Es realmente sorprendente que esta entrevista vea la luz, dado que, según palabras de Raji Sourani (Gaza, 1953), es un «milagro» que aún esté vivo. Así lo afirma, sin ambages, este incansable abogado que lleva 40 años luchando por los derechos humanos y contra la ocupación israelí. Tras los sucesos del 7 de octubre, aviones de combate destruyeron su hogar en Gaza. Durante esos ataques experimentó, junto a su esposa e hijo, lo que describe como «los minutos más largos» de su vida. Aunque inicialmente se resistió a abandonar el enclave para evitar contribuir a otra "Nakba", finalmente cedió y logró cruzar el paso de Rafah. Su dilatada trayectoria le ha llevado a representar a Sudáfrica en su causa contra Israel por genocidio ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ). El viernes acudió a Burlata a participar, junto a Lidón Soriano, en una conferencia organizada por el Ayuntamiento. Entre charlas y reuniones también ha sacado algo de tiempo para GARA.

¿Cómo logró salir de Gaza?

Nunca pensé en irme. Podría estar en Nueva York, Madrid o Ginebra. Pero elijo Gaza. Esa es mi elección voluntaria. Tengo una familia muy arraigada en Gaza. Desde hace seis siglos que están allí. Pero fui objetivo dos veces. Una de ellas, después de bombardear mi casa, me pregunte: ¿por qué? Yo estaba haciendo entrevistas para los principales medios de comunicación, porque esa es mi misión, decir la verdad al poder, transmitir el mensaje de la gente y la gravedad de la situación. Hasta ahora, más de 120 periodistas han sido asesinados por informar, y yo seguía en casa. Pero mi punto débil eran mi esposa y mi hijo; ambos se negaron a separarse de mí. Así que sentí una extraña sensación. Cuando miras a tu esposa o a tu hijo, no puedes hacer nada al respecto. Estábamos indefensos y ellos son lunáticos, porque bombardearon el hospital, la unidad de cuidados intensivos, las incubadoras de los bebés... Así que decidí marcharme por consejo, básicamente, de mis amigos de incluso de dentro de Gaza. Hubo cierta coordinación en el paso, lo que no es fácil, y pude cruzar la frontera.

¿Estamos ante la situación más drástica desde el Nakba?

Para mí fue algo sin precedentes. Fuimos testigos de cinco guerras entre 2008 y 2023. Documenté personalmente todos los crímenes de guerra, pero nunca esperé que Israel hiciera el 5% de lo que ha hecho desde 7 de octubre. Y cuando digo que no esperaba eso es porque tener a los civiles en el ojo del huracán como el verdadero objetivo de la guerra nunca había sucedido.

Cuando escuché al Primer Ministro Netanyahu decir que los gazatíes debían abandonar Gaza, yo estaba confundido. ¿Quería decir que iba a cometer una limpieza étnica y genocidio alejándonos? No pensé que llegaría a esto. Y cuando el Ministro de Defensa se dirigió a la gente de Gaza, diciendo que no habría agua, ni comida, ni combustible, ni electricidad, eran amenazas, intimidaciones. Cuando dijeron que no podían distinguir entre civiles y terroristas y que eran animales, no lo digerí. No dejaron nada sin ser atacado. Mayores, jóvenes, lugares residenciales, casas, campos de refugiados, familias enteras borradas del mapa. Nunca pasamos este hambre, y estar tres, cuatro, cinco días sin comida, sin agua, sin lo básico, es nuevo. Y todo eso ha ocurrido entre ataques de F-35, de F-16, de tanques Merkava, de artillería. No sabes de dónde viene la muerte. ¿Del mar? ¿De la tierra? ¿Del cielo? Ya no hay hogar seguro en Gaza.

Ahora se vuelve a sentar en La Haya formando parte del equipo legal de Sudáfrica que ha denunciado a Israel por genocidio ante la CIJ. ¿Qué espera del juicio?

Creo que Sudáfrica ha hecho historia. Como palestino, no se puede elegir mejor país por su historia, por sus antecedentes, por el apartheid que vivieron. En el nivel de los hechos, se les proporcionó una imagen detallada completa, se denunció el dolor de Gaza, el sufrimiento, la sangre. Y al mismo tiempo hemos tenido la parte legal, gracias a la arrogancia israelí. Desde el Presidente de Israel hasta decenas de ministros y altos mandos israelíes, todos han dicho que sí, que su intención era expulsar a la población de Gaza. Normalmente es muy difícil probar la intención, pero ellos proporcionaron el material.

Es el caso más importante en el tribunal más importante de la tierra. Técnicamente hablando, creo que el tribunal es independiente, creíble y respetado. Ahora, hay dos componentes en el caso. Uno, el genocidio. Esto puede llevar algún tiempo. Quiero decir, no es una acusación fácil. Tienes que proporcionar todas las pruebas necesarias, etc. Lo haremos, pero lleva tiempo, tal vez un año, dos o tres. Por otro lado, están las medidas provisionales. Esto no es algo que pasó. No. Es un crimen en proceso. Y tenemos que detenerlo. Por eso pedimos un alto el fuego inmediato. Porque cada minuto que pasa, la gente muere. Tenemos que salvar la vida de las personas, eso es lo más importante en la tierra. Segundo, tenemos que detener la hambruna y permitir que la ayuda humanitaria entre en Gaza. Por último, permitir que la gente vuelva a sus casas, aunque estén destruidas.

¿Qué feedback está recibiendo Sudáfrica por parte de diferentes países?

La bola de nieve empezó a funcionar. Muchos se están sumando y eso es muy positivo. Creo que muchos estados están celosos de la posición de Sudáfrica y otros sienten vergüenza. Israel, con este respaldo de EE.UU. y Europa, tiene la sensación de que es inmune, que está por encima del derecho internacional, y que puede hacer cualquier cosa. Así que proporcionaron a Israel cobertura política legal y les apoyaron incluso militarmente. Es decir, con armas y financieramente. EE.UU. les dio doce mil millones de dólares para apoyar la guerra. Y las bombas estaban recién salidas del horno.

¿Entiende usted la lógica de la Administración de Biden? Hay una legitimación no solo a nivel moral, sino también una implicación política.

Son cómplices. Nos bombardean con los F-16 y F-35, con las bombas inteligentes estadounidenses. Ellos envían portaaviones y los británicos, grandes cañoneras. Además, EE.UU. está vetando en el Consejo de Seguridad incluso el alto el fuego. Lo que significa que les están dando licencia para matar. Así lo entiendo como palestino y como activista de derechos humanos. Por eso somos parte del caso que el Center for Constitutional Rights [Organización de defensa legal de EE.UU.] presentó contra Joe Biden y su administración, acusándolos de apoyar y no evitar el genocidio.

La UE, a través de la ayuda que proporciona, lleva muchos años en Gaza, pero no ha levantado la voz.

Cometen un gran error. Cuando apoyas el derecho de autodefensa de Israel, apoyas la ocupación. Es decir, le dicen que tiene derecho a matar  niños, a destruir Gaza y los territorios ocupados. Y luego les dicen a los palestinos: tomen algo de dinero, os estamos ayudando. Esto es una vergüenza. ¿Por qué Israel forma parte de Eurovisión? ¿Por qué forma parte de torneos de fútbol? ¿Por qué tienen hermanamientos entre ciudades? Israel exporta a Europa alrededor del 62% de su comercio. ¿Por qué le están dando privilegios a Israel? El Ejército destruyó todos los proyectos de la UE en los territorios ocupados. ¿Por qué los recompensas? Cuando el Reino Unido apoya a Israel, al igual que los franceses, los alemanes, es una gran lástima. Si le preguntas a cualquier palestino ¿qué piensas de los europeos? Te dirán que son coloniales y racistas. Por la selectividad y el doble rasero. Miren en Ucrania cómo lo hicieron y mírennos a nosotros. Gracias a Dios que hay estados que defendieron sus normas morales y el Estado de derecho. Me refiero a España, Bélgica, Irlanda y Luxemburgo.

¿Erradicar a Hamás es un pretexto para justificar el ataque sobre toda Palestina? La ofensiva se extiende a Cisjordania, donde no gobierna y sí lo hace la Autoridad Nacional Palestina.

¿Israel tiene un problema con Hamás? Vale. ¿Israel tiene un problema con Fatah? Vale. ¿Israel tiene un problema con la Yihad o el FPLP? Vale. Estos grupos armados o de resistencia tienen reglas de enfrentamiento con Israel. A nosotros, como organización de derechos humanos, nos interesa proteger a los civiles en tiempo de guerra. Tras la Segunda Guerra Mundial, los estados, intelectuales y académicos se preguntaron qué había pasado. 85 millones de civiles habían sido asesinados, había sucedido el Holocausto contra los judíos. Por eso hicieron las Convenciones de Ginebra y por eso hicieron la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Ahora, Israel sigue atacando a civiles y no pasa nada. ¿Por qué atacan hospitales? ¿Por qué atacan refugios?

El mundo entero habla de la solución de los dos Estados, pero nunca llega. Se intentó hace 30 años en Oslo sin ningún resultado. ¿Hemos vuelto al punto cero?

Queremos que termine la ocupación. Oslo, por supuesto, fue firmado. Sabíamos que no nos lleva a ninguna parte desde el primer día. Netanyahu, muy orgulloso, lo hizo fracasar. Llamaban a Arafat su socio. Obtuvieron el premio de la paz y lo mataron. A Isaac Rabin también lo mataron. Así que lo que queremos es simplemente el fin de la ocupación y practicar nuestro derecho a la autodeterminación, a tener un proceso. Ellos lo hicieron y nosotros también merecemos justicia y dignidad.