórriz ha explicado qué ha llevado al PSN a alcanzar este acuerdo con EH Bildu que llevará a Joseba Asiron a recuperar la Alcaldía de Iruñea. En concreto, ha desgranado tres motivos, con «la inacción política de la alcaldesa Cristina Ibarrola y UPN» como el primero de ellos, lo que se ha plasmado en que la ciudad ha estado «paralizada durante seis meses, en los que no ha echado a andar ninguno de los proyectos prioritarios». Además, ha criticado la manera de gobernar de Ibarrola, que ha calificado de «prepotente, opaca y ajena al diálogo constructivo».
En segundo lugar, ha citado el hecho de que Ibarrola «ha utilizado la Alcaldía para confrontar con el Gobierno de Navarra y el de España en lugar de hacer política para mejorar la vida de la ciudadanía».
Y en tercero, que el PSN haya alcanzado «un acuerdo con EH Bildu en el que se recogen principios de valores éticos y democráticos y las prioridades de la ciudad».
Alzórriz ha señalado que «sé que es difícil» que se haya llegado a un acuerdo para que el PSN facilite la llegada a la Alcaldía de Asiron, pero ha remarcado que «solo con decisiones valientes podemos avanzar como sociedad».
En este sentido, ha reconocido que su partido aseguró que no llevaría a la Alcaldía ni a Ibarrola, ni a Asiron, pero que en su momento dieron una oportunidad a la candidata de UPN con su abstención, a pesar de que cada vez que han pactado con la formación regionalista «nos ha traicionado», como ocurrió con los Presupuestos de Iruñea de 2021, aprobados por el entonces alcalde Enrique Maya con el apoyo del PSN.
Pero ante la forma de gobernar de Ibarrola, ha añadido Marina Curiel, han optado por facilitar el paso a Asiron, porque «debemos sacar a Pamplona de la situación de bloqueo en la que se encuentra».
En las negociaciones para alcanzar el pacto no ha intervenido Santos Cerdán, según ha asegurado Alzórriz, quien ha puesto el acento en que ha sido un acuerdo «hecho en Navarra», aunque coordinado con el secretario de Organización del PSOE. Ha recalcado que cuenta con el «respaldo total de la Ejecutiva» del PSN, y de la dirección federal, y ha añadido que «no hacemos pactos encapuchados», en referencia a las palabras del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, sino que «hacemos pactos públicos y publicados».
Sobre la posibilidad de que UPN sea desbancado de otras alcaldías como las de Eguesibar, Barañain o Lizarra, siguiendo el modelo de Iruñea, Alzórriz ha señalado que «las actitudes son diferentes y la postura es diferente», por lo que, por el momento, no se plantea algo parecido a lo que sucederá en Iruñea.
El secretario de Organización del PSN ha concluido insistiendo en que el acuerdo de moción de censura en Iruñea se enmarca en su empeño en «tomar decisiones siempre en favor de la ciudadanía de Pamplona, mirando a la convivencia y mirando al Gobierno municipal» de la ciudad, que aspiran conseguir en 2027.
El PSOE niega una negociación previa a la investidura
En clave estatal, el secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, negociador de los pactos de investidura con los independentistas catalanes y vascos, ha negado que la moción de censura contra la alcaldía de Iruñea estuviera acordada con EH Bildu antes de la investidura del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez.
En declaraciones a los periodistas en los pasillos del Congreso, el diputado socialista por Nafarroa ha puntualizado con un «no» que esta moción fuera un pacto anterior a la investidura de Sánchez, mientras que la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha dicho que lo «único que había previamente era un ayuntamiento absolutamente paralizado que no daba respuesta a las realidades de los ciudadanos».
Montero no ha querido trasladar este pacto en el Ayuntamiento de Iruñea a futuros acuerdos con este partido en otras instituciones vascas y ha puntualizado que «cada institución tiene su diagnóstico y su tratamiento».
«Y el PSOE lo que pretende es que los ciudadanos de Pamplona tengan una corporación local que trabaje para su servicio», ha aseverado, al tiempo que el ministro español de Transportes, Óscar Puente, ha dejado claro en el pleno del Congreso que no tiene «complejos» para apoyar a Bildu, como partido «progresista y democrático» que es.
«Le digo sin complejos que no tengo ningún problema, ninguno, en que un partido progresista y democrático de este país se haga con la alcaldía de una capital de provincia de España», ha dicho durante su primera intervención como titular de Transportes.