Convocados por los sindicatos ELA, LAB, CCOO y UGT, las trabajadoras y trabajadores de la Hostelería de Bizkaia han vuelto a salir a la calle este jueves para mostrado su hartazgo al ver que la inflación sube y ellos y ellas, en cambio, siguen con los mismos sueldos que hace tres años.

Bajo el lema ‘Esta ronda que la paguen ellos’, la movilización ha tenido lugar frente a la sede la Asociación de Hostelería de Bizkaia, en el número 38 de la Gran Vía bilbaina, donde han denunciado que las negociaciones del convenio para el sector no avanzan desde hace un año.

El convenio de hostelería de Bizkaia afecta en la actualidad a alrededor de 25.000 trabajadores y lleva vencido desde el año 2020, sin subidas salariales pactadas desde entonces.

Tras las últimas jornadas de huelga realizadas en octubre, el día 31 de ese mismo mes tuvo lugar la última reunión entre la patronal y los sindicatos. Pero no hubo ningún avance. «Fue muy frustrante, porque vinieron a repetir los mismos postulados que hace un año, con un planteamiento cerrado», ha señalado en nombre de la unidad sindical Iñigo Alonso, de LAB.

En este sentido, los representantes sindicales han dicho no entender la postura de la patronal vizcaína de no garantizar la mínima recuperación del poder adquisitivo cuando tanto en Gipuzkoa como en Alava se han alcanzado acuerdos en esa dirección.

Tal y como ha señalado Alonso, la oferta de la patronal sigue siendo la misma que la que hizo en noviembre del año pasado, algo que no entienden los sindicatos. «Vemos como repercute en los clientes la subida del IPC, sin embargo, los salarios siguen siendo los mismos», ha explicado.

Además, los sindicatos aseguran que en los últimos dos años se han superado los niveles de ocupación hotelera y facturación del 2019. Por ello, piden a la patronal la firma de un nuevo convenio con subidas salariales vinculadas al IPC.

«No entendemos, no comprendemos y no compartimos por qué la Asociación de Hostelería de Bizkaia, a día de hoy, no modula los planteamientos para llegar a ese mínimo que pedimos, que es el mantenimiento del poder adquisitivo principalmente», ha subrayado Alonso.

Cambio de estrategia sindical

Los sindicatos convocantes han dejado de lado la convocatoria de nuevas huelgas, tras las celebradas en octubre ya que, tal y como han reconocido, en este sector es complicado generar incidencia a través de paros; más si cabe, cuando algunos ámbitos como colectividades u hoteles, se han facilitado acuerdos «a cuenta de convenio» que han contribuido a desactivar esa parte de las movilizaciones.

En todo caso y tal y como ha precisado Alonso, han comprobado que este modelo de movilización, con protestas en la calle o ante determinadas sedes o espacios con concentración hostelera, han generado ya «inquietud y cierta incidencia» en la patronal porque les consta que «hay ya asociados que están llamando a la asociación para que esto se solucione».