La Diputación de Gipuzkoa y SOS Racismo han presentado este lunes la quinta edición del programa Izan Harrera que tiene como objetivo conectar a personas y familias migrantes y refugiadas, con personas voluntarias del herrialde, para así mejorar y facilitar diversos procesos, como pueden ser el aprendizaje de los idiomas, la búsqueda de empleo, opciones de vivienda, y las relaciones generales con el entorno.

En la rueda de prensa han participado Ion Gambra, director foral de Derechos Humanos y Cultura Democrática; Silvana Luciani, de SOS Racismo; Ainhara Muga, responsable de proyectos de Real Sociedad Fundazioa, una de las entidades colaboradoras del programa; y Abigail Caminos como mentora y Mammadou Cisse como mentorado de Izan Harrera, una de las 16 parejas que se formó el año pasado.

El mensaje a la ciudadanía ha sido claro, que se animen a participar como voluntarios y a «ser parte de una amistad inesperada, de una historia humana de apoyo, solidaridad e inclusión social».

«Siempre decimos que Gipuzkoa es un territorio solidario, en gran parte por el tejido social y por los miles de voluntarios y voluntarias que colaboran con diferentes entidades y causas en su día a día», ha subrayado Gambra, animando a todas aquellas personas que puedan tener en interés en participar a acercarse y preguntar.

«Deconstrucción de prejuicios, estereotipos y falsos rumores»

Por su parte, Luciani ha calificado de «exitosa» la edición anterior. «En 2024 aspiramos a formar al menos unas 20 parejas y, por ello, necesitamos la implicación de la sociedad e invitamos a la ciudadanía a sumarse y realizar una forma de voluntariado que nos enriquece como personas», ha remarcado.

«A través de las relaciones de mentoría y creación de los vínculos sociales, las personas deconstruyen prejuicios, estereotipos y falsos rumores», ha añadido.

A lo largo de 2023 se crearon 16 parejas. Sobre los beneficios obtenidos, subraya que en el caso de las personas, estas «manifiestan sentirse a gusto con su mentor o mentora, con quien pueden hablar de sus expectativas y planes de futuro, construir una historia común en el territorio, sentirme más integrados lo cual mejora su bienestar psicosocial y su autoestima».

«Algunos de ellos y ellas han ampliado su red y un mejor conocimiento de los recursos comunitarios, además de multiplicar las opciones de inclusión práctica en diferentes terrenos –idioma, opciones de búsqueda de trabajo, vivienda, opciones de ocio, etc.», ha explicado Luciani.

En este proyecto colaboran entidades como el Festival de Cine de Donostia, Kutxa Fundazioa, Aquarium, Topic, Real Sociedad Fundazioa, GBC, San Telmo Museoa, la empresa de turismo local Ikusnahi o Fundación Cristina Enea.

Asimismo, un equipo de psicólogas voluntarias asesora a las mentoras en los casos en los que necesiten una orientación en los posibles casos de relaciones más complejas.